Las fracturas de extremo distal de tibia, son lesiones poco habituales y complejas que requieren un diagnóstico y una planificación operatoria adecuada. Se asocian a un importante número de complicaciones y secuelas.
Estudio retrospectivo observacional de pacientes con diagnóstico de fracturas de extremo distal de tibia 43B y 43C, tratadas quirúrgicamente, con placas de estabilidad angular y con un seguimiento mayor a 12 meses. Comparamos la técnica quirúrgica abierta y Mínimamente invasiva. 21 pacientes. Tratados inicialmente 9 pacientes con fijador externo, 7 pacientes con inmovilización con yeso para luego pasar secundariamente a osteosíntesis con placa y 5 con osteosíntesis con placa de estabilidad angular en el primer día del ingreso.
Se evidenciaron complicaciones precoces: Infección, necrosis cutánea, flictenas, fracaso del material de osteosíntesis. El seguimiento medio fue de 27 meses, y como complicaciones tardías: Dolor residual, consolidación viciosa, osteoartrosis y osteomielitis. No encontramos diferencias significativas entre los pacientes tratados quirúrgicamente con técnicas mínimamente invasiva y técnica abierta.
Se encontró un porcentaje similar de complicaciones a las descritas en la literatura actual. Consideramos que se requieren estudios con un mayor número de pacientes, tiempo de seguimiento para documentar la evolución, secuelas y poder protocolizar su tratamiento.
Fractures of the distal end of the tibia, are unusual and complex injuries that require proper diagnosis and operative planning. They are associated with a number of complications and aftermath.
Retrospective observational study of patients diagnosed with fractures of distal end of tibia 43B and 43C, treated surgically, with plates with angular stability and increased monitoring to 12 months. We compare open and minimally invasive surgical technique 21 patients. 9 patients initially treated with external fixator, 7 patient immobilization with plaster and then move secondarily plate fixation and 5 conservative management initially plate osteosynthesis with angular stability in the first day of admission.
Infection, skin necrosis, bullae, failure of osteosynthesis material: early complications were noted. Mean follow-up was 27 months, and as late complications: residual pain, bad junction, osteoarthritis and osteomyelitis. We found no significant differences between patients treated surgically with minimally invasive techniques and open technique.
A similar percentage of complications described in the literature was found. We believe that studies are needed with larger numbers of patients, follow-up time to document the evolution, consequences and treatment to formalize.