Un gran momento de la medicina mexicana fue cuando el Dr. Eduardo Liceaga, en la inauguración del Hospital General de México (HGM), pronunció en su discurso del 5 de febrero de 1905: "Señores, para reivindicar nuestro puesto en el continente, no necesitamos más que aplicar toda nuestra inteligencia, toda nuestra voluntad a perfeccionarnos en el ramo que hemos elegido para ejercitar nuestra actividad. Este es el contingente que debemos a nuestra Patria. El país en donde cada hombre se empeña en perfeccionar la ciencia, el arte, la industria a que dedica su energía, ese país se hará grande, pues la suma de esas unidades activas forma parte de la Nación". Palabras sabias pronunciadas hace 107 años, día en que se inició la gran historia del HGM.
Cada historia en los diferentes Servicios está llena de grandes personajes, de grandes historias y vivencias de muchas personas, algunas de ellas poco mencionadas, pero que han formado parte de la vida de esta gran Institución. La historia ha sido incesante, se ha podido crear día con día y con el tiempo ha dado muchas páginas para escribir de este gran Hospital.
Hoy, el HGM ha entrado en una nueva etapa, en un nuevo ritmo, en una nueva velocidad, se crea una nueva Institución en la que el paradigma de la atención médica será otro, en donde se pueda atender de manera diferente y cálida a la gente.
El conocer esta historia es muy interesante. El Hospital convivió con todas las enfermedades infectocontagiosas, luego vivió el descenso de las mismas y la emergencias de las enfermedades crónico-degenerativas, que hoy están presentes entre nosotros. El Hospital se prepara para las próximas décadas.
Actualmente, en nuestro quehacer diario está el enlazarnos con la comunidad en donde podamos por medio de acciones de educación y promoción para la salud, permear e impactar en los cambios de hábitos y estilos de vida. Se gesta una nueva forma de enlazarnos con la gente.
Muchas son las nuevas actividades que el Hospital desarrolla, entre otras un canal de televisión vía página web, una estación de radio, una universidad de los pacientes, se provoca la investigación, se incrementa la capacitación y la educación, se trabaja con intervenciones en enfermería y de enlace con la comunidad, colaboramos en el combate de las enfermedades virales estacionales o pandémicas, con imaginación desarrollamos estrategias para el manejo de enfermedades crónico-degenerativas y desde el Hospital, poder entablar lazos con la comunidad y atraer a toda esa gente que no nos conoce. Somos la tercera Institución en el sector en artículos de investigación de alto impacto, además de que somos los mayores formadores de recursos humanos para la salud, y la Institución con mayor número de empleados y de camas.
Lograr que nuestra Institución pueda provocar una participación de la sociedad y la familia del paciente es un anhelo a alcanzar, de no lograrlo habremos perdido la gran oportunidad de enlazar y activar ese cuadrángulo virtuoso de la salud, en donde participan gobierno federal, instituciones, asociaciones, patronatos, voluntariados y fundaciones, así como el mismo paciente y su familia, logrando con esto esa participación social en búsqueda de la preservación o restablecimiento de la salud. Con esto podremos decir que si somos organizaciones socialmente responsables (OSR), con esta misma estrategia podremos incrementar programas de rehabilitación, educación para la salud, autoayuda, información, prevención y mejora en los estilos de vida. Las instituciones debemos de trabajar para que la gente nos vea como instituciones referentes, activas e innovadoras.
Recordando a un gran humanista mexicano el Maestro Ignacio Chávez mencionó, "El médico debe de conservar el interés, el mismo aliento generoso que lo ha sostenido en el pasado; el mismo espíritu de servicio sin el cual la profesión se convierte en una tarea, muy técnica si se quiere, pero deshumanizada. Esto no habrá de suceder, si los médicos de hoy, compenetrados con el riesgo, lo neutralizan con la elevación moral de su conducta". También dijo, "El haber escogido ser médico obliga tener lealtad a su vocación y a su compromiso. A ser médico de verdad, pequeño o grande, no un forzado de su profesión que cumpla con su tarea con desgano y con irresponsabilidad. Ser médico no entraña la obligación de ser sabio o figura eminente pero si un profesional limpio, laborioso y merecedor de la confianza de sus enfermos y del respeto general. Ser médico implica la obligación consigo mismo de no frustarse, de estudiar, de renovarse, de no caer en la mediocridad que lo empuja a la ineficacia; en todos términos procurar con ahínco su educación continua si ha de llevar con decoro la toga hipocrática. Si el médico ha de ser consejero, guía y figura respetada en el medio, está obligado a ensanchar la visión de su mundo y buscar la compresión de su tiempo, puliendo su cultura general". Palabras vigentes a más de 80 años de haber sido pronunciadas, para ser exactos el 16 de julio de 1927, en la inauguración del Servicio de Cardiología del Hospital General de México, sin duda actuales.
Terminó agradeciendo la oportunidad, y recordó las palabras de Ignacio Chávez, "La preocupación del hombre es el hombre mismo", así como:
"Medicina sin ciencia es un tan sólo un oficio y el médico que se queda en ella no pasa de ser un simple artesano. El médico como ser capaz de salvar una vida, siendo semejante a los dioses según el pensar de Hipócrates, debe reunirse con el médico que es guía, consejero, árbitro, amigo y quien atiende mas allá de los males somáticos, sus repercusiones espirituales, incluida la interpretación delirante que puede hacer el enfermo de su mal, de la amenaza de morir, del temor y de la esperanza misma" (I. Chávez, 1977).
Estas sabias palabras deben de ser nuestra luz para continuar conformando una gran institución, nuestra alma es nuestra gran fuerza, y que sea ella la que nos ligue al paciente, con el mayor compromiso y fidelidad, para poder crear el presente y el futuro de prestigio científico con gran cercanía con la sociedad.
A mi me ha quedado claro quienes me enseñaron y me continúan enseñando día con día, ellos, mis Maestros trabajan y me enseñan, están presentes y me enseñan y yo trabajo y aprendo, estoy presente y aprendo, así sigue siendo el método educativo, más que enseñar, ahora se requiere educar, aprender de lo bueno y de lo malo, construyendo y proponiendo, sabiendo bien a qué me comprometo y cómo debo dar resultados, no sólo los pienso sino los hago, de ahí la frases cortas que hemos ido construyendo:
Ver que se vea,
Hacer que se haga,
Oír que se oiga,
Sentir que se sienta
Educar que se eduque
Pensar que se piense,
Trasmitir que se trasmita
Proyectar que se proyecte
Frases cortas que traducen planteamientos concretos con acciones concretas que se adaptan al proceso administrativo moderno y dan seguimiento a las mismas pero también hablan de estrategias concretas de lo que podemos hacer, el equipo de salud así lo exige, el propio país también lo exige. Nuestro liderazgo es responsabilidad, no es privilegio ni pedestal, hoy debemos de hacer el gran compromiso de emprender acciones muy concretas de trabajo, además de encender esa gran capacidad que tenemos, junto con la sociedad y el propio apoyo del Gobierno Federal, para continuar construyendo fortalezas y superar nuestras debilidades. La nación y la sociedad así nos lo exige, así lo está necesitando.
México vive tiempos de aprendizaje y de consolidación en donde es el momento, que pudiendo fraguarlo, podremos asegurar un futuro mejor. Las instituciones no estamos ajenas a esto, debemos superar los prejuicios que nos han atado a no superar los rezagos. Hagamos hoy ese gran proyecto con grandes preceptos:
Compromiso, entereza, constancia, resultados, cercanía, hechos, no discursos, fortaleza cívica, amor al país, recuerdo del pasado, construcción de futuro y compromiso con el presente, ese es el legado que nos han dejado.
Hago público un reconocimiento a los trabajadores que nos han acompañado a lo largo de estos 107 años, son para nosotros un gran ejemplo.
Me despido diciendo que: "Nuestro espíritu es más grande que nuestro corazón, y el corazón no nos cabe en el pecho". Recordemos siempre que el HGM es el General de los Hospitales.
Correo electrónico:f.navarro@salud.gob.mx