Las depresiones anteparto y posparto son condiciones médicas nada excepcionales que afectan de forma negativa a madre e hijo, y necesitan ser detectadas lo antes posible para evitar o limitar el uso de tratamientos farmacológicos con posibles efectos colaterales. Sólo la depresión posparto tiene entidad clínica propia reconocida, aunque existen razones sólidas para que la depresión relacionada con la gestación, en todos sus estadios, se considere una enfermedad propia por las consecuencias posiblemente graves sobre madre e hijo.
El autor revisa los datos actuales que justifican una mayor atención por parte del tocólogo a la apariencia de síntomas depresivos desde los primeros momentos de la concepción y gestación. A tal fin ha propuesto un protocolo estadístico sencillo con que se confecciona un «perfil anímico del embarazo». Este perfil ayudaría en el tratamiento adecuado de la depresión anteparto y posparto y serviría como un preaviso de suicidio posparto.
Antepartum and postpartum depression are common medical conditions which negatively affect mother and child and which should be detected as early as possible to avoid or limit the use of pharmacological treatments with possible side effects. Only postpartum depression has been given a proper clinical identity, although there is ample evidence to support the creation of a specific identity for pregnancy-related depression due to the possibly serious consequences for mother and child.
The author reviews the current evidence supporting the need for obstetricians to pay greater attention to signs of depression from the beginning of conception and pregnancy. To that purpose, a simple statistical protocol to determine a «pregnancy mood profile» is proposed. This profile would assist in managing antepartum and postpartum depression and would serve as a prealert for postpartum suicide.