347/1310 - VARIABILIDAD DE LOS NIVELES DE VITAMINA D EN NUESTROS PACIENTES MAYORES DE 65 AÑOS DE ATENCIÓN PRIMARIA
aMédico Residente de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Lucano. Córdoba. bMédico de Familia. UGC La Sierra. Córdoba. cMédico Residente de 3er año de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Lucano. Córdoba. dMédico Residente de 4º años de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Lucano. Córdoba. eMédico Residente de 2º año de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Lucano. Córdoba. fMédico Residente de 1er año de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Lucano. Córdoba. gMédico de Familia. Centro de Salud Lucano. Córdoba.
Objetivos: Analizar los niveles de vitamina D3 en aquellos pacientes mayores de 65 años que viven en domicilio y pacientes que viven en residencia, estableciendo posibles factores asociados.
Metodología: Estudio observacional y transversal donde se seleccionó una muestra de 255 pacientes (pacientes que acudían a la consulta (9,3%), en programa de atención domiciliaria (48,8%) y pacientes institucionalizados (41,9%)) de dos centros de salud urbano y uno rural (IC95% y precisión ± 4). Se determinó los niveles de vitamina D y se recogieron 45 variables socio-demográficas y de salud. A todos ellos se les realizó una valoración geriátrica integral. Se realizaron estadísticos descriptivos y se analizaron asociaciones mediante la aplicación de chi cuadrado y análisis de la varianza (ANOVA), con una significación de p < 0,005. Variables: edad, sexo, número de enfermedades, índice de Barthel, cuestionario MNA, suplementación de vitamina D, modo de asistencia sanitaria, grado de movilidad, método Chang.
Resultados: De los 228 pacientes, 166 (72,8%) eran mujeres. El 50,4% vivían en residencia. La media de edad era de 81,52 años. Conforme aumenta la edad aumenta el porcentaje de pacientes con vitamina D baja (8,6% los pacientes que tienen entre 65-75 años, 22,9% los pacientes que tienen 75-85 años y el 25% mayores de 85 años). Además se ha asociado a mayor riesgo de déficit de vitamina D los pacientes: que están institucionalizados (p < 0,001), la no toma de suplemento de vitamina D (p < 0,035), índice Barthel con dependencia grave (p < 0,000) y pacientes con desnutrición medido por el cuestionario MNA (p < 0,001).
Conclusiones: El mantenimiento de niveles de vitamina D normales disminuye el riesgo cardiovascular, de caídas y por tanto de fracturas. La toma de suplementos de vitamina D es baja (18,4% de los pacientes del estudio), por lo tanto habría que aumentar la prescripción de esta vitamina en pacientes con mayor probabilidad de déficit.
Palabras clave: Vitamina D. Anciano.