Fotografía digital frente a fotografía convencional en dermatología
Leído
618
Vecesse ha leído el artículo
5
Total PDF
613
Total HTML
Compartir estadísticas
array:18 [ "pii" => "10022518" "issn" => "02139251" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2001-02-01" "documento" => "article" "subdocumento" => "fla" "cita" => "Piel. 2001;16:60-2" "abierto" => array:3 [ "ES" => false "ES2" => false "LATM" => false ] "gratuito" => false "lecturas" => array:2 [ "total" => 618 "formatos" => array:2 [ "HTML" => 613 "PDF" => 5 ] ] "itemSiguiente" => array:14 [ "pii" => "10022519" "issn" => "02139251" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2001-02-01" "documento" => "article" "subdocumento" => "fla" "cita" => "Piel. 2001;16:63-8" "abierto" => array:3 [ "ES" => false "ES2" => false "LATM" => false ] "gratuito" => false "lecturas" => array:2 [ "total" => 917 "formatos" => array:2 [ "HTML" => 734 "PDF" => 183 ] ] "es" => array:8 [ "idiomaDefecto" => true "titulo" => "Examen directo y cultivo en onicomicosis" "tienePdf" => "es" "tieneTextoCompleto" => "es" "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "63" "paginaFinal" => "68" ] ] "contieneTextoCompleto" => array:1 [ "es" => true ] "contienePdf" => array:1 [ "es" => true ] "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "autoresLista" => "Marta Lucía Escobar de V, Jaime Carmona-Fonseca" "autores" => array:2 [ 0 => array:2 [ "nombre" => "Marta Lucía" "apellidos" => "Escobar de V" ] 1 => array:2 [ "nombre" => "Jaime" "apellidos" => "Carmona-Fonseca" ] ] ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/10022519?idApp=UINPBA00004N" "url" => "/02139251/0000001600000002/v0_201607111229/10022519/v0_201607111229/es/main.assets" ] "itemAnterior" => array:14 [ "pii" => "10022517" "issn" => "02139251" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2001-02-01" "documento" => "article" "subdocumento" => "fla" "cita" => "Piel. 2001;16:57-9" "abierto" => array:3 [ "ES" => false "ES2" => false "LATM" => false ] "gratuito" => false "lecturas" => array:2 [ "total" => 303 "formatos" => array:2 [ "HTML" => 295 "PDF" => 8 ] ] "es" => array:8 [ "idiomaDefecto" => true "titulo" => "Utilidad de las pruebas epicutáneas en el diagnóstico de las toxicodermias" "tienePdf" => "es" "tieneTextoCompleto" => "es" "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "57" "paginaFinal" => "59" ] ] "contieneTextoCompleto" => array:1 [ "es" => true ] "contienePdf" => array:1 [ "es" => true ] "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "autoresLista" => "Juan Antonio Ratón, José Luis Díaz" "autores" => array:2 [ 0 => array:2 [ "nombre" => "Juan Antonio" "apellidos" => "Ratón" ] 1 => array:2 [ "nombre" => "José Luis" "apellidos" => "Díaz" ] ] ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/10022517?idApp=UINPBA00004N" "url" => "/02139251/0000001600000002/v0_201607111229/10022517/v0_201607111229/es/main.assets" ] "es" => array:10 [ "idiomaDefecto" => true "titulo" => "Fotografía digital frente a fotografía convencional en dermatología" "tieneTextoCompleto" => true "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "60" "paginaFinal" => "62" ] ] "autores" => array:1 [ 0 => array:3 [ "autoresLista" => "Leonardo Barco Nebreda, Clara Iglesias Hernández, Israel Barco Nebreda, David Riba Torrecillas" "autores" => array:4 [ 0 => array:3 [ "nombre" => "Leonardo" "apellidos" => "Barco Nebreda" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">a</span>" "identificador" => "affa" ] ] ] 1 => array:3 [ "nombre" => "Clara" "apellidos" => "Iglesias Hernández" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">a</span>" "identificador" => "affa" ] ] ] 2 => array:3 [ "nombre" => "Israel" "apellidos" => "Barco Nebreda" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">b</span>" "identificador" => "affb" ] ] ] 3 => array:3 [ "nombre" => "David" "apellidos" => "Riba Torrecillas" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">c</span>" "identificador" => "affc" ] ] ] ] "afiliaciones" => array:3 [ 0 => array:3 [ "entidad" => "Servicio de Dermatología. Hospital Clínico San Carlos. Madrid." "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">a</span>" "identificador" => "affa" ] 1 => array:3 [ "entidad" => "Servicio de Ginecología y Obstetricia. Hospital Mútua de Terrassa. Barcelona." "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">b</span>" "identificador" => "affb" ] 2 => array:3 [ "entidad" => "Medicina de Familia. CAP Eixample. Lleida." "etiqueta" => "<span class="elsevierStyleSup">c</span>" "identificador" => "affc" ] ] ] ] "resumenGrafico" => array:2 [ "original" => 0 "multimedia" => array:6 [ "identificador" => "fig1" "tipo" => "MULTIMEDIAFIGURA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" "figura" => array:1 [ 0 => array:4 [ "imagen" => "21v16n02-10022518fig02.jpg" "Alto" => 274 "Ancho" => 730 "Tamanyo" => 32552 ] ] ] ] "textoCompleto" => "<p class="elsevierStylePara">La fotografía digital está desplazando a la fotografía analógica en muchos campos, y en la medicina (y en particular en la dermatología) cada vez son más los que se apuntan a las nuevas tecnologías por las interesantes prestaciones que aportan.</p><p class="elsevierStylePara">El motivo del presente artículo es el de dar a conocer las ventajas e inconvenientes de ambos sistemas y permitir evaluar con acierto cuál de ellos es más conveniente para nuestra práctica diaria, sobre todo si se pretende adquirir un equipo nuevo.</p><p class="elsevierStylePara">La fotografía digital se basa fundamentalmente en el almacenamiento de las imágenes mediante sistemas o soportes que permiten el volcado de las fotos a un ordenador o proyector sin necesidad de recurrir al carrete tradicional. La gran ventaja estriba en la disponibilidad inmediata de las imágenes sin necesidad de un revelado.</p><p class="elsevierStylePara">En la tabla I se detallan las ventajas e inconvenientes de ambos sistemas.</p><p class="elsevierStylePara"><img src="21v16n02-10022518tab01.gif" width="150" height="213"></img></p><p class="elsevierStylePara"> </p><p class="elsevierStylePara">TIPOS DE CÁMARAS DIGITALES</p><p class="elsevierStylePara">Al igual que con las cámaras tradicionales, las cámaras digitales pueden ser fundamentalmente de dos tipos: compactas y réflex, aunque para ser más exactos es preferible la división según si permiten o no el uso de objetivos intercambiables<span class="elsevierStyleSup">1</span>.</p><p class="elsevierStylePara">Así como las cámaras compactas convencionales no son útiles para la fotografía dermatológica, las digitales de objetivo no intercambiable no sólo son útiles sino que incluso se podría decir que son las verdaderamente abordables hoy en día, por cuestión económica, para la fotografía dermatológica funcional<span class="elsevierStyleSup">2</span>.</p><p class="elsevierStylePara">FOTOMACROGRAFÍA DIGITAL</p><p class="elsevierStylePara">Las cámaras compactas digitales, en general, no admiten el intercambio de objetivos y por ello utilizan un sistema de <span class="elsevierStyleItalic"> zoom</span> que permite acercar o alejar la imagen sin necesidad de desplazarnos<span class="elsevierStyleSup">3</span>. La mayor parte de ellas, además, incorporan un sistema «macro» que facilita el enfoque a distancias cortas y, por tanto, se obtiene una fotografía con una relación de aumentos grande aunque difícilmente llega a la de un objetivo «macro» para cámara réflex convencional.</p><p class="elsevierStylePara">Las imágenes digitales se pueden ampliar en el ordenador con <span class="elsevierStyleItalic">zooms</span> selectivos sin pérdida excesiva de calidad, siempre y cuando la resolución de la fotografía sea elevada. Ello permite salvar el problema que puede suponer una capacidad «macro» limitada de la cámara digital.</p><p class="elsevierStylePara">Las cámaras réflex digitales que posibilitan el intercambio de objetivos y sobre todo el uso de objetivos convencionales macro, son la mejor de las opciones en el campo digital. El mayor inconveniente que presentan es su elevado precio, raramente por debajo de las 600.000 ptas.<span class="elsevierStyleSup">4</span>. Además, suelen ser cámaras pesadas y debido a sus múltiples y elaboradas opciones, son cámaras de aprendizaje y manejo complicado para los neófitos.</p><p class="elsevierStylePara">A pesar de ello, hacen posible el aprovechamiento de alguno de los objetivos convencionales de calidad que poseamos y su aplicación en fotografía digital (valorar compatibilidades según cada marca). Se trata, sin duda, de la opción más óptima en cuanto a calidad fotográfica digital.</p><p class="elsevierStylePara">Los objetivos que las cámaras compactas digitales llevan incorporados y que no permiten su intercambio suelen ser de calidad inferior pero, a pesar de ello, garantizan unos resultados más que satisfactorios, incluso excelentes.</p><p class="elsevierStylePara">CALIDAD DE LA FOTOGRAFÍA DIGITAL</p><p class="elsevierStylePara">Con respecto a la calidad de la fotografía digital, no debemos preguntarnos si es comparable a la analógica, sino si tiene calidad suficiente para nuestros propósitos. En la mayor parte de casos dependerá de cuánto queramos ampliar la imagen. En general, para el manejo habitual en dermatología, si empleamos la resolución adecuada, la calidad es más que suficiente.</p><p class="elsevierStylePara">Después de realizar múltiples pruebas con la cámara que manejamos en nuestro servicio (Nikon CoolPix 950<span class="elsevierStyleSup">®</span> [fig. 1]), la resolución que nos ha parecido que guarda una relación más favorable entre calidad y memoria consumida es aquella en la cual las fotos ocupan entorno a 200 kilobytes en formato JPEG.</p><p class="elsevierStylePara"><img src="21v16n02-10022518fig02.jpg" width="150" height="101"></img></p><p class="elsevierStylePara"> </p><p class="elsevierStylePara">Figura 1. Equipo empleado en fotografía digital compuesto por: cargador de baterías, cámara digital, tarjeta <span class="elsevierStyleItalic"> compactflash</span> y lector de tarjetas.</p><p class="elsevierStylePara">Las cámaras digitales del momento permiten unas resoluciones altas de 2,1, 2,7 e incluso 3,3 millones de puntos y aunque sería suficiente con resoluciones menores, es preferible que tengan no menos de 1.500.000 píxels<span class="elsevierStyleSup">5</span>.</p><p class="elsevierStylePara">La utilización del visor LCD (liquid cristal display) que incorporan las cámaras digitales, al ser más grande<br></br> que el ocular de la cámara convencional, facilita un mejor enfoque y encuadre<span class="elsevierStyleSup">6</span>. Si además se añade el hecho de que permiten comprobar la calidad de la foto en el momento (y en el supuesto de ser insuficiente, repetirla hasta asegurar el resultado) estamos incrementando indirectamente la calidad de la fotografía final.</p><p class="elsevierStylePara">VOLCADO DE LA IMAGEN DIGITAL: VISUALIZACIÓN</p><p class="elsevierStylePara">Una vez tomada la fotografía, ¿de qué modo podemos visualizarla?</p><p class="elsevierStylePara">Existen diferentes posibilidades. Obviamente a través del visor de la cámara, también en la pantalla del ordenador (habiendo volcado o no la foto), en un televisor o también mediante un cañón de proyección. Por último, se pueden imprimir en papel y materializar en soporte físico.</p><p class="elsevierStylePara">La conversión de una imagen digital a diapositiva es posible mediante el uso de una filmadora de diapositivas o <span class="elsevierStyleItalic"> palette</span> pero es una práctica poco recomendable dado que la calidad resultante suele ser insuficiente<span class="elsevierStyleSup">7</span>.</p><p class="elsevierStylePara">La visualización en la pantalla del ordenador implica tener el <span class="elsevierStyleItalic">software</span> al efecto, aunque los programas de uso común y fácil adquisición pueden ser suficientes. En nuestro servicio utilizamos el programa ACDSee<span class="elsevierStyleSup">®</span> de forma muy satisfactoria.</p><p class="elsevierStylePara">El volcado o descarga de las fotografías al disco duro del ordenador se realiza de forma directa con cables de conexión, que la cámara suele llevar de serie, mediante lectores de tarjetas (Campactflash, SmartMedia, etc.) o bien mediante <span class="elsevierStyleItalic">diskette</span> de 3,5 pulgadas si la cámara utiliza este tipo de soporte magnético. Si se realiza a través de lectores de tarjeta, éstos deben ser adquiridos por separado aunque generalmente a precios asequibles (en torno a las 15.000 ptas.).</p><p class="elsevierStylePara">Los requerimientos tanto de la fotografía digital como de la convencional se reflejan en la tabla II.</p><p class="elsevierStylePara"><img src="21v16n02-10022518tab03.gif" width="150" height="107"></img></p><p class="elsevierStylePara"> </p><p class="elsevierStylePara">SISTEMAS DE ALIMENTACIÓN</p><p class="elsevierStylePara">Los sistemas de alimentación de las cámaras digitales no difieren en exceso de los de las cámaras tradicionales. Suelen funcionar con pilas estándar y el consumo es equiparable entre los dos sistemas, teniendo en cuenta que el digital lleva el <span class="elsevierStyleItalic">flash</span> incorporado habitualmente. Si no se utiliza en exceso el visor LCD para repasar el archivo, el consumo no es muy elevado. Resulta útil, en este sentido, comprar un cargador de baterías recargables, preferiblemente sin efecto memoria (ion-litio)<span class="elsevierStyleSup">8</span>.</p><p class="elsevierStylePara">A diferencia de las cámaras convencionales, las digitales sí pueden utilizarse conectadas a la red eléctrica aunque implica la pérdida de cierta maniobrabilidad.</p><p class="elsevierStylePara">PROGRAMAS DE EXPOSICIÓN</p><p class="elsevierStylePara">Las cámaras digitales poseen programas de funcionamiento similares a los de las convencionales: automático, prioridad a la apertura o diafragma, prioridad a la velocidad y manual. En la práctica, los programas de las cámaras digitales están limitados a 3 o 4 pasos de diafragma y a un rango de velocidades menor que en las cámaras analógicas a pesar de lo cual resultan suficientes para nuestras necesidades.</p><p class="elsevierStylePara">CONCLUSIONES</p><p class="elsevierStylePara">La espera entre la toma de la fotografía y la obtención de la diapositiva conlleva, en no pocas ocasiones, la pérdida de la iconografía si los resultados no son los esperados. Con la fotografía digital este contratiempo se supera y supone su mayor baza ya que en el mismo acto comprobamos el resultado y si no es óptimo podemos repetir la toma. Esta gran ventaja implica, a su vez, un autoaprendizaje del estilo fotográfico ya que con las cámaras tradicionales cuando vemos la diapositiva final no solemos acordarnos de cómo se realizó la foto a pesar de apuntarlo y, por tanto, no es fácil corregir los errores.</p><p class="elsevierStylePara">La inmediatez es la principal ventaja de este tipo de cámaras, aunque el sistema digital tiene otras como agilizar y hacer cómodo y barato el seguimiento fidedigno de los nevos y otros tumores (cambios de coloración, tamaño, etc.). La rapidez en la obtención de la foto también permite enseñar al enfermo en la consulta las imágenes comparativas de antes y después de procesos quirúrgico-estéticos y/o de cambios en los tumores cutáneos. Podemos, incluso, entregar al enfermo una copia impresa de sus lesiones durante la visita médica.</p><p class="elsevierStylePara">El sistema digital cuenta con otra ventaja añadida: una vez hecha la inversión inicial no hay que volver a invertir en revelados y película y, por tanto, podemos llegar a ahorrar por cada carrete de 36 diapositivas en torno a 1.500 ptas. Este sistema posibilita tomar tantas fotografías como se desee sin aumentar el gasto, cosa que no sucede con el sistema tradicional. Si se dispone ya de un ordenador personal, el gasto se limita fundamentalmente a la cámara y, en su caso, al lector de tarjetas.</p><p class="elsevierStylePara">El único gasto extra que se le podría atribuir a la fotografía digital es el paso a papel cuando sea necesario. Éste debe hacerse preferiblemente con papel fotográfico, que suele ser caro y a su vez consume tinta de impresora que habrá que repostar<span class="elsevierStyleSup">9</span>.</p><p class="elsevierStylePara">Otra de las características de la fotografía digital es, precisamente, la versatilidad. Muchas de las cámaras digitales incluyen un visor rotatorio que facilita en gran medida la toma de la fotografía, permitiendo ángulos que con la cámara convencional serían difícilmente abordables.</p><p class="elsevierStylePara">La fotografía digital tiene aplicación no sólo en la dermatología clínica, sino que su uso puede extenderse a la cirugía dermatológica, microscopía de epiluminiscencia, histología, etc.., y en caso de ser el propietario de la cámara, además, al terreno personal.</p><p class="elsevierStylePara">Como en todo, existen opiniones a favor y en contra del nuevo sistema fotográfico, pero parece lógico, según se desarrolla la tecnología, ir conociendo el nuevo sistema que a buen seguro será el que se imponga en años venideros.</p><p class="elsevierStylePara"></p><p class="elsevierStylePara">BIBLIOGRAFÍA</p><p class="elsevierStylePara">1Ratner D, Thomas CO, Bickers D. The uses of digital photography in dermatology. J Am Acad Dermatol 1999; 41: 749-756.</p><p class="elsevierStylePara">2Bittorf A, Fartasch M, Schuler G, Diepgen TL. Resolution requirements for digital images in dermatology. J Am Acad Dermatol 1997; 37: 195-198.</p><p class="elsevierStylePara">3Ribera M, Massó A. Nociones básicas de fotografía dermatológica. Piel 1994; 9: 479-486.</p><p class="elsevierStylePara">4Sama V. Espera justificada. FV Foto-Vídeo Actualidad 2000; 6: 69-75.</p><p class="elsevierStylePara">5Borrego L, López JL, González B. Fotografía digital y dermatología. Piel 1999; 14: 444-453.</p><p class="elsevierStylePara">6Papier A, Peres MR, Borrow M, Bhatia A. The digital imaging system and dermatology. Int J Dermatol 2000; 39: 561-575.</p><p class="elsevierStylePara">7Ribera M, Grimalt R. La fotografía digital: un encuadre de futuro. Piel 1998; 13: 373-375.</p><p class="elsevierStylePara">8Borrego L. Fotografía digital. En: Ribera M, Harto AL, Bravo-Piris J, editores. La imagen en dermatología. Fotografía médica. Barcelona: Masson, S.A. 2000.</p><p class="elsevierStylePara">9Helm TN, Wirth PB, Helm KF. Inexpensive digital photography in clinical dermatology and dermatologic surgery. Cutis 2000; 65: 103-106.</p><br></br><br></br>" "pdfFichero" => "21v16n02a10022518pdf001.pdf" "tienePdf" => true "multimedia" => array:6 [ 0 => array:6 [ "identificador" => "tbl1" "tipo" => "MULTIMEDIATABLA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" "tabla" => array:1 [ "tablatextoimagen" => array:1 [ 0 => array:1 [ "tablaImagen" => array:1 [ 0 => array:4 [ "imagenFichero" => "21v16n02-10022518tab01.gif" "imagenAlto" => 515 "imagenAncho" => 362 "imagenTamanyo" => 26646 ] ] ] ] ] ] 1 => array:6 [ "identificador" => "fig1" "tipo" => "MULTIMEDIAFIGURA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" "figura" => array:1 [ 0 => array:4 [ "imagen" => "21v16n02-10022518fig02.jpg" "Alto" => 274 "Ancho" => 730 "Tamanyo" => 32552 ] ] ] 2 => array:6 [ "identificador" => "tbl2" "tipo" => "MULTIMEDIATABLA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" "tabla" => array:1 [ "tablatextoimagen" => array:1 [ 0 => array:1 [ "tablaImagen" => array:1 [ 0 => array:4 [ "imagenFichero" => "21v16n02-10022518tab03.gif" "imagenAlto" => 262 "imagenAncho" => 366 "imagenTamanyo" => 10939 ] ] ] ] ] ] 3 => array:5 [ "identificador" => "tbl3" "tipo" => "MULTIMEDIATABLA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" ] 4 => array:5 [ "identificador" => "fig2" "tipo" => "MULTIMEDIAFIGURA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" ] 5 => array:5 [ "identificador" => "tbl4" "tipo" => "MULTIMEDIATABLA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "copyright" => "Elsevier España" ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "url" => "/02139251/0000001600000002/v0_201607111229/10022518/v0_201607111229/es/main.assets" "Apartado" => array:4 [ "identificador" => "16944" "tipo" => "SECCION" "es" => array:2 [ "titulo" => "Editorial" "idiomaDefecto" => true ] "idiomaDefecto" => "es" ] "PDF" => "https://static.elsevier.es/multimedia/02139251/0000001600000002/v0_201607111229/10022518/v0_201607111229/es/21v16n02a10022518pdf001.pdf?idApp=UINPBA00004N&text.app=https://www.elsevier.es/" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/10022518?idApp=UINPBA00004N" ]
Información del artículo
ISSN: 02139251Idioma original: Español
Datos actualizados diariamente
| año/Mes | Html | Total | |
|---|---|---|---|
| 2020 Enero | 1 | 2 | 3 |
| 2019 Agosto | 1 | 2 | 3 |
| 2015 Junio | 1 | 0 | 1 |
| 2015 Mayo | 1 | 1 | 2 |
| 2001 Febrero | 609 | 0 | 609 |