En la segunda edición de Lecturas sobre Desarrollo, el Profesor Emérito Guillermo Ramírez Hernandez actualiza las 36 lecturas que compones el libro; en dicha edición de 2016 nos ofrece nuevas reflexiones y otras lecturas sobre el mismo tema y que se basa en aquella primera edición publicada por la entonces Escuela Nacional de Economía. El texto contribuye a dar respuesta a las viejas aspiraciones de servir para la docencia y para acercar a los estudiantes a los grandes pensadores sobre los temas de actualidad, en particular sobre los aspectos relevantes del desarrollo.
Así, para su autor, tener el privilegio de apoyar a los estudiantes viene de su acercamiento diario a ellos, de observar su juventud, su energía, sus ganas de crecer y llegar a poseer conocimiento; pues mediante su trabajo, y con un conocimiento claro, podrán adquirir los recursos para concretar sus esfuerzos y llegar a ser alguien en la vida, a través de sus méritos académicos y profesionales.
Los años nos van cambiando, y se tiene que ir llegando al punto donde no se tenga temor de dar información para esclarecer cómo operan las esferas más elevadas, a las cuales solo llega un reducido grupo de personas, la élite, para todos los demás, se desconoce qué se hace y cómo se hace.
Es por eso que cada vez que se lee y se escucha hablar al profesor Ramírez, uno debe considerar lo que está expresando porque se puede entender el mundo universitario de forma profunda, con la mirada del autor, que además, ha sido director de la Facultad de Economía y es Profesor Emérito de la misma.
La lectura del prólogo señala que la fecha en la que habían decidido elaborar un material para los alumnos de la Escuela Nacional de Economía fue en 1969, con una directora (mujer) Ifigenia Martínez, al frente de la institución, recordemos que en 1968 se había llevado a cabo un movimiento donde los protagonistas habían sido los estudiantes y el gobierno; y la autoridad de la Escuela de Economía pidió lecturas cuyo contenido fuera analítico, crítico y constructivista, pues ello era necesario por que: que permita a los universitarios la evaluación objetiva de las condiciones económicas, políticas y sociales de la nación dentro de un contexto internacional, así como su participación nacional dentro del proceso de la democratización política económica que al dinamizar, equilibrar o transformar nuestro desarrollo, garantice la paz, el bienestar social y derecho a la cultura… palabras de la entonces directora, Ifigenia Martínez.
Y la petición continua vigente, pues las palabras de la directora se habían dado en el contexto de eventos que un año atrás habían marcado al país y era difícil querer activar tantas peticiones.
Se sabe que estudiar, leer, la cultura, la vivienda digna, una alimentación medianamente satisfactoria sería lo que un joven puede aspirar a lograr en sus años universitarios, sobre todo en una licenciatura como economía, donde se nos dice que el objeto de estudio es el individuo, ya que él es el que da vida a la sociedad.
Hace 46 años que se pidió la elaboración del material para la materia de Teoría del Desarrollo, y lo más admirable es que desde ese entonces ya se tenía una gama de autores que estudiaban el término y sus nuevas acepciones, la interpretación que cada quien quiere darle, desde el punto de vista económico y desde luego, lo estamos utilizando cada vez más.
Es en ese contexto que se le pide al equipo de trabajo realizar un material, ya que estaba en puerta una reforma educativa, como en la actualidad, la Facultad de Economía que tiene como proyecto nuevamente una reforma, y el libro nos deja ver las lecturas actuales todas sobre las diferentes escuelas y pensamientos de desarrollo, donde se destaca que “el problema fundamental de la economía moderna es la insistencia de la corriente dominante de considerar al modelado matemático como la única forma útil y apropiada de hacer economía”… (Lawson, 1997 y 2003).
Al leer y reflexionar, uno se puede trasladar a escenarios actuales, a pesar de que se trata de lecturas incluso algunas de más de 50 años, y se puede llegar a la conclusión de que: la historia se escribe lo más objetivamente que se puede, pero para escribir se tiene que tener el tiempo, conocimiento previo y estudio de lo que se va escribir, por lo cual, no cualquiera escribe, por ello, las lecturas que he dejado leer a mis alumnos son de autores de Occidente, y en algunos casos de Estados Unidos; de nuestra realidad y de cómo explicar las condiciones de desarrollo de México, no es fácil, pues en la mayoría de las lecturas se marca una división grande entre naciones desarrolladas y subdesarrollas, periferia y satélite, en vías de desarrollo, industrializadas y agrícolas, o abastecedoras de materias primas, norte y sur, cultural, religión, incluso por color de piel, etnia y cuestiones de esfuerzo u ocio.
La historia nos hacen entender el presente, y este material nos ayuda a continuar y comprender por qué nuestro desarrollo tiene una tasa de crecimiento de 2.5% (claro con respecto a 1.8% del año 2014), y nuestro desarrollo industrial, abastecer con nuestras materias primas al exterior, y hoy incluso pasados ya 500 años seguimos teniendo una gran cantidad de metales y continuamos siendo líderes en la “plata”, a pesar de que hay cambios en las nuevas tecnologías y en la utilización de los combustibles fósiles, continuamos exportando 2.2 millones de barriles diarios; el escenario mundial pide al Estado la contracción de su intervención, que desde finales de la década de 1970 las potencias desarrolladas, nos recomiendan (mandatan) que el gobierno solamente sea un ente regulador del mercado, entre oferentes y demandantes, y que las libres fuerzas del mercado nos den los mejores precios, el mejor producto y diversos tipos, tengamos como consumidores personas con “dominio sobre el medio en que vivimos”, calidad y alcance de acuerdo a nuestros recursos económicos.
El material esta pensado como apoyo para los estudiantes de la Facultad de Economía y también como un apoyo para los docentes, encargados de leer, estudiar, reflexionar, analizar, criticar y, si se puede, construir la conciencia de que no sólo las proyecciones matemáticas darán la respuesta a la distribución de los recursos, pues recordemos que desde el primer día del propedéutico, cuando iniciamos la licenciatura en economía, se nos dice que es la distribución equitativa de los recursos, y como son escasos, que alcancen para todos; ya que se pude aburguesar al trabajador, pero no será nada fácil hacer capitalista al trabajador, eso se viene estudiando desde ya varios siglos, y que bueno que este material de reflexión, social, histórico, de estudio económico con base en el individuo que es social, y no un ser exacto, inamovible o predecible, pues lo social tiene muchos contrastes y sobre todo deseos, sentimientos y ambiciones; es por eso que la consulta de Lecturas sobre desarrollo servirá a los estudiantes de la Facultad de Economía, quizá con el mismo propósito del año 1969, donde se atravesaba por una reforma educativa al igual que en este año 2016, por ello su lectura es recomendable pues el material se ha actualizado y específicamente para la formación de los estudiantes de economía.