Objetivo: Describir el perfil de salud del paciente que acude al servicio de Medicina Nuclear a realizarse un PET.

Material y métodos: Estudio observacional para evaluar las características que definen a este tipo de pacientes.

Resultados: El paciente que acude al servicio de Medicina Nuclear para la realización de un estudio PET, en un porcentaje elevado se trata de un paciente oncológico que se realiza dicha prueba tanto para su diagnóstico (para inicio de tratamiento, cirugía...) como para el control de su proceso de enfermedad (cambio de tratamiento, continuidad de tratamiento, ser candidato para inclusión en un estudio, tratamiento paliativo y la detección de una probable recidiva). Es un paciente pluripatológico que requiere de un abordaje completo (físico, psíquico y social). Presentan habitualmente dolor, movilidad reducida, síntomas derivados de tratamiento quimioterápico, accesos venosos complicados... Suelen llegar al servicio con miedo a lo desconocido, incertidumbre y labilidad emocional por lo que es preciso apoyo por parte del personal de enfermería tanto al paciente como a la familia. En numerosas ocasiones, estos pacientes se ven desbordados por la situación y necesitamos ayudarles en su manejo, administrar analgesia, ponernos en contacto con otro servicio del hospital o incluso con otros hospitales. En definitiva, ofrecer el mayor confort posible a la hora de realizar la prueba.

Conclusiones: El paciente que se realiza un PET se encuentra en un momento difícil de afrontamiento y descubrimiento de su enfermedad, por lo que el papel del personal de enfermería es muy importante para mostrarles apoyo, disminuir su ansiedad, ayudarles en su proceso de enfermedad, y paliar posibles síntomas derivados de ella, en definitiva proporcionarles una atención integral e integrada.