La hipertensión arterial (HTA) en niños y adolescentes y las estrategias de prevención cardiovascular están poco estudiadas en ese grupo de edad. El objetivo del estudio es conocer los factores de riesgo cardiovascular (RCV) en una muestra de adolescentes.
Sujetos y métodosEstudio observacional transversal de una muestra de adolescentes de 12 a 17años (n=630), realizado entre octubre de 2014 y febrero de 2015 en 4 centros escolares de Cangas do Morrazo (Pontevedra). Variables sociodemográficas: edad, sexo, antecedentes personales y familiares de HTA y diabetes (DM). Variables antropométricas: índice de masa corporal (IMC) (kg/m2), perímetro de cintura (cm), índice cintura/talla (ICT); presión arterial sistólica (PAS) y diastólica (PAD) (mmHg).
ResultadosSe seleccionaron 295 mujeres y 335 hombres. Edad media: 13,8±1,4años. El 68% sin patologías. Patologías relacionadas con RCV: hipercolesterolemia (7,1%), enfermedad cardiovascular (1,7%), HTA (0,8%), diabetes (0,3%). IMC medio: 22,0±3,8, mayor en hombres (22,4±3,8 vs 21,0±3,2; p<0,01). Sobrepeso (IMC>P85) 23,3%, mayor en mujeres (27,6% vs 19,7%; p<0,05). Obesidad: 7%. El 63,8% PAS>P90 y el 23,7% PAD>P90.
El perímetro de cintura se correlaciona de forma positiva con la edad (r=0,1669; p<0,0001) y es mayor entre los hombres (75,4±10,9 vs 72,9±8,9; p<0,01). El 27,1% perímetro de cintura >P75 y el 7,5%, >P90. Un total de 84 (13,3%) adolescentes presentaron 2 factores de RCV (sobrepeso+otro).
ConclusionesPese a su corta edad, más del 10% de los escolares tiene 2 factores de RCV. Más del 50% presentaron valores anormales de PAS, el 20%, sobrepeso, y casi el 25%, valores anormales de perímetro de cintura.
The current guidelines for treatment of high blood pressure do not include any section dedicated to hypertension in children and adolescents or to cardiovascular disease (CVD) prevention strategies in that age group. Our study was aimed at identifying cardiovascular risk factors (CVRFs) in an adolescent sample.
Subjects and methodsA cross-sectional study of a sample of adolescents aged 12 to 17years (n=630), conducted from October 2014 to February 2015 in four schools in Cangas do Morrazo (Pontevedra). Sociodemographic variables: age, sex, personal and family history of hypertension and diabetes (DM). Anthropometric variables: body mass index (BMI, kg/m2), waist circumference (WC, cm), waist/height index (WHI), blood pressure (mmHg).
ResultsThe study sample consisted of 295 female and 335 male adolescents (mean age: 13.8±1.4). CVR-related conditions: hypercholesterolemia (7.1%), CVD (1.7%), hypertension (0.8%) and diabetes (0.3%). BMI (22.0±3,8) was higher in males (22.4±3.8 vs. 21.0±3.2; P<.01). Overweight was greater in females (27.6% vs. 19.7%; P<.05). Seven percent of subjects were obese, 63.8% had systolic BP >P90 and 23.7% had diastolic BP >P90.
Waist circumference positively correlated with age (r=0.1669; P<.0001) and was greater in males (75.4±10.9 vs. 72.9±8.9; P<0.01); 27.1% of adolescents had a waist circumference >P75, and 7.5% >P90. Eighty-four (13.3%) adolescents had two CVRFs (overweight+another).
ConclusionsDespite their young age, more than 10% of school children had two CVRFs. Abnormal SBP levels were seen in more than 50%, 20% were overweight, and only 75% had normal waist circumference values.
La patología vascular constituye una de las principales causas de muerte en los países industrializados y en vías de desarrollo1. En el año 2012, a nivel mundial, 3 de cada 10 muertes fueron debidas a enfermedades cardiovasculares, es decir, 17,5 millones de muertes, lo que equivaldría a sumar las muertes provocadas por el sida, tuberculosis, malaria, diabetes, cáncer y patologías respiratorias crónicas2.
La situación en España es similar ya que, según la Encuesta Nacional de Salud de 2013, sigue siendo la primera causa de muerte, con 252 fallecidos por cada 100.000 habitantes3. Las enfermedades cardiovasculares, el infarto y la angina de pecho constituyen la principal causa de fallecimiento, aunque con un descenso del 3,9% respecto al año anterior. A excepción de Canarias, Cataluña, Madrid, Navarra y País Vasco, donde las muertes debidas a procesos tumorales ocupan el primer lugar, en el resto de comunidades autónomas este corresponde a las enfermedades cardiovasculares. Galicia es la segunda comunidad con más muertes ocasionadas por estas patologías (372,8 por cada 100.000 habitantes), superada únicamente por Asturias (392,7 por cada 100.000 habitantes)4.
Diversos estudios han demostrado que se trata de un proceso gradual que se inicia durante la primera o segunda décadas de vida hasta la aparición de manifestaciones clínicas en edades posteriores1.
Según datos de los 3 últimos estudios epidemiológicos sobre obesidad realizados en España: PAIDOS5, RICARDIN6 y enKid7, el índice de masa corporal (IMC) en la infancia está aumentando desde 1984. En niños de 10años pasó de 18,1kg/m2 en 1984, a 18,5 en 1992 y a 18,8 en 1998-2000. En niños de 13 años pasó de 18,4kg/m2 en 1984 a 20,4 en 1992, y a 21,1 en el período 1998-2000. Este aumento, comparable al existente en otros países como Francia o Suiza8, refleja el incremento de obesidad y sobrepeso en la población adolescente, que se asocia a un mayor riesgo cardiovascular (RCV)9. En consecuencia, intervenciones en niños y adolescentes pueden ser decisivas para prevenir, retrasar o modificar este conjunto de enfermedades9.
Existen pocos estudios sobre RCV en niños y adolescentes en España. Las guías más representativas en Europa, como la de la Sociedad Europea de Hipertensión (European Society of Hypertension [ESH]) y la Sociedad Europea de Cardiología (European Society of Cardiology [ESC]) para el tratamiento de la hipertensión arterial (HTA), no prestan atención a este grupo de edad, a pesar de que durante la infancia y la adolescencia es cuando se produce la adquisición de los hábitos y estilo de vida que se mantendrán a lo largo de la vida del individuo9,10.
El presente estudio, que se ha denominado Riesgo Vascular en Adolescentes de Cangas (RIVACANGAS), pretende aportar datos relevantes sobre factores de riesgo cardiovascular (FRCV) en adolescentes con el fin de establecer programas de intervención educativa en hábitos saludables en la escuela.
ObjetivosGeneralConocer los FRCV en una muestra de adolescentes de la península del Morrazo (Pontevedra).
Específicos- •
Determinar las características demográficas y los antecedentes familiares en una muestra de adolescentes escolarizados.
- •
Evaluar los datos antropométricos en relación con los estándares.
- •
Identificar FRCV.
Epidemiológico, transversal y multicéntrico.
ÁmbitoDesarrollado entre octubre y febrero del curso 2014-2015, en 4 centros escolares de Cangas do Morrazo (Pontevedra). Las sesiones informativas y las determinaciones antropométricas se llevaron a cabo en enero y febrero de 2015.
SujetosCriterios de inclusión: adolescentes entre 12 y 17años, matriculados en uno de los 4 cursos de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) pertenecientes a los centros educativos existentes en Cangas do Morrazo cuyos padres/madres/tutores dieron el consentimiento informado.
Criterios de exclusión: no asistencia a clase el día de la intervención. Negativa a realizar el cuestionario y/o las determinaciones antropométricas.
Cálculo del tamaño muestralLa población juvenil de Cangas supone el 5,3% del censo de población total (26.567 habitantes: 13.099 hombres y 13.468 mujeres). Corresponde a 693 adolescentes varones y 702 hembras en el rango de edad que comprende de 12 a 17años4. Por tanto, para conseguir una precisión de 0,04 unidades en la estimación de una media mediante un intervalo de confianza con corrección para poblaciones finitas al 95% bilateral, asumiendo que la desviación típica es de 0,50 unidades y que el tamaño total de la población es de 1.395, se calculó necesario incluir 420 sujetos en el estudio.
VariablesSociodemográficas: edad, sexo, antecedentes personales y familiares de HTA y diabetes (DM). Obtenidas mediante encuesta a los adolescentes.
Determinaciones antropométricas: peso (kg), estatura (m) y perímetro de cintura (PC) (cm). Se calculan el IMC (kg/m2) y el índice cintura/talla (ICT). La antropometría se realizó en una zona separada, sin zapatos y con ropa ligera. Se emplearon básculas y tallímetros portátiles calibrados.
Se definieron sobrepeso y obesidad como la presencia de un IMC superior a los percentiles P85 y P97, respectivamente, para edad y sexo según los estándares de referencia para la población general definidos en las tablas Orbegozo11. Para comparar los datos con estudios internacionales se valoró el IMC según los criterios de punto de corte +1DE para sobrepeso y a partir de 2DE para obesidad, que establece para población de 2 a 18años valores de IMC derivados de los límites propuestos para adultos por la OMS (25kg/m2 para el sobrepeso y 30kg/m2 para la obesidad)12.
El perímetro de la cintura se midió con una cinta métrica en contacto con la piel, sin apretar y con el abdomen relajado, por encima del borde superior de la cresta ilíaca. Se utilizó el punto de corte correspondiente a los percentiles P75 y P90, que corresponde a los valores mejor asociados con la resistencia a la insulina, factor subyacente para la diabetes tipo2 y enfermedades cardiovasculares en niños13.
Se calculó el ICT. Un ICT superior a 0,5 es un FRCV14,15. El porcentaje de grasa se calculó en función del ICT16.
Medida de la presión arterial (PA): expresada como presión arterial sistólica (PAS)/presión arterial diastólica (PAD) (en mmHg). Se utilizaron 2 esfigmomanómetros oscilométricos validados y calibrados tipo Omron M3®. Tras 5min de reposo se realizaron 2 medidas de la PA separadas entre sí 3min y se calculó la media17. Se definieron como valores alterados en PA o prehipetensión cifras de presión >P90 para edad, sexo y talla18, y se consideró HTA valores de PAS y/o PAD ≥P95.
Los resultados se recogieron de manera anónima en una hoja de registro ad hoc que incluía todos los cuestionarios administrados.
ProcedimientoEn septiembre de 2014 se contactó con los directores de los 7 centros educativos existentes en Cangas do Morrazo que impartían los 4 cursos de la ESO. Se les proponía la realización del estudio referido y una charla complementaria sobre RCV y estilo de vida saludable. Aceptaron participar en el estudio 4 centros (2 públicos y 2 privados). Sus directores informaron a los padres sobre el proyecto y solicitaron su aprobación para la participación de sus hijos, mediante la firma de un consentimiento informado. No obstante, se respetó el deseo de no participar de los alumnos que así lo manifestaron.
El día fijado por el director para la realización del estudio se distribuyeron, en un aula, las hojas de recogida de datos entre los alumnos, que las cumplimentaron anónimamente. En otra aula se realizaban las determinaciones antropométricas y se medía la PA a los alumnos que ya habían cumplimentado la encuesta.
En las semanas posteriores al estudio se realizaron charlas informativas en los colegios sobre hábitos higienicodietéticos adecuados.
Análisis de datosSe utilizó el programa G-Stat 2.0® (GlaxoSmithkline). Los datos cualitativos se expresan como porcentajes y los cuantitativos como media ±desviación estándar (DE). Los límites de confianza se calcularon al 95% (IC). Se utilizó el test de chi-cuadrado para comparación de proporciones o la prueba de Fisher en el caso de muestras pequeñas. Para comparar medias se empleó la t de Student para variables que siguen una distribución normal (test de Kolmogorov con las correcciones de Lilliefors), y los test no paramétricos U de Mann-Withney o Wilcoxon para variables sin distribución normal. Las correlaciones se determinaron mediante la r de Pearson o Rho de Spearman según fueran o no paramétricas. La significación estadística se fijó en p<0,05.
ResultadosCaracterísticas de la muestraParticiparon 630 escolares (295 mujeres y 335 hombres), el 85,5% de los alumnos de los 4 centros educativos participantes, y el 56,7% del total de los escolarizados de esas edades en el municipio de Cangas do Morrazo.
La edad media fue de 13,8±1,4años, sin diferencia entre sexos. La distribución etaria se representa en la tabla 1.
Distribución etaria de la muestra
Sexo | Mujer, n (%) | Hombre, n (%) | Total, n (%) |
---|---|---|---|
Edad (años) | |||
12 | 67 (22,7) | 68 (20,3) | 135 (21,4) |
13 | 59 (20,0) | 88 (26,3) | 147 (23,3) |
14 | 67 (22,7) | 89 (26,6) | 156 (24,8) |
15 | 64 (21,7) | 54 (16,1) | 118 (18,7) |
16 | 29 (9,8) | 26 (7,8) | 55 (8,7) |
17 | 9 (3,1) | 10 (3,0) | 19 (3,0) |
Total | 295 (44,8) | 335 (53,2) | 630 (100,0) |
Cuarenta y cinco adolescentes (31,8%) refieren sufrir algún problema de salud. Entre los relacionados con el RCV se encuentran: hipercolesterolemia, 45 (7,1%); enfermedad cardiovascular, 11 (1,7%); HTA, 5 (0,8%), y DM, 2 (0,3%). El 17,2% de los alumnos referían tener antecedentes familiares de primer grado de HTA y el 5,9% de DM. El 18,3%, antecedente de DM en familiares de segundo grado.
Datos antropométricosEn la tabla 2 se presentan las medidas antropométricas por sexo y edad. En la tabla 3, la proporción de adolescentes con datos antropométricos fuera de la normalidad.
Determinaciones antropométricas
Edad (años) | Peso, m±DE | Talla, m±DE | IMC, m±DE | PC (cm), m±DE | PAS, m±DE | PAD, m±DE |
---|---|---|---|---|---|---|
Hombres | ||||||
12 | 49,3±11,6 | 154,1±7,4 | 20,6±4,0 | 72,5±10,4 | 112,3±14,4 | 66,0±8,1 |
13 | 56,4±10,7 | 162,4±8,0 | 21,3±3,3 | 74,1±8,0 | 125,0±13,5 | 69,4±11,6 |
14 | 60,5±13,4 | 167,7±7,1 | 21,5±3,7 | 77,0±13,8 | 126,1±13,1 | 68,0±9,3 |
15 | 65,9±11,1 | 169,4±7,0 | 22,9±3,1 | 77,5±8,5 | 129,5±14,6 | 68,2±9,5 |
16 | 62,9±12,4 | 169,6±6,2 | 21,8±3,9 | 74,7±9,6 | 124,8±12,2 | 68,9±9,7 |
17 | 75,0±18,1 | 176,9±7,2 | 24,0±5,9 | 84,4±15,9 | 126,7±15,8 | 65,2±5,1 |
Mujeres | ||||||
12 | 52,2±10,5 | 156,5±5,3 | 21,2±3,9 | 71,2±9,0 | 118,3±21,8 | 69,8±9,9 |
13 | 55,1±10,2 | 157,3±6,3 | 22,2±3,6 | 72,2±8,0 | 120,4±13,6 | 72,7±8,4 |
14 | 55,7±8,4 | 158,5±5,3 | 22,2±3,2 | 72,3±6,9 | 116,8±11,7 | 70,3±8,7 |
15 | 60,6±11,0 | 161,6±5,8 | 23,2±4,0 | 73,6±9,4 | 119,4±12,5 | 70,5±9,6 |
16 | 59,9±12,6 | 159,5±7,0 | 23,4±3,7 | 75,9±10,3 | 119,1±13,6 | 70,5±9,5 |
17 | 63,5±14,5 | 157,8±8,0 | 25,3±4,5 | 76,9±13,0 | 118,9±7,5 | 70,0±10,4 |
DE: desviación estándar; IMC: índice de masa corporal; PAD: presión arterial diastólica; PAS: presión arterial sistólica; PC: perímetro de cintura.
Proporción de escolares con datos de IMC, ICT y PA fuera de la normalidad
IMC>P85, n (%) | ICT>0,5, n (%) | Obesidad (ICT), n (%) | PAS>P90, n (%) | PAD>P90, n (%) | |
---|---|---|---|---|---|
Mujeres (n=295) | 81 (27,6) | 62 (21,0) | 52 (17,6) | 170 (57,8) | 88 (29,9) |
Hombres (n=335) | 66 (19,7) | 70 (20,9) | 69 (20,6) | 232 (69,3) | 61 (18,3) |
p | < 0,05 | NS | NS | < 0,01 | < 0,001 |
ICT: índice cintura/talla; IMC: índice de masa corporal; NS: no significativo; PA: presión arterial; PAD: presión arterial diastólica; PAS: presión arterial sistólica.
El IMC medio de la muestra es de 22,0±3,8, superior en los varones (22,4±3,8 vs 21,0±3,2; p<0,01). La proporción de adolescentes con IMC superior al P85 fue del 23,3%, mayor en las mujeres (27,6% vs 19,7%; p<0,05). La prevalencia de sobrepeso fue del 16,3%, y la de obesidad, del 7,0%. El 15,8% presentaban sobrepeso y el 5,3% obesidad según los criterios de Cole. No se encontraron adolescentes con desnutrición.
El PC se correlaciona de forma positiva con la edad (r Pearson=0,1669; p<0,0001) y es mayor entre los hombres (75,4±10,9 vs 72,9±8,9; p<0,01).
El porcentaje de grasa obtenido a partir del ICT fue de 25,9±4,9 en mujeres y de 20,6±6,8 en hombres. No hay diferencia significativa entre hombres y mujeres.
El 27,2% superaba el P75 en el PC. El 7,5% presentaban obesidad central por tener un PC superior al P90 (tabla 4).
La media del ICT fue de 0,46±0,06, sin diferencias entre sexos. El 21,0% de los alumnos tuvieron un ICT mayor de 0,5 (20,9% hombres, 21,0 mujeres), no habiendo diferencias significativas entre sexos ni entre edades.
En la tabla 5 se presenta el número de escolares con más de un FRCV (sobrepeso, obesidad abdominal, diabetes, HTA, hipercolesterolemia o enfermedad cardiovascular). Los adolescentes con 2 FRCV (sobrepeso+otro) fueron 84 (13,3%); con 3 FRCV eran 10 (1,7%).
Adolescentes con uno o más factores de riesgo cardiovascular
1.er FRCV | 2.° FRCV, n (%) | 3.er FRCV, n (%) | ||
---|---|---|---|---|
Sobrepeso IMC>P85+ | Hipercolesterolemia | 12 (1,9) | + HTA | 1 (0,2) |
HTA | 4 (0,6) | |||
ECV | 4 (0,6) | |||
Diabetes | 1 (0,2) | |||
PC>P90 | 63 (10,0) | + HTA | 3 (0,5) | |
+ Hipercolesterolemia | 6 (1,0) | |||
Total | 84 (13,3) | 10 (1,7) |
ECV: enfermedad cardiovascular; FRCV: factor de riesgo cardiovascular; HTA: hipertensión arterial; IMC: índice de masa corporal; PC: perímetro de cintura.
El 63,8% de los escolares tienen la PAS por encima del percentil 90 y el 23,7% tienen la PAD por encima del percentil 90. En la tabla 2 se reflejan los valores medios de PA de la muestra estratificados por edades.
En la tabla 6 se detallan las correlaciones halladas entre los diferentes FRCV. Existe correlación moderada alta entre el PC y el peso, entre el PC y el ICT, entre el IMC y el ICT, y entre el IMC y el PC.
Correlaciones entre las distintas variables antropométricas
Edad | Peso | Talla | IMC | PC | ICT | % Grasa | PAS | PAD | |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Edad | |||||||||
Peso | 0,3677d | ||||||||
Talla | 0,4053d | 0,5871d | |||||||
IMC | 0,2113c | 0,8682d | 0,1196a | ||||||
PC | 0,1669d | 0,7572d | 0,2973d | 0,7437d | |||||
ICT | 0,0181 | 0,5457d | −0,0942c | 0,7243d | 0,9213d | ||||
% Grasa | 0,0197 | 0,4576d | −0,2199d | 0,6950d | 0,7915d | 0,9137d | |||
PAS | 0,1399c | 0,3998d | 0,3347d | 0,2947d | 0,2791c | 0,1567d | 0,0745 | ||
PAD | 0,0256 | 0,0851b | −0,0068 | 0,1136b | 0,0844a | 0,0909a | 0,1426d | 0,2814d |
ICT: índice cintura/talla; IMC: índice de masa corporal; PAD: presión arterial diastólica; PAS: presión arterial sistólica; PC: perímetro de cintura.
Entre las limitaciones, en relación con estudios llevados a cabo con anterioridad en España, encontramos los intervalos de edad considerados, diferentes de los de algunos otros estudios, lo que dificulta la comparación de los resultados. También lo es la manifestación por los propios encuestados de los problemas de salud que padecen, que no siempre coincide con la realidad, especialmente en las edades más tempranas. Por la misma razón supone, igualmente, una limitación a considerar el no haber realizado analíticas de glucemia y perfil lipídico, por lo que el estudio se ha basado, para estos factores, en las manifestaciones de los adolescentes.
No existe acuerdo a la hora de establecer puntos de corte para el IMC que definan la obesidad infantil en los estudios epidemiológicos. En la actualidad existe consenso en Europa y Asia en definir la obesidad como un IMC superior al P97, y el sobrepeso, como un IMC situado entre P85 y P97, límites que se han utilizado en este estudio. El IMC medio fue de 22,0±3,8, mayor que en el estudio Carmona19, en el que, en adolescentes de 9 a 17años, fue de 21,0±3,9, significativamente menor en hombres (22,4±4,7) que en mujeres (23,2±5,5). En cambio, en nuestro estudio resultó significativamente mayor en hombres (22,4±3,8) que en mujeres (21,0±3,2), datos acordes con los publicados en el estudio AFINOS en 20109.
La prevalencia de sobrepeso +obesidad en nuestro estudio fue del 23,3%, con un 7% de obesidad y un 16,3% de sobrepeso. Resultó significativamente mayor en mujeres que en hombres (27,6% vs 19,7%; p<0,05), lo que difiere de lo encontrado en el estudio EnKid7, en el que fue del 31,2% en adolescentes de 10 a 13años y del 21,8% en adolescentes de 14 a 17años, con cifras superiores en hombres que en mujeres. Tampoco coincide con Serra Majem et al.7 en el IMC en función de la edad. En nuestro estudio, el IMC aumenta con la edad de una forma ligera-moderada, como ocurre en la población de referencia11 pero no en el trabajo de Serra-Majem et al.20.
Nuestros resultados de sobrepeso y obesidad son menores que los obtenidos en un estudio realizado en Granada21, en el que se encontró una prevalencia de sobrepeso y de obesidad del 23,0 y del 12,7% en chicas y del 20,8 y del 5,0% en chicos.
La prevalencia de obesidad encontrada, del 7,0%, es claramente inferior a la publicada por Rubio et al.22 en una población similar, que fue del 13,7% (18,5% en hombres y 9,1% en mujeres) utilizando los mismos criterios, en cuanto a definir sobrepeso y obesidad en los percentiles 85 y 97 del IMC. Si comparásemos con estudios internacionales, utilizando los mismos criterios de percentiles pero las tablas de Cole et al.12, las cifras de obesidad en nuestro trabajo serían superiores, pero consideramos más adecuadas las obtenidas de acuerdo con los estándares de referencia de nuestra población11.
La valoración de la obesidad en función del IMC es una metodología muy extendida pero no deja de ser una estimación indirecta de la proporción de grasa corporal23. Por este motivo, calculando la obesidad en función del porcentaje de grasa a partir de valores del ICT16, da como resultado una prevalencia superior a la estimada con el IMC, asociándose ambos con cambios bioquímicos relacionados con el RCV24.
El PC es una variable antropométrica predictiva de RCV25,26, ya que determina la distribución de la grasa13,27. Su uso en población pediátrica está menos extendido y no se dispone de estándares poblacionales adaptados a nuestro medio, aunque los valores obtenidos en el presente trabajo son similares a los encontrados en el estudio AFINOS9 y por Martínez-Gómez et al.25. Un 7,5% de adolescentes tenían un PC>P90, que se considera obesidad central, similar en ambos sexos. La obesidad abdominal, que en algunos estudios28 presenta una prevalencia del 22,7% en adolescentes, es un FRCV muy importante que, junto con otros como la HTA, provocan el inicio de los procesos ateroscleróticos en estas edades29. En nuestro estudio, aunque la prevalencia de obesidad central es relativamente baja, no lo es así la prevalencia de PA alterada.
La media del ICT encontrado está por debajo del límite de 0,5 considerado como un FRCV14. No hay diferencias significativas en función del sexo.
No disponemos de estándares de ICT adaptados a nuestra población, pero se encontró una alta correlación con el IMC, al igual que otros autores15, que mostraron la buena correlación de este parámetro con otros métodos indirectos para medir la obesidad.
La HTA es un FRCV claramente relacionado con la presencia de obesidad30. Más de la mitad de los escolares de nuestra muestra (63,8%) tiene la PAS por encima del percentil 90 y casi la cuarta parte (23,7%) la PAD por encima de dicho percentil. La proporción de PAD elevada es mayor entre las mujeres y la de PAS elevada entre los hombres. Estos resultados son acordes con las cifras publicadas por Martínez-Gómez et al.25 y superiores a las de Martín et al.19 en adolescentes de 15 a 17años con medias de PAS de 99,6mmHg y PAD de 55,0mmHg.
Uno de cada 6 adolescentes de la muestra manifiesta que tiene familiares en primer grado con HTA, casi el 6% tienen familiares en primer grado diabéticos y casi el 10% refieren tener una enfermedad o FRCV. Es preciso ser cautos con estos datos, ya que el conocimiento de las enfermedades de sus padres, por parte de los adolescentes, no siempre es el adecuado y las encuestas las realizaron en ausencia de aquellos.
El 13,3% de los adolescentes de este estudio tienen 2 FRCV y un 1,7% tienen 3. Son cifras preocupantes al tratarse de una muestra de preadultos de 12 a 17años. Entre los varones predominó la hipercolesterolemia, la HTA, la obesidad, la grasa abdominal central (ICT) y valores altos de PAS, y entre las mujeres, el sobrepeso y valores altos de PAD.
En la muestra de adolescentes analizada se ha encontrado una prevalencia notable de FRCV, especialmente HTA, sobrepeso e hipercolesterolemia. A pesar de su corta edad, más de uno de cada 10 tiene 2 FRCV. A la vista de estos resultados, se concluye la necesidad de realizar intervenciones educativas inmediatas y continuadas orientadas a la mejora de hábitos y estilo de vida para prevenir así el progreso hacia la enfermedad cardiovascular y la diabetes mellitus tipo2 en la edad adulta.
Protección de personas y animales en investigaciónLos autores declaran que en esta investigación no se han llevado a cabo experimentos con humanos ni animales. Los autores declaran que los procedimientos seguidos cumplían los reglamentos del comité ético de investigación clínica responsable y de Asociación Médica Mundial y la Declaración de Helsinki.
No se han conservado datos de personas. Al tratarse de menores se solicitó y obtuvo el consentimiento escrito de los padres o tutores de los participantes. Los datos necesarios para el estudio se manejaron de manera agregada, sin identificación individual de las personas.
FinanciaciónEl estudio no ha tenido financiación externa al grupo investigador.
AutoríaRMG contribuyó a la concepción y diseño del estudio, a la interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y revisión crítica del contenido y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
PGR contribuyó a la adquisición, análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
MFC contribuyó a la adquisición, análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
ARR contribuyó a la adquisición, análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
NVC contribuyó al análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
NFAR contribuyó a la concepción y diseño del estudio, al análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
JAFP contribuyó a la concepción y diseño del estudio, al análisis e interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
IRE contribuyó a la concepción y diseño del estudio, a la interpretación de los datos, a la redacción del borrador del artículo y a la revisión crítica del contenido y a la aprobación definitiva de la versión que se presenta.
Conflicto de interesesLos autores declaran no existir conflicto de intereses en relación con el contenido del manuscrito.