Objetivos docentes: Evaluar las características ecográficas sugestivas de malignidad en nódulos tiroideos. Describir los principales hallazgos ecográficos de las neoplasias tiroideas y su concordancia comparando con los datos anatomopatológicos obtenidos.

Revisión del tema: Los nódulos tiroideos son muy comunes en la población, aproximadamente 5-10% de ellos son neoplasias. Los nódulos pueden ser sólidos o quísticos, siendo los de aspecto quístico poco probables de malignidad. Los nódulos benignos están rodeados por una cápsula y suelen exhibir un fino halo hipoecoico periférico. Los nódulos malignos pueden mostrarse hipoecoicos, con márgenes irregulares, vascularización de predominio intranodular, diámetro anteroposterior mayor que el transverso y a veces con microcalcificaciones intranodulares. La cuestión es cómo diferenciar el gran volumen de nódulos tiroideos benignos del pequeño porcentaje de carcinomas. Para ello, los nódulos tiroideos con criterios ecográficos de malignidad son estudiados con biopsia por aspiración con aguja fina (PAAF) guiado por ecografía. El tipo histológico más frecuente es el cáncer papilar, le siguen el carcinoma folicular, medular y anáplasico. La citología maligna en cáncer papilar incluye los cuerpos de psamoma aunque no se identifican siempre. El carcinoma medular muestra hipercelularidad con ausencia de coloide. En el carcinoma anaplásico se observa hipercelularidad desorganizada con crecimiento muy agresivo. Todos estos hallazgos se correlacionaron con los hallazgos ecográficos.

Conclusiones: La ecografía de tiroides es la principal prueba diagnóstica para el estudio de nódulos tiroideos, permitiendo calificar su riesgo de malignidad. La PAAF es el procedimiento de elección para el diagnóstico de nódulos tiroideos sospechosos de malignidad. Los hallazgos ecográficos en combinación con los resultados de la anatomía patológica pueden detectar los nódulos de alto riesgo y así facilitar el manejo de estas lesiones.