Presentar el modelo de proceso de evaluación del desempeño (ED) aplicado en un hospital cubano universitario general de 640 camas y que tiene una población de referencia de 400.000 habitantes.
MétodosSe convocó a un grupo de directivos y trabajadores del hospital para diseñar la metodología de ED y el formulario para la evaluación de los trabajadores de la institución. Se aplicaron encuestas a los presidentes de las comisiones de evaluación, así como una dinámica de grupo en la que participaron, tanto evaluadores como evaluados, para conocer sus opiniones acerca de este procedimiento de ED.
ResultadosSe presentan los pasos que conforman cada una de las etapas del procedimiento de ED y el formulario de evaluación que se elaboró. El 34,5% de los encuestados señaló 5 ventajas y solo 2 personas (3,6%) refirieron 1 ventaja. En lo referente a las dificultades y recomendaciones, predominaron los que señalaron 1 en cada caso (16 [29,1%], y 30 [54,5%], respectivamente), y un número considerable de personas no le encontró dificultades (14 [25,5%]), ni sugirieron recomendaciones (8 [14,5%]) a este proceso.
ConclusionesSe ha logrado, por primera vez en el Sistema Nacional de Salud de Cuba, diseñar e implementar un procedimiento de ED (incluyendo el formulario de evaluación que se utilizó) válido y ampliamente aceptado por evaluadores y evaluados, también por lasorganizaciones sindicales y políticas.
To present a model of performance evaluation (PE) implemented in a Cuban university general hospital with 640 beds with a catchment population of 400 000 inhabitants.
MethodsA group of hospital officials and workers was formed to design the PE methodology and the form to be used when evaluating hospital staff. The presidents of the Evaluation Commissions were given questionnaires, and a group dynamic with the participation of evaluators and evaluees was carried out to determine their opinions on this PE procedure.
ResultsThe steps composing each of the PE procedures and the evaluation form designed is presented. A total of 34.5% of the individuals surveyed itemized 5 advantages and only 2 persons (3.6%) itemized one advantage. Concerning difficulties and recommendations, most participants pointed out one in each case (16 [29.1%] and 30 [54.5%], respectively). A considerable number of participants found no difficulties (14 [25.5%]), nor did they make recommendations for this process (8 [14.5%]).
ConclusionsFor the first time in the Cuban public health system, a valid PE (including an evaluation form) was designed and implemented. This evaluation was widely accepted by evaluators and evaluees, as well as by trade unions and political organizations.