En el artículo se presentan los primeros resultados obtenidos en una investigación sobre negligencia y malos tratos sufridos en el hogar por las personas ancianas de una muestra de personas que reciben los servicios de ayuda a domicilio. La investigación ha sido financiada por el Ministerio de Educación y Ciencia.
MATERIAL Y MÉTODOSSe ha entrevistado a las auxiliares domiciliarias que atienden a 2.351 personas ancianas en cinco municipios del País Vasco, Andalucía y Canarias. Entre los resultados puede señalarse en primer lugar que son en total 111 los casos detectados lo que supone el 4,7%. Si se extrapolase este porcentaje –que en la realidad debe ser mayor dada la «sensibilidad» del tema– podría decirse que al rededor de 5.300 personas ancianas en España que reciben asistencia domiciliaria podrían estar sufriendo algún tipo de maltrato por parte de sus familiares principalmente.
RESULTADOSEn el artículo son 104 los casos analizados. En el 81% de los casos son mujeres las víctimas y varones en el 19% restante. También puede decirse que en el 55% de los casos de malos tratos, éstos han sido perpetrados por los hijos e hijas biológicos y políticos, en el 12% de los casos por el cónyuge, en el 7% por hermanos o hermanas, y en el 25% por otras personas. Por otra parte, es mayor la existencia de abandono o negligencia en el trato (de carácter físico y/o psicológico) que los malos tratos propiamente dichos. También que los varones analizados proporcionalmente y en relación a las mujeres, sufren algo más de negligencia, mientras que las mujeres proporcionalmente y en relación a los varones sufren más malos tratos (físicos, psicológicos y abuso material). Se ha detectado también un caso de abuso sexual en una mujer. También ellas sufren más que los varones varios tipos de malos tratos al mismo tiempo. Puede también hipotetizarse que la existencia y extensión de servicios comunitarios para las personas ancianas frágiles puede disminuir el riesgo de sufrir malos tratos.
DISCUSIÓNEntre otras cosas puede concluirse que ser varón o mujer se asocia a la probabilidad de convertirse en víctima de malos tratos. También, que entre los objetivos de las políticas sociales y sanitarias debe establecerse el de la detección de los casos existentes de abandono y maltrato, así como de las personas y grupos que pueden presentar mayor riesgo de sufrir algún tipo de maltrato. Asimismo deben arbitrarse las medidas necesarias (como establecimiento de protocolos entre otras) para que haciendo visibles a las víctimas puedan ser atendidas convenientemente, así como sus familiares.
This article presents the first results of a research on elder abuse and neglect at home. The study was carried out on a sample of persons receiving home help services. This research has been funded by the Ministry of Education and Sciences.
MATERIAL AND METHODSHome care assistants caring for 2,351 persons from five different municipalities in the Basque Country, Andalucia and the Canary Islands were interviewed. 111 cases were detected, which amounts to 4.7 per cent of the total population. If this percentage was extrapolated –it should, in fact, be larger given the «sensitivity» of the topic– it could be suggested that around 5.300 elderly persons in Spain receiving home care could be suffering some kind of abuse mainly by their family.
RESULTS104 cases are analyzed in the article. In 81 per cent of the cases, women are the victims with the remaining 19 per cent being men. It was also noticed that abuse was commited by biological and in-law sons and daughters in 55 per cent of the cases, in 12 per cent by husbands, in 7 per cent by siblings, and in 25 per cent of the cases by others. On the other hand, the rate of abandonment and neglect is higher (physical and/or psychological neglect) than abuse as such. In addition, males suffer more neglect proportionally and in relation to women, whereas women suffer more abuse (physical, psychological and material) proportionally and in relation to men. A case of sexual abuse was detected in a woman as well. Women also suffer more kinds of abuse at the same time than men. It could be hypothesised that the existence and extension of community services for frail elderly persons could reduce the risk of suffering abuse.
DISCUSSIONIt can be concluded that being a male or a female is associated with the likelihood of becoming a victim of abuse. Besides, social and health policies need to achieve the aim of identifying those existing cases of abandonment and abuse, as well as detecting those persons and groups who may be at higher risk of suffering abuse. Similarly, the required measures should be adopted (as setting up protocols, amongst others) so that, by making victims visible, both victims and their families can be cared for adequately.