En su reciente editorial publicado en Gastroenterología y Hepatología, Altamirano et al. hacen una breve revisión del pronóstico y de las posibilidades terapéuticas de los pacientes con hepatitis alcohólica1. De forma específica, resumen los resultados de un reciente estudio prospectivo franco-belga en el que un pequeño grupo de pacientes con hepatitis alcohólica con mal pronóstico y sin respuesta al tratamiento esteroideo recibieron un trasplante hepático de forma temprana2. La supervivencia de estos pacientes fue muy superior a la de un grupo de controles, comparables en edad, sexo y gravedad de su enfermedad hepática. A pesar de no haber cumplido la tradicional regla de abstinencia de 6 meses antes del trasplante, la proporción de pacientes que recidivaron en el consumo alcohólico fue aceptable (11%). Muy probablemente, esto fue debido al establecimiento de unos criterios de inclusión muy estrictos. Los resultados del estudio mencionado, al igual que los de otros estudios no prospectivos3,4, pueden servir de base para considerar la hepatitis alcohólica como una nueva indicación de trasplante hepático.
La Sociedad Española de Trasplante Hepático promueve un estudio prospectivo multicéntrico en el que participan un buen número de centros españoles. Este estudio, que tiene previsto su inicio en el primer trimestre de 2013, pretende valorar la aplicabilidad y los resultados del trasplante hepático en la hepatitis alcohólica sin respuesta al tratamiento, siguiendo unos criterios estrictos, similares a los del estudio de Mathurin et al. El estudio ha sido registrado en la página www.clinicaltrials.gov (NCT01768715). A pesar de la controversia que puede suponer el trasplante hepático en estos pacientes, esperamos que este estudio ayude a definir el papel del trasplante hepático en el tratamiento de la hepatitis alcohólica, al menos en pacientes muy seleccionados.