Paciente mujer de 78 años que es remitida a estudio por anemia ferropénica sin otra clínica referida. Se pautó ferroterapia oral y se solicitaron estudios endoscópicos. En la endoscopia digestiva alta se observaron lesiones dispersas compatibles con erosiones antrales sobreelevadas, sobre una leve discromía mucosa sugestiva de gastritis crónica (fig. 1a). En duodeno llamó la atención la presencia de múltiples lesiones sésiles de diferentes tamaños de aspecto no sugestivo de adenoma (fig. 1b). En la colonoscopia, se visualizaron lesiones similares a las duodenales, siendo en los tramos distales de mayor tamaño y sésiles (fig. 1c y 1d), y en colon derecho con un aspecto más aplanado dando a la mucosa un aspecto en empedrado (fig. 1e). En las biopsias tomadas a todos los niveles (gástrico, duodenal y colon) se identificó una mucosa infiltrada por una proliferación linfoide homogénea de células pequeñas y monomorfas de patrón pseudonodular. El índice proliferativo ki67 fue del 40% y mediante inmunohistoquímica se filió como una infiltración por un linfoma de células del manto. Tras el diagnóstico la paciente fue remitida al Servicio de Hematología para completar el estudio de extensión y su tratamiento oncológico.
El linfoma de células del manto es un tipo infrecuente y agresivo de linfoma no Hodgkin de células B. La afectación gastrointestinal es una de las formas más frecuentes de afectación extranodal1,2. Esta afectación intestinal puede ser en forma de la denominada «poliposis linfomatoide», la cual se presenta como múltiples lesiones polipoides sésiles, y que requiere de su estudio histológico para su diagnóstico diferencial con poliposis hamartomatosas o adenomatosas1,3,4.