Hace 25 años que sigo estudiando las maravillosas funciones del punto Yongquan. Gracias a ello, he comprobado sus poderosos efectos, tanto en la recuperación de las funciones vitales2,3,8,17, como la protección encefálica7, considerando, según el Ling Shu, al Riñón como el "Maestro del Mar de las Médulas".
Respecto a la primer propiedad —enunciada en la revista Resuscitation17— es el primer trabajo en la historia que se publicó haciendo referencia a este fenómeno. Ya son 46 los asistidos por la "maniobra de resucitación sobre Yongquan"; registrándose solamente 9 decesos.
La citada estadística ha invertido el patrón de resultados obtenidos por los sistemas de rescate y servicios de emergencia del más alto nivel mundial, y su protocolización ha sido aceptada y próximamente publicada —como nota del Comité Editorial— en el World Journal of Critical Care Medicine.
En consideración al segundo ítem, he vivenciado situaciones —tanto en niños como en adultos— de recuperaciones neurológicas7, aun trascendido el tiempo lógico estipulado para lograrlas. No sólo pudieron restaurarse las funciones vitales sino que, además, se preservaron las encefálicas manteniendo indemne las capacidades cognitivas.
Los citados comentarios bastan para determinar la relevancia futura del punto, próximo a ser integrado a los diversos protocolos en uso para el soporte del apoyo vital.
Sin embargo —y a conciencia de no instaurar un disenso ante el ancestral y respetado conocimiento de la Medicina Tradicional China (MTC)— debo admitir algunas dudas respecto a la ubicación real del R-1.
Primeramente llama la atención la descripción del Ling Shu respecto al origen del meridiano del Riñón. En su capítulo 10, "Trayecto de los meridianos", enuncia: "El meridiano comienza por debajo del dedo pequeño y resurge por debajo de la región del Jenn Kou (según se denomina en el Ling Shu al punto 2R-Rangu). Así establece el pasaje cronobiológico entre el punto V-67 y el R-2, sin nombrar siquiera al R-1 Yongquan como punto inicial del canal ni receptor del legado bioenergético.
Ya desde mi temprana formación en la Sociedad Argentina de Acupuntura, me llamaba poderosamente la atención la presencia de 2 puntos de sedación simultáneos en un mismo canal. Aún no hallé justificación plena de un doble sistema sedativo en un meridiano cuyo órgano —a excepción de un síndrome combinado (la disarmonía Agua-Fuego)— casi no presenta patrones de plenitud.
Empero, el segundo punto del meridiano, "Rangu", es además representante del Fuego, punto antípoda del elemento Agua.
Si bien es cierto que los puntos Madera de los canales Yin ayudan a disipar el Calor patógeno del meridiano —si son activados en dispersión—, esta conflictiva interacción concluiría en una neutralización disociativa del equilibrio bioenergético, excluyendo la posibilidad que el R2-Rangu pueda asumir la citada función sedativa.
Llama la atención que tampoco el R-1 se ubique en algún dedo del pie4.
Como inexorablemente ocurre con todos los puntos Tsing o Jing-Pozo de los meridanos principales de acupuntura, inician o culminan el canal desde o hacia las puntas de los dedos de las manos o de los pies. La única excepción a la regla es, justamente, la del punto en cuestión, Yongquan. También puede recavarse —con las debidas reservas— alguna evidencia respecto a la nomenclatura del R-1 y puntos aledaños.
Si bien es difícil la traducción literal "Yongquan" según los lingüistas chinos, hay consenso general que el nombre significa "Manantial Burbujeante", haciendo quizás referencia a su ubicación como punto Ying-Manantial dentro del Ciclo Cheng de la Teoría de los Cinco Elementos. Esto último podría resultar confuso, ya que su interpretación sajona: "Bubbling Well" podría también entenderse como "Pozo Surgente", ratificando su condición de punto Tsing-Pozo , quitando así trascendencia a una cuestión literal. Respecto a puntos vecinos como V67 —Zhiyin ("Aquel que alcanza el Yin")1,4— y Vb 44-Zuqiaoyin ("Cavidad u Orificio Yin del Pie"), nos demuestran en sus significados una situación próxima a la recepción de la Energía Yin terrestre1,2.
Pero al ser puntos Tsing de los canales referidos, tampoco dejan lugar —ni en los 2 últimos dedos como tampoco en los 2 primeros del pie— para asentar el punto Pozo del Riñón. Si observamos detenidamente, a diferencia de la mano —donde los meridianos alcanzan los extremos digitales por sus caras dorsal y palmar—, en el pie, los 6 canales que llegan o salen por el dorso transportan el Qi desde y hacia sus órganos y vísceras, a excepción de la cara externa del 3.er dedo, donde no se refiere partida o arribo de ningún vaso (fig. 1). Además, la separación topográfica entre ambos puntos Tsing o Jing-Pozo del elemento Agua dificulta entender la continuidad del pasaje energético cronobiológico entre el V-67 —punto Tsing de la Vejiga en el 5.° dedo— y la planta del pie (distancia en general no menor a los 5-8 cm)3.
Fig. 1: Ubicación tradicional del R-1 vs. posible situación teórica del mismo.
En su página de internet, la Universidad de Bioenergética presenta la Teoría de los Arcos Energéticos. Aunque por razones que no parecen compatibles con la MTC, me pareció plausible el inicio del canal del Riñón en la región externa del 3.er dedo del pie; como antes vimos, una zona carente de meridianos allí cartografiados (recordar lo comentado respecto a los puntos Jing del pie y a la alineación topográfica del R-1 sobre el eje del espacio entre el 2.° y el 3.er metatarsianos).
Pero lo relevante de mi experiencia con las resucitaciones por el R-1, es que ubicado como el punto Madera de un canal de Agua asiste al crecimiento de su energía, y moderando desde allí el equilibrio entre Kan y Lii —Agua y Fuego—2, Yongquan es el "punto raíz" del nivel energético Shao Yin1,2,9,12, sustento académico que jerarquiza la actual vigencia de la MTC y, por tanto, motivo del éxito de la "Maniobra de Resucitación sobre Yongquan" para restaurar la vida.