Hemos leído con gran interés el artículo «Colposacropexia laparoscópica con malla y anclaje de titanio para la corrección del prolapso de cúpula vaginal» publicado en Progresos de Obstetricia y Ginecología por José Luis Herráiz et al., en el que se comunica los resultados retrospectivos de la técnica, eficacia y seguridad de 14 colposacropexias laparoscópicas con malla en Y de macroporo y anclajes helicoidales de titanio, para el tratamiento del prolapso de cúpula vaginal1.
Coincidimos con los autores en que, para obtener resultados concluyentes, son necesarios trabajos con un amplio número de pacientes con seguimientos prolongados, pero a luz de los datos actuales podemos afirmar sin temor a equivocarnos que la colposacropexia laparoscópica con malla se ha convertido en la técnica de referencia para el tratamiento del prolapso genital por su alta efectividad anatómica y funcional. Está especialmente indicada en pacientes con alto riesgo de recidivas2.
Siendo una técnica primariamente indicada para el manejo del prolapso apical, consigue también unos buenos resultados sobre el resto de los compartimentos, sin ser necesario en la mayoría de las ocasiones maniobras adicionales sobre estos para corregir los defectos existentes3,4.
Nosotros, en un trabajo publicado en esta misma revista, y citado en el artículo de José Luis Herráiz et al., mostrábamos los buenos resultados obtenidos en nuestro centro sobre el compartimento anterior en 77 pacientes portadoras de cistocele de cualquier grado, intervenidas mediante colposacropexia laparoscópica, y con un seguimiento igual o superior a 6 meses. Concluíamos que en nuestra experiencia no es necesario realizar técnicas quirúrgicas adicionales como la reparación paravaginal y similares sobre el compartimento anterior después de una colposacropexia. No nos incluimos en el grupo de autores que recomiendan lo contrario como parece desprenderse de la lectura del mencionado artículo5.
Bajo estas recomendaciones subyace la idea de que el ápex vaginal es la piedra angular del aparato de soporte del suelo pélvico. Una adecuada cirugía del compartimento medio restaura en la mayoría de las ocasiones la topografía de las paredes anterior y posterior vaginal. Tampoco es necesario, en nuestra experiencia correcciones adicionales del compartimento posterior6.
La colposacropexia es una cirugía efectiva para un grupo amplio de pacientes incluso mayores7, con escasas complicaciones, y altas tasas de satisfacción para pacientes y profesionales.