Sr. Director: La hernia de hiatus de Morgagni o de los espacios de Larry es la menos frecuente de las tres variedades de hernia no traumática. Se observa preferentemente en el adulto y se produce por un defecto congénito en la zona de las inserciones esternocostales, en cuyo caso el borde anterior del diafragma presenta una escotadura que se extiende de uno a otro reborde costal, arco que forma el límite posterior de lo que se conoce con el nombre de foramen de Morgagni. Suelen estar localizadas en el lado derecho y están provistas de saco, su volumen es variable y protruye en el hemitórax derecho, pero al mismo tiempo mantiene la independencia entre el peritoneo y la cavidad pleural. Esto permite explicar su sintomatología, que puede ser de aparición tardía. Las vísceras contenidas más habituales son: colon, epiplón y angulo ileocecal1. Su diagnóstico, aparte de la sospecha clínica con sintomatología respiratoria, se puede realizar mediante radiología simple de tórax, que objetiva la presencia de valores hidroaéreos (cuando hay presencia de víscera hueca) o simular una imagen tumoral (si hay víscera sólida: hígado), en la actualidad, la resonancia magnética aporta imágenes diagnósticas2.
Sus manifestaciones clínicas pueden aparecer en etapas tempranas de la vida; ya sea en forma de clínica respiratoria (disnea por ocupación de parénquima pulmonar) o digestiva (por estrangulación de intestinal), aunque también pueden hacerlo en fases más tardías3-5.
Presentamos el caso de una paciente de 75 años, con antecedente de una hipertensión arterial, bien controlada con tratamiento médico desde hacía unos 10 años. Acudió a urgencias de nuestro hospital por clínica de disnea de medianos esfuerzos desde hacía 4-5 años, que se había hecho de pequeños esfuerzos en los últimos meses, atribuida a una posible miocardiopatía hipertensiva.
En urgencias se le practicó una radiografía simple de tórax (fig. 1), que objetivó una imagen aérea intratorácica, por lo que se realizó un enema opaco (fig. 2) que objetivó la presencia de intestino grueso en el interior de tórax.
En el postoperatorio de la reparación de su hernia presentó una atelectasia izquierda con insuficiencia respiratoria grave que motivó ingreso en el servicio de medicina intensiva y la aplicación de ventilación mecánica no invasiva, con respuesta satisfactoria.
Al alta hospitalaria la paciente presentaba una franca mejoría de su sintomatología respiratoria grave.
El citado caso, aparte de su riqueza iconográfica, nos invita recordar que la hernia de Morgagni es una patología a tener en cuenta en el diagnóstico diferencial de la insuficiencia respiratoria, incluso en pacientes de edad avanzada, y que se puede diagnosticar con la realización de exploraciones sencillas como la radiología convencional, siendo en la actualidad la resonancia magnética una técnica de gran utilidad en casos de duda.