Varón de 68 años diagnosticado de carcinoma urotelial, libre de enfermedad tras cistoprostatectomía y quimioterapia. En un estudio TC abdominopélvico (realizado en un centro externo) se evidenciaron adenopatías retroperitoneales sugestivas de recidiva tumoral, lo que condujo a la realización de la PET/TC con 18F-FDG en nuestro centro. El estudio PET/TC con 18F-FDG no evidenció lesiones hipermetabólicas sugestivas de recidiva local ni signos de diseminación adenopática (incluyendo los territorios retroperitoneales) o a distancia. No obstante, en la PET/TC con 18F-FDG destacaban múltiples opacidades pulmonares bilaterales periféricas en vidrio deslustrado hipermetabólicas, predominantemente en lóbulos superiores, sugestivas de proceso inflamatorio/infeccioso de etiología vírica (probable COVID-19, en el contexto de pandemia) (imagen 1-1a; flechas rojas). Cuando se realizó la PET/TC con 18F-FDG el paciente estaba asintomático y se le recomendó consultar a urgencias para realización de pruebas de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) de exudado nasofaríngeo, donde no acudió. Tras 5 días en «cuarentena domiciliaria», el paciente consultó por sintomatología compatible con neumonía, diagnosticándose por PCR de SARS-CoV-2 (severe acute respiratory syndrome coronavirus 2, por sus siglas en inglés). El paciente recibió tratamiento incompleto con hidroxicloroquina y oxigenoterapia por abandono. A los 3 meses y estando el paciente asintomático se realizó PET/TC con 18F-FDG de control que evidenció progresión tumoral hepática (imagen 2-2b; flechas azules) con resolución de los infiltrados pulmonares bilaterales (imagen 2a).
Varón de 68 años diagnosticado de carcinoma urotelial, libre de enfermedad tras cistoprostatectomía y quimioterapia. En el PET/TC con 18F-FDG basal (imagen 1) únicamente destacan múltiples opacidades pulmonares bilaterales de densidad en vidrio deslustrado e hipermetabólicas predominantemente en lóbulos superiores, sugestivas de proceso inflamatorio/infeccioso de probable etiología vírica (imagen 1a; flechas rojas). No se observan otras lesiones hipermetabólicas sugestivas de malignidad (imagen 1b). En el estudio PET/TC con 18F-FDG de control (a los 3 meses del PET/TC basal; imagen 2) se observa resolución de los infiltrados pulmonares bilaterales (imagen 2a) con aparición de múltiples lesiones hepáticas hipermetabólicas sugestivas de enfermedad metastásica, destacando las lesiones del segmento I y segmento VIII (imagen 2b; flechas azules).
Esta imagen destaca la utilidad de la PET/TC con 18F-FDG en la detección precoz de pacientes asintomáticos con COVID-191 y su potencial utilidad en el seguimiento de estos pacientes. Aunque hasta la fecha no se han reportados casos de seguimiento por PET/TC con 18F-FDG de pacientes oncológicos con COVID-19, esta imagen demuestra que es una técnica con una buena sensibilidad para valorar la evolución y las posibles secuelas de la neumonía por COVID-192. No obstante, no se recomienda su uso rutinario ya que es un procedimiento con elevada radiación y tiempos de exploración prolongados, existiendo un posible riesgo de propagación en enfermedades infectocontagiosas3.