La formación continuada en nefrología cumple una doble función en el médico especialista o en vías de formación: asentar y potenciar los conocimientos previamente adquiridos, así como incorporar al bagaje intelectual aquellos nuevos que se van produciendo. Existen múltiples vías de aprendizaje, y entre ellas se sitúan de forma preferencial cursos y congresos.
Una realidad persistente en nuestra era es la dejación de los poderes públicos en la formación continuada. La ausencia de presupuestos destinados a la misma convierte al médico en un llanero solitario en busca de su perfeccionamiento profesional, algo que por otra parte demanda el paciente, cada vez mejor informado con la incorporación de las nuevas vías de comunicación telemática. Por ello, las sociedades científicas recogen esa necesidad y encaminan sus esfuerzos hacia el objetivo que los profesionales demandan. En este caso, la Sociedad Española de Diálisis y Trasplante (SEDYT) organiza numerosas actividades formativas anuales, y entre ellas, el congreso anual.
No podemos olvidar en este apartado el esfuerzo de la industria de productos sanitarios en el apoyo de estas actividades formativas, especialmente en esta época de profunda crisis económica. Pero esta crisis no es sino la oportunidad para este sector de dirigir los escasos esfuerzos que les permite la economía hacia productos de calidad, evitando la dispersión y el dispendio innecesario.
El xxxvi congreso anual de la SEDYT se celebrará en Cartagena el próximo mes de mayo de 2014 (fig. 1). Pero, ¿qué aporta?
Desde el punto de vista de nuestra especialidad, Cartagena es una ciudad pequeña, y en ese sentido, ideal para la promoción de nuestro ámbito de actuación y la información a la ciudadanía. Aspectos epidemiológicos, diagnósticos y terapéuticos pueden ser publicitados con rigor entre nuestros pacientes y sus familiares, con el inestimable apoyo de los medios de comunicación. Y al mismo tiempo, las autoridades sanitarias conocerán de primera mano algunos de los problemas que tenemos en nuestro quehacer diario.
Desde el punto de vista de la formación continuada, basta con leer el programa científico para comprender que este es intenso, extenso, con temas de máxima actualidad, y como no, con excelentes docentes del campo de la nefrología, medicina interna, angiología y cirugía vascular, endocrinología y medicina intensiva.
Revisaremos en un formato de actualizaciones una visión panorámica del trasplante; novedades terapéuticas en patologías prevalentes y de alto impacto renal y cardiovascular como la diabetes o la hiperuricemia, conjuntamente con otras menos prevalentes pero dramáticas como el síndrome hemolítico-urémico atípico; aspectos novedosos en la mejora de la realización de accesos vasculares complejos, y en el sellado de catéteres desde el punto de vista de la prevención de infección e inflamación; elección terapéutica en ERCA; supervivencia en hemodiálisis desde la perspectiva de la técnica y de la dosis, acercándonos a lo básico (intercambio de solutos), y a las novedades en dializadores y líquidos de diálisis; una breve pincelada de modelos de gestión; enfermedad ósea mineral; y aspectos fascinantes de la tecnología y su impacto en enfermedades mortales o incapacitantes como es el caso de la aféresis o de las terapias continuas en la sepsis. Y todo ello impartido por primeras espadas de índole nacional e internacional, a los que, como no, nuestra mayor gratitud, porque en nuestro aprendizaje gremial son imprescindibles.
En cuanto a los médicos en formación, además de la parte formativa, se les ofrece la oportunidad de plasmar los conocimientos adquiridos en investigación en la presentación de comunicaciones, que por otra parte son un activo flujo de contrastes de conocimientos y conductas de los diferentes equipos nefrológicos.
De acuerdo con los tiempos, desde la organización hemos sido austeros en gastos superfluos, pero muy ambiciosos en contenidos y docentes. Y como señalábamos al inicio de esta editorial, el masivo apoyo de las industrias del sector nos hace ver que nuestro trabajo ha sido bien valorado.
Entonces, ¿qué nos falta? Vosotros. Os esperamos