En 2009 publiqué un comentario editorial en esta misma revista, en el cual señalaba que los investigadores necesitamos más apoyo para generar conocimientos nuevos, y que somos nosotros mismos, quienes debemos procurarnos estas facilidades. También señalé que era lamentable y claro que en México, el "producto interno bruto" no estuviera apoyando de manera suficiente al "producto interno inteligente", y que esta conducta equivocada, cobraría su factura tarde o temprano. Indiqué que desairar a la investigación, le estaba costando muy caro al país.1 Por otro lado, Florencio de la Concha, señala que hay un concepto largamente mantenido y que en ciertos sentidos -incluso el literal-, se le puede denominar como una leyenda urbana: "Fuera de México, todo es Cuautitlán". Dicha aseveración ofrece varias lecturas, pero fundamentalmente lo que hace es describir un centralismo político, social, económico y académico, que ha caracterizado a México, inclusive antes de que este territorio así se llamara.2
Misael Uribe y Nahum Méndez, en este número de Medicina Universitaria, abundan más sobre este tema espinoso y resaltan las labores de investigación, llevadas a cabo en la Fundación Médica Sur, analizando los datos desde "una perspectiva del sector médico privado", como lo indica el título de su colaboración. De manera intencional o no, omiten referirse a otras instituciones médicas privadas, que se han involucrado en labores de investigación, mucho antes de que las instituciones privadas en la ciudad capital, hayan decidido incursionar en el campo de la investigación biomédica. A partir de 1956, la Clínica Ruiz de Puebla, ha llevado a cabo labores de investigación biomédica de manera ininterrumpida, producto de las cuales se han publicado más de 550 trabajos en revistas médicas nacionales y extranjeras. La Figura 1 resume la productividad de esta institución médica privada, que es superior a todas las instituciones médicas privadas juntas, ubicadas en la Ciudad de México. La repercusión de las actividades de investigación biomédica, de las instituciones médicas privadas ubicadas en la provincia, ha sido reconocida en publicaciones varias.3,4
Figura 1. Productividad científica de la Clínica Ruiz de Puebla entre 1956 y 2009. Las cifras se refieren a trabajos publicados, en revistas con pares de revisores
Es claro que "Fuera de México, no todo es Cuatitlán",2 que las actividades de investigación biomédica a nivel de medicina privada, también se están llevando a cabo fuera de la ciudad capital y que el "producto interno inteligente", a quien le sigue faltando el apoyo del "producto interno bruto",1 es nacional y no exclusivamente metropolitano.2
Correspondencia: Dr. Guillermo J. Ruiz-Argüelles.
Clínica Ruiz de Puebla. 8B Sur 3710. C.P. 72530. Puebla, Puebla.
Correo electrónico: gruiz1@clinicaruiz.com