Objetivos: La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es un trastorno metabólico frecuente en la población geriátrica que alcanza al 30% de las personas mayores de 75 años. En pacientes de edad avanzada los criterios de hemoglobina glucosilada (Hb1Ac) deben ser más flexibles según las guías americana (ADA-2017) y española (SC-2012) que recomiendan valores de HbA1c <7,5% en el anciano sano y HbA1c <8,5% en el mayor frágil.
Los objetivos fueron obtener datos sobre el abordaje de la DM2 por un colectivo de médicos y farmacéuticos en el paciente anciano sano y en el anciano frágil.
Métodos: Estudio transversal. 993 médicos y 999 farmacéuticos de España cumplimentaron un cuestionario estructurado de 30 preguntas y 3 casos clínicos. Se calcularon frecuencias relativas y se realizaron análisis de χ2 para comparar las respuestas entre ambos colectivos.
Resultados: El 62,80% de los médicos reconoce seguir las recomendaciones de las guías. La mayoría de médicos establecen objetivos de tratamiento menos estrictos (niveles HbA1c) para ancianos sanos y ancianos frágiles (79,4 y 92,5%, respectivamente). Un menor porcentaje de farmacéuticos opinaba que los niveles HbA1c debían ser más flexibles a los de la población general con DM2 (30,6 y 31,4%, respectivamente). Las diferencias fueron significativas en ambos casos (p<0,001). Pese a lo anterior, el 38,9% de los médicos opinaron que los valores de HbA1c debían ser inferiores a 7,5% para los pacientes ancianos sanos y el 28,7% respondieron que la HbA1c debía ser menor de 8,5% para los frágiles.
Los médicos y farmacéuticos consideraron que la posibilidad de padecer hipoglucemias (97,7% vs 80,1%), las interacciones medicamentosas (93,9% vs 81,6%), el riesgo a sufrir fracturas (83,7% vs 63,9%) y las intolerancias digestivas (76,4% vs 49,5%) fueron los efectos secundarios más relevantes para introducir cambios en el tratamiento. Efectos considerados menos importantes por los farmacéuticos (p≤0,001).
Conclusiones: Los médicos, aunque siguieron las recomendaciones en cuanto a flexibilizar los objetivos terapéuticos en el paciente anciano sano y anciano frágil con DM2, continuaron estableciendo valores más estrictos que los recomendados.
El riesgo de sufrir hipoglucemias fue considerado por los médicos y por los farmacéuticos el efecto secundario más relevante para modificar el tratamiento.