Dr. Francisco Atero Carrasco
El pasado mes de octubre, después de una larga y penosa enfermedad soportada con dignidad y valentía, fallecía en Madrid el Dr. Francisco Atero Carrasco.
Fue pionero en la introducción de la especialidad de Reumatología en las estructuras hospitalarias del Ejército.
A principios de la década de los años setenta se realizaron gestiones con las que se pudo obtener un acuerdo entre la FJD y el Ministerio del Ejército para formar médicos militares especialistas en Reumatología dentro del programa MIR. Así, el Dr. Atero consiguió la primera plaza de residente en Reumatología subvencionada por el Ejército de Tierra.
Estuvo entre nosotros desde 1972 hasta 1976 y se acreditó como una persona inteligente y con una sólida formación médica.
Al obtener el título de Reumatólogo ocupó la Jefatura del Servicio de Reumatología que se creó en el Hospital Militar Gómez Ulla, que dirigió hasta su fallecimiento.
Por primera vez consiguió, entre otras muchas cosas, que el diagnóstico de una EA en un recluta conllevara la inmediata exclusión del Servicio Militar en las épocas en que éste era obligatorio. Hasta entonces, la juventud y el aspecto saludable de los soldados que la presentaban hacía muy difícil que se la considerara como una enfermedad potencialmente «muy grave» si no se controlaba y trataba desde el principio, para evitar invalideces que resultaban a la larga irrecuperables.
Descanse en paz este colega, hombre bueno, buen amigo y excelente especialista que creó escuela en los hospitales militares entonces existentes.