19180 - Los anticuerpos contenidos en las Vesículas Extracelulares derivadas de los linfocitos B podrían contribuir a la patogenia de la Esclerosis Múltiple y jugar un papel como biomarcador diagnóstico
1Departamento de Neurología. Grupo de Neurología y Enfermedades Cerebrovasculares. IdiPAZ. Hospital Universitario La Paz; 2Laboratorio de Ciencias Neurológicas y Cerebrovascular. Departamento de Neurología. IdiPAZ. Hospital Universitario La Paz; 3Unidad de Proteómica Funcional. Instituto de Salud Carlos III.
Objetivos: Investigar si las vesículas extracelulares (VE) derivadas de células B contienen anticuerpos autorreactivos contra la mielina en pacientes con esclerosis múltiple (EM), si estos anticuerpos provocan desmielinización in vitro y si podrían actuar como un biomarcador diagnóstico.
Material y métodos: Se cuantificó el contenido de anticuerpos contra la proteína básica de mielina (MBP) y glicoproteína de mielina (MOG) en las vesículas derivadas de células B en la sangre y el líquido cefalorraquídeo de pacientes con EM por ELISA. Se utilizó una curva ROC para evaluar la eficacia de los anticuerpos como biomarcador diagnóstico. En un cultivo in vitro de oligodendrocitos, se estudió la capacidad de esas vesículas de inducir su desmielinización. Se examinó la influencia de actividad de la enfermedad y de terapias inmunomoduladoras sobre el contenido de anticuerpos en esas vesículas.
Resultados: En este estudio participaron 136 pacientes con EM y 39 controles. Se detectaron anticuerpos anti-MBP y anti-MOG en VE de células B en la sangre de los pacientes, pero no en LCR. Se ha identificado un valor de corte de 3,95 ng/mL de anti-MBP en dichas vesículas con una sensibilidad del 95,2% y una especificidad del 88,2% que permiten diferenciar a los pacientes con EM de los controles. Estas vesículas provocaron desmielinización en oligodendrocitos in vitro. Ni la actividad de la enfermedad ni las terapias inmunomoduladoras afectaron al contenido de anticuerpos en las VE.
Conclusión: Las VE de las células B periféricas podrían contribuir a la patogenia de la EM y podrían tener un papel como biomarcador diagnóstico.