Agustín Muñoz Sanz
Editorial Asociación para el Conocimiento de las Enfermedades Infecciosas (ACEI). 2006. 211 págs.; 27 figuras; 26 tablas. Badajoz
Con motivo del XX aniversario de la creación de la Unidad de Patología Infecciosa (UPI) del Hospital Universitario Infanta Cristina de Badajoz, el Dr. Agustin Muñoz Sanz publica el libro titulado Brevísima relación de la construcción de la Infectología de Badajoz: colegiada por el doctor Agustín Muñoz Sanz, del Servicio Extremeño de Salud y de la Universidad de Extremadura. La obra consta de dos partes perfectamente diferenciadas. Las primeras 80 páginas narran la historia de la UPI de Badajoz, cronológicamente una de las tres primeras en el contexto del desarrollo histórico de la moderna Infectología española. El libro refleja la necesidad, el esfuerzo y la tenacidad, en muchas ocasiones en solitario (¡qué apropiado aquí la denominación Unidad de E. Infecciosas!), necesarios para desarrollar un modelo asistencial y docente de la patología infecciosa y las dificultades administrativas y legales para su implantación. El problema del no reconocimiento en nuestro país de la especialidad de Infectología queda reflejado en una frase que figura en el preámbulo justificativo del libro, en el que se recurre a la historia pasada. Cuando, al hablar de los indios del Caribe, el autor dice con ironía: "Los infectólogos, hasta hoy, parece que carecen de alma (especialidad reconocida) a pesar de que han demostrado no ser vagos (viven en hospitales con dedicación exclusiva) ni comerse a nadie (salvo los denominados marrones asistenciales)". Los aspectos docentes desarrollados durante años culminaron con la creación de la primera plaza en España de profesor titular de Patología Infecciosa, en la Universidad de Extremadura. En el apartado dedicado a los diferentes modelos de UEI de la sanidad pública española, el autor repasa el panorama en cuanto al reconocimiento de la realidad asistencial y aporta documentación acreditativa sobre la creación de las unidades y servicios infectológicos de algunos de los hospitales punteros. La segunda parte es un ensayo sobre el origen de la sífilis, acaso el problema más debatido de la historia de la medicina. Se titula "De las bubas al genoma. Refutación de una mentira histórica sobre el origen de la sífilis" y está dedicado al insigne médico e historiador español, el profesor Francisco Guerra. Dice el autor, "la elección no es fortuita ni se trata de literatura de relleno, sino una forma de ayudar a comprender la esencia de la Infectología moderna a través de la Historia". El Dr. Muñoz Sanz inicia el hilo argumental sin un juicio inicial preconcebido. ¿Mal francés? ¿Mal español? ¿Mal de Nápoles? ¿Mal de Indias? A lo largo del ensayo argumenta datos a favor y en contra de las distintas teorías. En relación con la teoría colombina, analiza documentos de la época (crónicas de Indias) dedicando especial atención al primer libro en el que se describió el origen de las bubas a partir del primer viaje de Colón al Nuevo Mundo, por el cronista Gonzalo Fernández de Oviedo. Tras un análisis exhaustivo, el libro de Oviedo es catalogado por el Dr. Muñoz Sanz como la fuente impresa que sostiene una de las más grandes mentiras de la historia. Tiene especial vigencia resaltar el posible interés comercial de Fernández de Oviedo en establecer el origen del mal: si venía de las Indias, también debería estar allí la solución (la corteza del guayaco o palosanto, árbol muy abundante en la Hispaniola). El enriquecimiento con el monopolio del comercio del palosanto en Europa, con la ayuda financiera de los banqueros de Carlos V (la familia Függer) debió de suponer pingües beneficios (hecho ya denunciado por Paracelso). Después repasa la hipótesis precolombina o del Viejo Mundo (la sífilis era una enfermedad existente en Europa desde los tiempos remotos y, por tanto, no procedía de América); así se deduciría, entre otros argumentos, de un refrán español de 1463 "a morbo gálico, médico español". Luego, analiza otras teorías. Muy interesante es la relación de la epidemia de sífilis en Europa con las guerras de Italia. Por último, el autor comenta la documentación basada en la paleopatología y la genómica.
Para los interesados en las enfermedades infecciosas y en su historia en España, el libro de Muñoz Sanz es una importante fuente informativa. Respecto al ensayo sobre el discutido origen de la sífilis el regalo de aniversario de la UPI de Badajoz, los lectores lo agradecerán, por lo que supone en el conocimiento de un problema histórico y por la actualidad y vigencia de los problemas debatidos. El autor espera que el libro ayude a "dignificar la figura de los infectólogos, los indios tainos y caribes de la Medicina española". El libro de Muñoz Sanz es, sin duda, un testimonio histórico valioso aportado por uno de los infectólogos pioneros. Es, además, un serio y respetable alegato a favor del necesario reconocimiento oficial de la Infectología en España.
