Casos Clínicos en Gastroenterología y Hepatología
Más datosLa paniculitis mesentérica (PM) es una entidad inflamatoria crónica de origen incierto que afecta al mesenterio. Algunos autores afirman que constituye un hallazgo frecuente y generalmente incidental1. Debido al relativo desconocimiento sobre esta entidad, es necesario aportar mayor casuística, especialmente con relación a su asociación con manifestaciones clínicas abdominales. El objetivo principal de este trabajo es analizar la prevalencia de PM registrada en los informes de TC de abdomen, las variables sociodemográficas asociadas, presencia de dolor abdominal en ausencia de otra causa atribuible, antecedentes de neoplasia o cirugía abdominal, reactantes de fase aguda y hallazgos radiológicos más frecuentes.
Se llevó a cabo un estudio retrospectivo transversal (serie de casos) a partir de las TC de abdomen realizadas en nuestro hospital durante 2018. Para ello se realizó una búsqueda por filtros con palabras clave pertinentes (paniculitis, mesenteritis, fibrosante, esclerosante). El estudio contó con la aprobación del comité de ética hospitalario. Una vez eliminadas las TC redundantes, se revisaron los informes e imágenes de TC y se seleccionaron los casos con diagnóstico radiológico de PM. A continuación se revisó la justificación clínica del estudio, la historia clínica del episodio asociado y la analítica sanguínea. Se recogió la edad, el sexo, los antecedentes y el tipo de cirugía abdominal o pélvica, la historia de neoplasia abdominal, la presencia de dolor abdominal y de otra causa atribuible detectada en la TC, el recuento de leucocitos en sangre y la proteína C reactiva. Los casos se registraron en una base de datos anonimizada. Las variables cualitativas se expresaron como frecuencias absolutas y relativas, y las variables cuantitativas continuas como media y desviación estándar.
En total se incluyeron 4.665 TC de abdomen en la población de estudio. Se identificaron un total de 77 casos (1,65%) con diagnóstico de PM. La edad media fue de 71,7 años (desviación estándar: 11,2 años), con un predominio de varones (64,9%). En total, 27 pacientes (35,1%) presentaban antecedentes de neoplasia con afectación abdominal, destacando el cáncer colorrectal y genitourinario; y 33 pacientes (47,1%) tenían antecedentes de cirugía abdominal, con una mayor frecuencia de colecistectomía y resección intestinal (tabla 1). Treinta pacientes (39,0%) presentaron dolor abdominal en el momento de la realización de la TC y no se encontraron otros hallazgos que justificasen dicho dolor en 12 de ellos (15,6% de los casos de PM). En 66 pacientes se solicitó proteína C reactiva y/o hemograma con recuento de leucocitos. De ellos, en 33 casos (50%) ninguno de los parámetros estuvo alterado. Solo 7 pacientes con dolor abdominal sin etiología atribuible presentaron elevación de alguno de los reactantes de fase aguda. El hallazgo radiológico más frecuente fue el aumento de la densidad de la grasa mesentérica, con o sin aumento en el número de ganglios linfáticos locales.
Historia de neoplasia o cirugía abdominal, presencia de dolor abdominal y reactantes de fase aguda en la serie analizada
Variable | n/N (%) |
---|---|
Antecedentes de neoplasia abdominala | 27/77 (35,1) |
Genitourinariab | 9/27 (33,3) |
Colorrectal | 8/27 (29,6) |
Próstata | 3/27 (11,1) |
Síndrome linfoproliferativo | 3/27 (11,1) |
Otros (pulmón, ovario) | 4/27 (14,8) |
Antecedentes de cirugía abdominal | 33/77 (42,9) |
Colecistectomía | 8/33 (24,2) |
RAB/colectomía/resección ileal | 7/33 (21,2) |
Nefrectomía/cistectomía/pieloplastia | 5/33 (15,2) |
Apendicectomía | 4/33 (12,1) |
Histerectomía±doble anexectomía | 3/33 (9,1) |
Pared abdominal | 3/33 (9,1) |
Hernia hiatal | 3/33 (9,1) |
Dolor abdominal | 30/77 (39,0) |
Identificación de otra causa de dolor abdominal | 18/30 (60,0) |
Uropatía obstructiva litiásica | 5/30 (27,8) |
Pancreatitis aguda | 5/30 (27,8) |
Suboclusión intestinal | 3/30 (16,7) |
Otras (biliar, entérica, diverticulitis) | 5/30 (27,8) |
Aumento de PCR y/o leucocitos | 33/66 (50,0)c |
PCR elevada (>5mg/l) | 20/36 (55,6)b |
Leucocitosis (>10.000céls/mm3) | 15/66 (22,7)d |
PCR: proteína C reactiva; RAB: resección anterior baja de recto.
Se han reportado diversas asociaciones, entre las que destacan enfermedades autoinmunes (por ejemplo, por IgG4) y diversos tipos de cáncer (antecedentes en el 30-70% de los pacientes con PM según las series), sobre todo carcinomas (mama, colorrectal, renal y gástrico) y hematológicos (linfomas no Hodgkin y de células plasmáticas)2. También se ha reconocido la asociación con traumatismos abdominales (incluyendo la cirugía) y enfermedades de naturaleza inflamatoria-infecciosa, entre otras1,3. En nuestra serie, un tercio de los pacientes presentaba antecedentes de neoplasia con afectación abdominal, siendo más prevalentes el cáncer colorrectal y el genitourinario –también frecuentes en otras series2–, mientras que casi la mitad tenían antecedentes de cirugía abdominal, destacando la colecistectomía y la resección intestinal.
El carácter sintomático de la PM es controvertido. Se admite que puede ser asintomática o manifestarse como molestias abdominales, fiebre, náuseas, vómitos, diarrea y estreñimiento, entre otros4,5. En nuestra muestra, solo un 15% de los pacientes presentaron PM como único hallazgo que justificase el dolor abdominal, mientras que en el 85% restante se encontraron otras entidades (nefrolitiasis, colelitiasis, pancreatitis, etc.) que lo explicarían, aunque no es posible descartar un efecto conjunto. Teniendo en cuenta la existencia de otras causas de dolor abdominal que no presentan hallazgos específicos en la TC, estos resultados evidencian una asociación casual entre PM y dolor abdominal. En conclusión, la frecuencia de PM diagnosticada por TC es baja, y en la mayoría de los casos no se asoció al dolor abdominal. No obstante, la potencial existencia de sesgos derivados de la naturaleza retrospectiva de nuestro trabajo hace necesario realizar estudios prospectivos específicos para verificar nuestros resultados.