Hans Niedermüller
El 21 de enero de este nuevo año falleció, durante una corta estancia en Australia, Hans Niedermüller, pionero de la Gerontología experimental austríaca.
Nacido en Viena, hace 65 años, el Prof. Niedermüller ha sido uno de los más importantes impulsores de la investigación del envejecimiento en Austria. Doctor en Ciencias Químicas, muy pronto se dedicó a la investigación básica del envejecimiento, y tuvo como punto de mira averiguar los mecanismos esenciales del retroceso biológico. Obtuvo resultados de gran relevancia, así que, en poco tiempo, sus trabajos recibieron un fuerte eco internacional, en especial, aquéllos sobre la reparación del ADN. Hans Niedermüller también investigó la influencia del envejecimiento en la dinámica del colágeno. Así mismo demostró los cambios en la señal de transducción producidos por el avance de la edad. Sus publicaciones le proporcionaron reconocimiento internacional como experto de la implicación genómica en el envejecimiento. Hace tan sólo unos meses publicó un extenso capítulo sobre la determinación genética de la duración de la vida y las estrategias que la prolongan en «Bases médico-moleculares de las enfermedades específicas de la edad» (Molekularmedizinische Grundlagen von altersspezifischen Erkrankungen, Springer) que, especialmente por su claridad en la exposición de conceptos, demuestra lo profundos y extensos que eran sus conocimientos.
Sus logros en la investigación del envejecimiento le condujeron a la habilitación docente por la Universidad Veterinaria de Viena en el área de la Gerontología experimental, y llegó a ser el primer profesor europeo en esta disciplina. Finalmente, la Sociedad Ludwig Bolzmann le encomendó la dirección del Instituto de Gerontología experimental en el Departamento de Fisiología de la Universidad Veterinaria, labor que realizó con éxito hasta poco antes de su fallecimiento. Durante muchos años fue presidente de la Sección Experimental de la Sociedad Austríaca de Geriatría y Gerontología. Su actividad docente, igual que la investigadora, tuvieron siempre un carácter interdisciplinario. Así enseñó las bases biológicas del envejecimiento tanto en la Universidad Veterinaria como en la Facultad de Medicina de Viena.
Al bioquímico e investigador básico del envejecimiento, hay que añadir el Niedermüller filósofo, comprometido con la política. Su interés y su formación en filosofía le llevaron a escribir varios capítulos en libros de esta disciplina, y dio clases sobre los fundamentos en teoría científica y del conocimiento en la Universidad de Viena. Finalmente, no se puede cerrar esta necrológica sin recordar la integridad humana del Prof. Niedermüller. De pensamientos avanzados, demasiado tolerantes, sinceros y altruistas como para considerarlos habituales en la izquierda moderna, despreciaba el oportunismo y la ambición, postura que demostró con hechos, ya que, aunque tuvo buenos amigos poderosos, siempre rehusó beneficiarse de su amistad.
Con Hans Niedermüller la biología del envejecimiento pierde un gran científico y, para muchos de esta área gerontológica, un amigo ejemplar.
