La comunicación efectiva es esencial en la relación médico-paciente. Este vínculo se ha tornado más complejo, con un menor tiempo para la entrevista clínica, elevación de los costos en salud, y judicialización de la práctica médica, con la consecuente deshumanización de la medicina. El desarrollo de habilidades comunicacionales (HC) caracteriza a un buen médico, con un impacto directo para los pacientes (mejora adherencia, entendimiento indicaciones y satisfacción del cuidado ofrecido) y los médicos (disminuye el “burnout” y enfrentamiento a juicios de mala praxis). Previamente se consideraba que las HC eran inherentes a la personalidad de cada uno y que su presencia era preferible pero no obligatoria. Las HC deben ser enseñadas, aprendidas, entrenadas y evaluadas. No dependen solo de las características personales del médico y existe tendencia a repetir patrones cometiendo las mismas falencias cuando estas no son enseñadas.
ObjetivosEstimar la percepción de HC en tópicos específicos de alumnos de pregrado, posgrado y docentes de la escuela de Medicina PUC.
Materiales y métodosSe confeccionó un cuestionario de percepción y autorreporte de entrenamiento formal en HC en escala de Likert de 5 niveles de respuesta. Los tópicos evaluados fueron: dar malas noticias, reclamos, reconocer errores, manejo de pacientes y familiares difíciles, y liderazgo. Se aplicó en forma anónima y voluntaria a internos, residentes y docentes, excluyendo a quienes realizan especialidad con escasa interacción médico-paciente. El análisis estadístico se realizó con la prueba de Mann-Whitney para obtener mediana y su rango, con diferencia estadística p < 0.05. Resultados: Participaron 350 encuestados, de los cuales fueron 81 residentes, 104 docentes y 165 internos. Respecto a la importancia de habilidades comunicacionales, perciben relevante potenciar las HC (mediana 5) y su importancia para ser un buen médico (mediana 5). El 76% reconoce tener necesidad de entrenamiento formal en HC en los distintos tópicos. Los residentes en un 77%, el cual varía según situación evaluada entre 71% a 85%. Para los docentes es de un 65% con rango entre 60% a 68%. Respecto a la percepción de entrenamiento formal e informal, existe una baja frecuencia (mediana 2) sin diferencias entre estamentos. Se reporta una alta percepción de preparación para enfrentar todas las situaciones descritas (mediana 4) en globo. Con respecto a la percepción de preparación de los alumnos, un 55% de los docentes declara nivel regular de entrenamiento de estos. Un 50% reconoce de los docentes que no está preparado para enseñar habilidades comunicacionales, mientras solo un 41% sí lo está. Al preguntar por ítems específicos de la comunicación, destaca en los residentes bajo reconocimiento de errores ante los pacientes y baja percepción de exposición de reclamos del equipo de salud.
ConclusionesLas HC son percibidas como importantes para desarrollo profesional en globo. Son necesarias instancias formales de entrenamiento para los residentes y docentes, considerando su labor como rol modelo. Un curso de enseñanza formal de HC debiera ser obligatorio en el primer año de residencia, entre otros los beneficios, como estrategia de autocuidado.