Realizar una revisión sobre la eficacia y seguridad de los tratamientos homeopáticos durante la gestación.
MétodosRevisión de la literatura.
ResultadosLos productos homeopáticos más utilizados durante la gestación, en el trabajo del parto y durante el puerperio, son: Caulophyllum, Actaea racemosa, Árnica montana y China rubra. Existen pocos estudios comparativos que hayan analizado la eficacia de estos productos frente a placebo o frente a tratamientos médicos tradicionales. Una revisión Cochrane no encontró evidencias para recomendar el uso de homeopatía en el trabajo de parto. Además, los tratamientos homeopáticos no están exentos de posibles efectos secundarios.
ConclusionesNo existe evidencia científica de calidad para apoyar el uso de tratamientos homeopáticos durante la gestación y el trabajo de parto.
To assess the efficacy and safety of homoeopathy during pregnancy through a literature review.
MethodsLiterature review.
ResultsThe homoeopathic treatments most commonly used during pregnancy, labour and the postpartum period are Caulophyllum, Actaea racemosa, Árnica montana and China rubra. Few studies have compared homoeopathy with either placebo or traditional treatments. A Cochrane review found no evidence to recommend the use of homoeopathy during labour. Moreover, homoeopathic treatments are not free from possible side effects.
ConclusionThere is insufficient good quality evidence to support the use of homoeopathy during pregnancy and labour.
La utilización de tratamientos médicos alternativos y complementarios (TMAC) está aumentando entre la población general de manera que, de acuerdo a los datos de una encuesta realizada en Estados Unidos, en el año 1997 hasta un 42,1% de la población estadounidense utilizaba algún tipo de TMAC1. Los TMAC se utilizan fundamentalmente en enfermedades crónicas como dolor lumbar persistente, ansiedad, depresión y cefaleas. En este mismo estudio se comprobó que las mujeres en edad reproductiva eran usuarias frecuentes de este tipo de tratamientos (hasta el 48,9% de las mujeres encuestadas reconoció utilizar TMAC).
Para los escépticos, la homeopatía es una forma de tratamiento arcaica y poco o nada efectiva mientras que entre los médicos que la practican, y entre muchos de sus pacientes, existe el convencimiento de su elevada efectividad clínica.
Parece que el uso de TMAC durante el proceso del embarazo, parto y puerperio es una práctica bastante extendida a nivel mundial. En una encuesta realizada entre las matronas de Carolina del Norte, un 93,9% de las mismas respondió que recomendaba este tipo de tratamiento a sus pacientes. El porcentaje de matronas que recomendaba homeopatía fue del 30,5%2. La extensión e importancia del asunto se comprueba al realizar una sencilla búsqueda en Internet, utilizando el buscador Google, que pone de manifiesto la existencia de 399.000 páginas web utilizando la entrada homeopatía en el embarazo y parto3.
Desde hace, aproximadamente un año, hemos detectado en nuestro medio un incremento en la utilización de tratamientos médicos alternativos en diversas situaciones que rodean a la mujer embarazada, incluyendo el trabajo de parto y el posparto. Entre estas alternativas destaca el uso de la homeopatía para inducir el trabajo de parto.
Algunas de nuestras pacientes embarazadas habían comenzado a tomar sustancias homeopáticas dentro de un plan de preparación para el parto, que se inicia a partir del tercer trimestre con Actaea racemosa (dosis de 30 centesimal hahnemanianna [CH]), estando en trabajo de parto establecido toman Caulophyllum (5 CH), al conseguir la dilatación completa comienzan con Árnica (30 CH) y durante el posparto se prosigue la pauta con Árnica (7 CH) y China rubra (7 CH). En ninguno de nuestros casos, dichas pautas fueron recetadas por médicos, sino por otro personal sanitario, como farmacéuticos o matronas.
A la vista del progresivo aumento de este tipo de tratamientos en el periodo gestacional, pero especialmente durante el trabajo de parto, y siguiendo las recomendaciones de algunos autores que preconizan que, dado el auge de este tipo de terapias y el importante número de mujeres que las utilizan, los ginecólogos debemos de conocer su composición y características4, nos ha parecido adecuado realizar una revisión sobre los efectos de la homeopatía durante la gestación.
Concepto y eficacia clínica de la homeopatíaLa homeopatía ha sido utilizada desde hace unos 200 años, y se basa en la ley de similitud; por la que se explica que una sustancia capaz de producir síntomas en una persona sana es capaz de curar síntomas semejantes en un enfermo, administrando esa misma sustancia en dosis mínimas.
El proceso de preparación de las sustancias homeopáticas conlleva diluciones repetidas y dinamización (agitación vigorosa), y esto es lo que proporciona resultados con mayor rapidez y efectividad, con menor probabilidad de generar efectos secundarios5. El preparado homeopático resultante puede contener muy pocas o ninguna molécula simple del soluto original5.
Por esta razón, muchos científicos han sugerido que los efectos clínicos resultantes de los remedios homeopáticos se deben al efecto placebo6,7. Sin embargo, los datos de dos metanálisis de ensayos clínicos controlados con placebo han encontrado un mayor efecto terapéutico de la homeopatía en comparación con el placebo8,9. En el metaanálisis de Linde et al.8, la odds ratio del efecto de la homeopatía frente a placebo fue de 2,45 (intervalo de confianza 95%: 2,05-2,93), concluyendo que el efecto de la homeopatía es superior al del placebo.
A pesar de las evidencias acumuladas, y de que la homeopatía ha sido utilizada en diversos campos de la medicina, incluyendo patologías agudas y crónicas, así como en el ámbito pediátrico y ginecoobstétrico, aún no se ha definido el mecanismo biofísico exacto que subyace en la homeopatía y que explica su acción terapéutica5 y, algunas instituciones como el sistema nacional de salud británico desaconsejan su uso debido a la ausencia de evidencias científicas de calidad10. Además, se cuestiona la calidad de los estudios realizados con tratamientos homeopáticos y se recomienda la realización de ensayos clínicos controlados frente a placebo, aleatorizados y ciegos11.
Una reciente revisión sistemática con metaanálisis en la que se incluyeron 32 ensayos clínicos de los que, finalmente, 22 fueron utilizados en el metaanálisis, concluyó que la baja calidad de los ensayos incluidos exigía una valoración cautelosa de los resultados12.
A pesar de las dudas existentes, diferentes universidades ofrecen cursos, en ocasiones controvertidos, sobre TMAC13,14 e incluso algunas compañías de seguros, especialmente en Estados Unidos, incluyen este tipo de tratamiento en sus coberturas15 y, en los últimos años se ha observado un enorme incremento en el gasto farmacéutico de este tipo de compuestos16.
Tratamientos homeopáticos en Ginecología y ObstetriciaEn nuestra especialidad, la Ginecología y Obstetricia, la homeopatía, junto con la acupuntura, son ampliamente utilizadas. En una encuesta realizada en Alemania en la que se obtuvo información de 381 servicios de ginecología y obstetricia, hasta un 93,4% de los servicios que respondieron a la encuesta manifestaron que la homeopatía formaba parte de su cartera de servicios17. En otro país centroeuropeo, como Suiza, el hospital universitario de Zúrich ofrece una consulta médica online en la que hasta el 18% de las preguntas de las pacientes tienen relación con la ginecología y la homeopatía18. Estos datos reflejan hasta qué punto los TMCA han calado en la población general, y en especial, en las mujeres que parecen valorar el componente natural como un valor añadido de este tipo de tratamientos. Uno de los problemas que preocupa a muchos profesionales sanitarios es que, casi la mitad de las mujeres que recurren a este tipo de terapias o tratamientos, lo hace sin consultar previamente con su médico especialista19.
En ginecología la homeopatía ha sido utilizada para tratar patologías como el síndrome premenstrual, síntomas menopáusicos y climatéricos o problemas relacionados con el puerperio20 aunque sin gran aceptación por parte de los ginecólogos que consideran a la homeopatía como la terapia menos efectiva para los síntomas asociados a la menopausia21. También se ha utilizado en tratamientos de fertilidad22, como complemento a los tratamientos del cáncer ginecológico23, en el tratamiento de las candidiasis recurrentes24 y en el del síndrome premenstrual25. Pero, sin lugar a dudas, el campo de la obstetricia y ginecología en el que más se recurre a la homeopatía es el relacionado con el embarazo, parto y puerperio.
Tratamientos homeopáticos durante la gestación y el partoLos tratamientos homeopáticos se utilizan, fundamentalmente, para la inducción del parto26, puesto que aunque el parto es un proceso natural, se puede acompañar de dolor severo o extremo en más de la mitad de los casos27 y muchas mujeres buscan en los TMCA un complemento que les pueda ayudar a superar el momento del parto más confortablemente, sin que el recurso a los TMCA suponga el rechazo de los tratamientos médicos tradicionales. La percepción de estar utilizando un tratamiento que parece no presentar efectos secundarios y es percibido como seguro para el feto ayuda a que la homeopatía sea bien aceptada por las mujeres gestantes28. En ocasiones, el problema se plantea porque las mujeres no comunican a los profesionales sanitarios encargados de su atención el hecho de que están utilizando TMCA a pesar de que alguno de estos tratamientos se basa en el uso de hierbas farmacológicamente activas. La prevalencia de uso de TMCA entre las mujeres gestantes parece ser alta tal y como lo demuestran varios estudios epidemiológicos. En un estudio prospectivo realizado en Alemania en el que 205 mujeres que habían parido en el último año contestaron un cuestionario sobre el uso de TMCA, 104 (50,7%) reconocieron su uso. Las terapias más utilizadas fueron la homeopatía, la acupuntura y la fitoterapia29. En otro estudio realizado en Australia, hasta el 73% de las embarazadas había recurrido al uso de TAMC durante la gestación, parto, puerperio o lactancia30. Se desprende, por tanto, de algunos estudios epidemiológicos que los TMCA son bastante bien aceptados por las mujeres gestantes. Otra cuestión bien diferente es el grado de aceptación que este tipo de tratamientos puede tener entre los profesionales sanitarios. Algunos estudios han demostrado que las TMCA son bien aceptadas por los obstetras y ginecólogos durante el embarazo, pero no durante el parto31 y que incluso la mayoría de las matronas recomiendan su uso32.
Los productos homeopáticos más utilizados durante la gestación, en el trabajo del parto y durante el puerperio, son:
Caulophyllum (Caulophyllum thalictroides)Es una planta que proviene de América del Norte y de la que se utilizan, en TMCA, sus raíces. Se considera que Caulophyllum estimula el útero y alivia el dolor y, por ello, suele utilizarse en el «falso trabajo de parto» cuando las contracciones son ineficaces para dilatar el cuello del útero. Suele alternarse, en el trabajo de parto, con Actaea racemosa33. Muchas tribus nativas americanas y parteras utilizaban esta hierba con fines abortivos y anticonceptivos34.
Actaea racemosaTambién conocida como cimicífuga se obtiene de las raíces de la Cimicífuga racemosa, una planta habitual en los bosques de Estados Unidos y posee cierto efecto estrogénico35.
Se usa cuando los dolores de parto son fuertes e irregulares con espasmo del cuello uterino que impide la dilatación33. Desde 1850 se ha utilizado para tratar endometritis, amenorrea, dismenorrea, menorragia, esterilidad, severos dolores posparto, y para aumentar la producción de leche materna36.
Árnica montanaEs una planta original de Europa. Se usa como analgésico y sedante, para aliviar el dolor de las contracciones. Además, suaviza, hidrata y reconforta la piel dañada y es utilizada para la regeneración tisular en inflamaciones locales por contusión o reumatismo. También Árnica montana ha sido utilizada como abortivo popular por su alto contenido de fitoestrógenos. En una encuesta realizada en el Reino Unido se puso de manifiesto que Árnica montana es utilizada por el 3,1% de las mujeres embarazadas del condado de Avon37.
China rubraSintetizada a partir de la corteza de quinina roja, específicamente cultivada en Perú. Se usa para tratar estados de astenia, debilidad, anemia e hipotensión que aparece por pérdida de líquidos orgánicos33. También se indica en cuadros de hinchazón y meteorismo abdominal con hiperestesia de contacto y para el tratamiento de cuadros febriles y para aliviar las alteraciones del sueño acompañadas de pesadillas.
Una de las indicaciones de la China rubra es el tratamiento de la malaria aguda en embarazadas, habiendo demostrado en un estudio randomizado que es igual de efectiva, pero presenta menos efectos secundarios, que el tratamiento clásico con quinina38.
Efectividad de la homeopatía en el trabajo de partoKleijnen et al.39 recogieron la información de tres ensayos clínicos randomizados que evaluaron la eficacia de la C. thalictroides y la C. racemosa en la inducción del parto. La conclusión de su revisión fue que la combinación de ambos productos reducía el periodo de dilatación y el expulsivo en 3,5 horas, así como la incidencia de distocias.
En un ensayo clínico aleatorizado, doble ciego en el que 40 parturientas fueron randomizadas a alguno de estos tres grupos: Árnica montana C6 y Bellis perennis C6, Árnica montana C30 y Bellis prennis C30 o placebo, los niveles de hemoglobina a las 72 horas del parto fueron superiores en los dos grupos que recibieron homeopatía (12,7 y 12,4mg/dl respectivamente) que en el grupo placebo (11,6mg/dl; p>0,05) y los autores del ensayo concluyeron que el tratamiento homeopático con Árnica montana y Bellis perennis puede reducir la pérdida sanguínea del parto40.
En un análisis sobre 409.413 partos habidos en Alemania en el periodo comprendido entre los años 2001 y 2008, se observó que el 4,8% de las parturientas habían utilizado alguna TMCA y, sorprendentemente, el uso de este tipo de terapias se asoció a un mayor consumo de analgésicos durante el parto41. Los autores de este estudio no encontraron explicación razonable a este mayor uso de analgésicos.
Un ensayo clínico realizado en Alemania analizó la efectividad del Caulophyllum en la inducción del parto. Se incluyeron 40 embarazadas de 38-42 semanas de gestación que fueron randomizadas, 20 a recibir Caulophyllum (grupo estudio) y otras 20 a recibir placebo (grupo control). No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre ambos grupos en ninguna de las variables principales del estudio (tiempo necesario para el establecimiento de contracciones uterinas regulares)42.
En otro ensayo clínico randomizado realizado en Francia en el que se evaluó la eficacia de una combinación de Caulophyllum, Actaea racemosa, Árnica, Pulsatilla y Gelsemium frente a placebo para reducir el periodo del parto en 93 mujeres gestantes de más de 36 semanas, se observó que en el grupo tratado el tiempo medio del parto fue de 5,1 horas frente a 8,5 horas en el grupo control y la tasa de complicaciones fue de 11,3% en el primer grupo y de 40% en el segundo, aunque el pequeño tamaño muestral no permite obtener conclusiones definitivas43.
Estos dos últimos estudios fueron incluidos en una revisión Cochrane publicada en el año 20035 en la que se concluyó que no hay pruebas suficientes para recomendar el uso de ningún tratamiento homeopático como método de inducción del trabajo de parto y que dado que existe la probabilidad de que algunas mujeres continúen con la búsqueda de tratamientos homeopáticos para la inducción del trabajo de parto, se necesitan ensayos rigurosos con potencia adecuada que evalúen resultados clínicamente significativos. Dichos ensayos deberían incluir la evaluación de la hiperestimulación uterina así como también indicadores de morbilidad neonatal y materna.
Efectos adversos de los tratamientos homeopáticosExiste la percepción de que los tratamientos homeopáticos están exentos de efectos secundarios por cuanto utilizan productos naturales y «lo natural» es percibido como seguro por una gran parte de la población. No obstante existen estudios que han relacionado el uso de homeopatía con la aparición de algunos efectos secundarios.
En un estudio italiano en el que se entrevistó a 1.044 mujeres de las que 491 (47,03%) refirieron haber utilizado TMCA en el último año, 47 mujeres (9,57%) reconoció haber presentado efectos secundarios pero solo una tercera parte de ellas (36%) consultó con su médico por dichos efectos44. Parece razonable que esta ausencia de solicitud de consejo ante la posible aparición de un efecto secundario constituya una fuente de preocupación para los profesionales sanitarios.
Caulophyllum thalictroides se ha asociado a accidente cerebrovascular fetal45, infarto agudo de miocardio46 y fracaso multiorgánico por hipoxia47. En base a la evidencia disponible se considera que el Caulophyllum thalictroides debe de ser utilizado con extrema prudencia durante el embarazo, solo bajo supervisión médica y no debería de estar disponible sin receta médica48.
El uso de Árnica montana se ha asociado en algunos casos clínicos publicados con envenenamiento severo y fatal, cardiotoxicidad, incremento de la presión arterial, alteraciones gastrointestinales y parálisis muscular49.
Cimicifuga racemosa presenta un efecto estrogénico y su uso durante el embarazo no se recomienda por esta razón50.
Como consecuencia de los informes y estudios aparecidos en los que se relacionaba el uso de TMCA las hierbas medicinales y los tratamientos homeopáticos han sido objeto de varias revisiones sistemáticas con la finalidad de evaluar su seguridad51. En la tabla 1 se presentan los efectos adversos comunicados con el uso de TMCA.
Algunos efectos secundarios asociados al uso de TMCA
Efectos secundarios leves | DolorReacciones alérgicasEstreñimientoDermatitisFatigaCefaleaAlteraciones menstrualesNáuseas y vómitos |
Efectos secundarios moderados | AnorexiaNeutropenia reversibleAlteraciones de la coagulaciónConfusiónDisfagiaInhibición de la agregación plaquetariaFotofobia y midriasis |
Efectos secundarios graves | PsicosisHemorragia cerebral y muerteInsuficiencia respiratoriaTaquicardiaConvulsionesAlteraciones renales y hepáticasAccidente cerebrovascular perinatalInfarto agudo de miocardioConvulsiones y epilepsia |
Fuente: Posadzki et al.51.
Los TMCA se utilizan ampliamente por la población general y también por parte de las mujeres durante el proceso de gestación, parto y puerperio a pesar de que existen pocos estudios que evalúen la efectividad para estimular el inicio del trabajo de parto y que la mayoría de ellos presentan limitaciones metodológicas que no permiten sacar resultados concluyentes5. Tras revisar las evidencias disponibles se puede concluir que no hay pruebas suficientes que permitan recomendar el uso de la homeopatía como método de inducción del trabajo de parto5.
Los TMCA no están exentos de riesgos y a pesar de que existe un considerable apoyo de las matronas a este tipo de tratamientos es necesario que estas profesionales sanitarias basen sus consejos y prescripciones en la mejor evidencia científica disponible52.
En cuanto a las recomendaciones del uso de los TMCA a las embarazadas por parte de personal no médico, es necesario hacer llegar una adecuada información a dicho personal sobre los efectos de dichas sustancias durante el embarazo y el trabajo de parto; teniendo en cuenta que los estudios que parecen estar a favor de cierta eficacia son los que peor base científica tienen pues las muestras carecen de un número adecuado o están mal diseñados, y por lo tanto sus resultados son dudosos. Estudios de reciente data, mejor diseñados, dan a conocer que no hay pruebas suficientes para ser recomendados.
Responsabilidades éticasProtección de personas y animalesLos autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datosLos autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informadoLos autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.