Materiales y métodos: En este estudio se incluyeron 45 pacientes que necesitaban al menos una DPF para sustituir 1-3 dientes posteriores. Se cementaron 57 DPF de 3-5 unidades con estructuras de circonio con uno de dos cementos de resina (Variolink o Panavia TC). Se valoraron los siguientes parámetros en el momento inicial, a los 6 meses y 1-5 años después de la cementación en los dientes de estudio (soporte) y control (contralaterales): la profundidad de sondaje de la bolsa, el nivel de inserción de la sonda, el índice de placa, la hemorragia al sondaje y la vitalidad de los dientes. Se obtuvieron radiografías intraorales de las DPF. Los análisis estadísticos se realizaron mediante técnica descriptiva, análisis de la supervivencia con técnica de Kaplan-Meier y prueba de McNemar.
Resultados: Se valoraron un total de 27 pacientes con 33 DPF de circonio tras un período medio de observación de 53,4 ± 13 meses. Once pacientes con 17 DPF se perdieron durante el seguimiento. Tras la visita de control a los 3 años hubo que sustituir siete DPF en siete enfermos porque no eran aceptables a nivel clínico por complicaciones biológicas o técnicas. Tras 5 años de observación clínica hubo que sustituir un total de 12 DPF en 12 enfermos. Una DPF de 5 unidades se fracturó por un traumatismo a los 38 meses. La frecuencia de éxitos de las estructuras de circonio llegó al 97,8%, pero la supervivencia fue el 73,9% por otras complicaciones. Se produjeron caries secundarias en el 21,7% de las DPF y fractura de la cerámica de recubrimiento en el 15,2%. No se encontraron diferencias significativas entre los parámetros periodontales de los dientes de estudio y control.
Conclusiones: El circonio ofrece una estabilidad suficiente como material de estructura para las DPF posteriores con 3 y 4 unidades. Sin embargo, se debería mejorar el ajuste entre el soporte y la cerámica de recubrimiento.
Int J Prosthodont 2007;20:383-388.