Objetivos: Valorar la utilidad de la TC coronariografía en el manejo de los candidatos a trasplante hepático, ya que cuando estos pacientes presentan enfermedad coronaria significativa previa al trasplante, existe una mayor morbi-mortalidad a medio y largo plazo.

Material y métodos: Se realizó TC coronariografía a 58 pacientes candidatos a trasplante hepático, con seguimiento de los mismos para determinar cuántos fueron trasplantados, y de ellos cuántos sufrieron algún evento cardiovascular o fallecimiento relacionado con esta patología.

Resultados: De los 58 pacientes incluidos, 14 (24%) recibieron el trasplante hepático y 21 (36%) siguen en lista de espera. En 22 (38%) se desestimó el trasplante, y en 1 caso (2%) no pudo completarse el seguimiento. La TC demostró ausencia de enfermedad coronaria significativa en 34 pacientes (59%), y su existencia en 7 (12%). En otros 7 casos (12%) resultó no concluyente, y en 10 (17%) no pudo completarse debido a elevada puntuación Agaston de calcificación coronaria. Ninguno de los pacientes en los que la TC demostró enfermedad coronaria significativa recibió el trasplante hepático (debido al riesgo cardiovascular y otras comorbilidades), y de los pacientes trasplantados en los que la TC había sido negativa, ninguno sufrió eventos cardiovasculares o falleció por esta causa durante el seguimiento.

Conclusiones: En nuestra serie demostramos que en pacientes candidatos a trasplante hepático la TC coronariografía puede ser una herramienta útil para predecir el riesgo cardiovascular, e influye en la decisión final de realizar o no el trasplante.