La homeopatía es una doctrina médica que tuvo su época dorada en la Barcelona del siglo xix. Introducida en el siglo pasado por Fèlix Janer i Bertran en Cataluña, fue seguida por muchos médicos convencidos de la bondad de los tratamientos aplicados. Algunos facultativos tuvieron una actividad docente destacada, tanto mediante la publicación de artículos en diversas revistas homeopáticas como en la organización de instituciones que reunían a los practicantes de esta especialidad, como es el caso de la Academia Homeopática de Barcelona creada hace 125 años. En este artículo se revisan los aspectos biográficos más destacados de los homeópatas de mayor prestigio de Cataluña que han sido incorporados en la Galería de Médicos Catalanes: Joaquim Hysern i Molleras, Joan Sanllehy i Metges, Salvi Almató i Ribera, Claudi Tricaz i Arnillas, Joan Solé i Pla, Enric Peiró i Rando, Modest Furest i Roca y Miquel Ramis i Matas.
Homeopathy is a medical doctrine that had its heyday in the Barcelona of the 19th century. Introduced in the last century by Fèlix Janer i Bertran in Catalonia, it was followed by many doctors convinced of the goodness of the treatments. Some practitioners had outstanding teaching activities, both by publishing articles in various homeopathic journals and in the organization of institutions where the practitioners of this specialty met, as is the case of the Homeopathic Academy of Barcelona created 125 years ago. In this article, a review is presented on the most important biographical aspects of the most prestigious homeopaths in Catalonia that have been incorporated in the Gallery of Catalan Doctors, such as Joaquim Hysern i Molleras, Joan Sanllehy i Metges, Salvi Almató i Ribera, Claudi Tricaz i Arnillas, Joan Solé i Pla, Enric Peiró i Rando, Modest Furest i Roca, and Miquel Ramis i Matas.
La Galería de Médicos Catalanes (Galeria de Metges Catalans) es un escaparate que ofrece a aquellas personas interesadas en conocer la historia de la Medicina de nuestro país biografías breves de médicos que han destacado profesionalmente a lo largo de la historia. La vida de los médicos más conocidos de nuestro pasado puede ser un tema de interés tanto para los médicos actuales como para los estudiosos de la historia y las personas curiosas que quieren saber qué razones se han tenido para dedicar tantas calles y plazas de la mayoría de ciudades y pueblos de Cataluña a médicos del pasado más lejano y a otros que han contribuido a escribir nuestra historia médica más reciente. Algunos facultativos que se ha incluido en la galería han destacado por razones no estrictamente médicas, como por ser destacados protagonistas políticos o por su obra artística, cultural o social.
Esta galería es una página web del Colegio de Médicos de Barcelona que se inauguró en abril de 2012. Actualmente cuenta con 350 biografías de médicos de las 4 provincias catalanas y de cualquier época histórica aunque, lógicamente, predominan los médicos de los siglos xix y xx. Se trata de la historia más reciente y, en estos casos, la biografía breve se convierte en una primera referencia para dar a conocer a un médico contemporáneo. Cada biografía se acompaña de un pequeño álbum fotográfico con un índice de citas bibliográficas que ofrece a los lectores, si así lo desean, la posibilidad de ampliar la información aportada. También se relaciona la obra propia del personaje, los vínculos de referencia y una hemeroteca con enlace directo a la información original en la que es posible comprobar los datos aportados.
La selección de los médicos que hay que incluir en la Galería plantea numerosas dificultades, especialmente en el caso de los más antiguos cuando no se dispone de suficiente documentación para elaborar una biografía mínimamente documentada. Para redactar una biografía, a menudo es necesario basarse en los artículos publicados en las revistas de historia (principalmente la revista Gimbernat, que edita la Reial Acadèmia de Medicina de Catalunya).
Realmente, la Galería de Médicos Catalanes tiene una voluntad más divulgadora que de investigación histórica. Interesa difundir el conocimiento de los médicos catalanes más destacados, más que diseccionar a los personajes. El interés reside en que no se pierda el recuerdo de las personas que han servido a la profesión médica y a su país, Cataluña, y se pretende hacerlo de una forma entretenida. Se espera que los visitantes interesados por una persona en concreto puedan ampliar la información que contiene la web consultando las referencias bibliográficas que se incluyen en cada biografía.
De los 350 médicos y médicas que tienen dedicado un espacio biográfico en la galería en el momento actual, 9 son médicos homeópatas. Todos ellos fueron profesionales de prestigio: un prestigio expresado por el reconocimiento que les tuvieron sus coetáneos y, especialmente, por la numerosa y distinguida clientela que tuvieron. Algunos ejercieron la homeopatía de forma exclusiva —como el Dr. Joan Sanllehy i Metges (1821-1900), el Dr. Salvi Almató i Ribera (1827-1889), el Dr. Joan Solé i Pla (1874–1950) o el Dr. Enric Peiró i Rando (1899-1985)—, mientras otros hicieron compatible el ejercicio de la medicina alopática y la homeopática —como el Dr. Miquel Ramis i Matas (1896-1975), que fue un médico generalista a la vez que homeópata; el Dr. Joaquim Hysern i Molleras (1804-1883), que fue cirujano y homeópata; el Dr. Claudi Tricaz i Arnillas (1879-1952), que también fue radiólogo, o el Dr. Modest Furest i Roca (1852-1939), que adquirió gran prestigio como especialista en hidroterapia.
En una época en la que la comunicación no era fácil (prácticamente se limitaba a la transmisión oral), la doctrina de Samuel Hahnemann —surgida en Alemania durante la segunda mitad del siglo xix— tardó un tiempo en llegar a la Península Ibérica. Uno de los primeros médicos que practicó la homeopatía en Cataluña fue Fèlix Janer i Bertran1 (1779-1865) (fig. 1). Nacido en Vilafranca del Penedés, llegó a ser catedrático de Materia Médica; inicialmente, en la Universidad de Cervera. Más tarde, en la Escuela de Medicina de Barcelona y, finalmente, en la Universidad de Madrid.
El Dr. Janer era un médico alópata que escribió numerosos tratados de medicina y se convirtió en una referencia médica europea. Tenía una gran capacidad para compaginar la práctica médica, la docencia y la actividad política y llegó a ser Consejero de Instrucción Pública. Siendo catedrático de Clínica Médica en Madrid, conoció como paciente al médico José Núñez y Pernia, quién lo convenció de las bondades de la homeopatía. El Dr. Janer intentó, sin éxito, que la homeopatía se incluyera entre las materias docentes que se impartían en las escuelas de medicina. Puede considerarse que Fèlix Janer i Bertran fue el introductor de la homeopatía en Cataluña, aunque solo la practicara en su ejercicio médico privado y nunca ejerciera la docencia de esta nueva orientación médica.
Joaquim Hysern i Molleras (Banyoles) fue otro personaje con grandes capacidades2. En el año 1928 fue nombrado profesor adjunto del Real Colegio de Cirugía de Barcelona y en 1830 obtuvo la cátedra de Anatomía. Unos años después, cuando obtuvo el nombramiento de catedrático del Real Colegio de Cirugía de Madrid, marchó a Madrid. Allí introdujo un notable cambio en la docencia; abandonó las lecciones magistrales e inició la enseñanza práctica, en la que llegó a incluir prácticas de vivisección con sus alumnos.
Joaquim Hysern i Molleras era una cirujano notable (especialmente de la cara y el cuello) y también era especialista en urología (fig. 2). En 1839, se trasladó a París como médico de cámara del Infante Francesc de Paula y su familia. En Francia, recibió la autorización para operar con el famoso cirujano Velpeau y descubrió la homeopatía, a la que —de vuelta a Madrid— dedicaría gran parte de su actividad. A pesar de que sus compañeros de claustro le manifestaran su desconfianza respecto a la nueva disciplina, el Dr. Hysern, en lugar de rendirse, fundó en 1849 el Instituto Homeopático de Madrid y en 1851 la Academia Homeopática de Barcelona. En mayo de 1896 fundó la revista El Propagador Homeopático y en 1860 publicó su libro Dogmas de la Homeopatía.
El primer homeópata a jornada completa de Cataluña fue Joan Sanllehy i Metges (fig. 3), que abandonó su vocación inicial de cirujano para dedicarse plenamente a la práctica de la medicina homeopática coincidiendo con una epidemia de cólera que asolaba Barcelona en el año 1854. El Dr. Sanllehy, que tuvo una intervención médica muy notable, trató a centenares de enfermos con medicamentos homeopáticos.
Joan Sanllehy i Metges recibió la vocación homeopática de Fèlix Janer, quién lo convenció hasta tal punto que renunció a tota actividad médica que no requiriera una orientación homeopática. El Dr. Sanllehy introdujo las doctrinas de Hahnemann en Cataluña a través de la Revista de la Doctrina Homeopàtica, publicación que aparecío con anterioridad a la creación de la Academia Médico Homeopática de Barcelona en el año 1890 y de la que Sanllehy fue elegido presidente. Ese mismo año, fundó la nueva Revista de Homeopatia.
El hijo de Joan Sanllehy i Metges —Domènec Joan Sanllehy i Alrich— se casó con la hija del banquero Manuel Girona y fue alcalde Barcelona desde 1906 hasta 1908.
Salvi Almató i Ribera es otro de los grandes homeópatas que ha dado Cataluña3 (fig. 4). Como el Dr. Sanllehy, ejerció la Homeopatía en exclusiva y también tuvo familiares bien conocidos. Un hermano suyo —Pere (1830-1861)— fue dominico, mártir en Vietnam y canonizado como San Pere Almató en 1988. En sus primeros años profesionales, el Dr. Almató tuvo una vida itinerante. Había nacido en Olesa de Montserrat y recién acabada la carrera de Medicina fue médico de Vic, después de Manresa y, finalmente, de Arenys de Munt; donde descubrió la homeopatía al conocer al médico homeópata de Mataró, Nicolau Guañabens, quién curó a su hija enferma de difteria.
El Dr. Almató aprendió Homeopatía, la practicó y la difundió a través de revistas como Archivos de la Medicina Homeopática y El Consultor Homeopático. Efectuó numerosas traducciones, mayoritariamente inglesas, y escribió 2 libros: uno sobre la profilaxis y el tratamiento del cólera y otro sobre medicamentos homeopáticos.
Por su dedicación al tratamiento homeopático de enfermos infectados en la epidemia de cólera que hubo en Barcelona en 1865 y en la de la fiebre amarilla de 1870, Salvi Almató i Ribera fue distinguido con la Medalla de Plata del Ayuntamiento de Barcelona.
Entre los homeópatas del siglo xx se ha incluido en la Galería de Médicos Catalanes a Enric Peiró i Rando (fig. 5), hijo de otro médico homeópata, que tuvo una intensa vida al servicio de sus pacientes y de la doctrina homeopática. Solo acabar la carrera de Medicina, Enric Peiró i Rando entró en el Hospital del Niño Dios de Barcelona (fig. 6) e inició una prolífica carrera de publicista médico con numerosos artículos de homeopatía a la vez que intervino en las distintas actividades sociales de la profesión y ocupó distintos cargos: fue vicepresidente de la Liga Médica Homeopática Internacional, se hizo cargo de la organización del Congreso Español de Medicina Homeopática de 1963 y se encargó del discurso inaugural del Congreso Mundial de Homeopatía celebrado en Bruselas en 1972. Tenaz y con intensa actividad, el Dr. Peiró reorganizó la especialidad y gozó del reconocimiento universal entre los médicos homeópatas españoles por sus valiosos servicios. Muy preocupado por la docencia, también, tuvo una notable producción editorial.
Otro homeópata destacado fue Joan Solé i Pla (fig. 7), muy interesado por la política y el catalanismo4. Militó en el republicanismo federal y fue miembro del Centro Escolar Catalanista, adherido a Unión Catalanista (UC) dónde ingresó convencido por Domènec Martí i Julià. Fue presidente de UC en el bienio de 1900-1901. Asimismo, fue impulsor, director y redactor de la revista Universitat Catalana (1900-1902). Entre 1903 y 1904 fue vicepresidente de la Institución Catalana de Historia Natural, futura filial del Instituto de Estudios Catalanes. En 1904 fue también miembro fundador del Patronato Catalán contra la Tuberculosis.
Ese mismo año —interesado por la medicina homeopática— fue uno de los fundadores del Instituto de Homeopatía de Barcelona, secretario de su sección científica y activo conferenciante de la entidad, además de colaborador habitual de la Revista Homeopàtica Catalana.
El Dr. Solé dedicó grandes esfuerzos a la promoción y apoyo de los voluntarios catalanes enrolados con el ejército francés de la Primera Guerra Mundial. También colaboró a la difusión de su actuación a través de la revista Iberia, en la que el médico catalán tenía una sección fija con el título de “Els catalans a la guerra”. Fue el verdadero impulsor y presidente del Comité de Hermandad con los Voluntarios Catalanes que se creó en febrero de 1916. Desde esta asociación, promovió la creación de centros en París y Perpiñán, recaudó fondos de apoyo a los voluntarios y visitó las zonas de guerra. El gobierno francés distinguió a Joan Solé i Pla con la Cruz de Caballero de la Legión de Honor5.
En 1936 colaboró en la elaboración del Diccionari de Medicina dirigido por Manuel Corachán. Cuando empezó la Guerra Civil —juntamente con Ventura Gassol y al frente de un grupo de mozos de escuadra y de milicianos d’Estat Català— el Dr. Solé participó en la salvaguarda del Monasterio de Montserrat. Fue uno de los protectores del cardenal Vidal i Barraquer cuando, mientras se encontraba en el Monasterio de Poblet, un grupo de revolucionarios lo llevaron preso a Montblanc. Asimismo, fue miembro del Comité Nacional de Socorro Rojo Internacional de Cataluña y se responsabilizó de la organización sanitaria y asistencial de ayuda a los damnificados de la guerra en la zona republicana. También fue delegado del gobierno de la Generalitat en la Asociación Protectora de la Enseñanza Catalana.
Acabada la Guerra se exilió con su familia a la ciudad colombiana de Barranquilla, dónde ejerció la medicina al tiempo que estudia botánica. Poco después accedió a la cátedra de Botánica de la Escuela de Farmacia de la Universidad Atlántica de Barranquilla y también fue nombrado director del Museo Botánico de la misma ciudad. El Dr. Solé reunió una notable colección botánica que, posteriormente, sus hijas cedieron al Instituto Botánico de Barcelona.
Entre los facultativos que combinaron la práctica de la homeopatía con alguna otra disciplina médica, se incluye Modest Furest i Roca (fig. 8), más conocido por la explotación del manantial de aguas termales de Caldes de Malavella: el Vichy Catalán. De joven, el Dr. Furest conoció a Joan Sanllehy i Metges y a Francesc Xavier de Benavent i de Camón6 (otro destacado homeópata de Lleida) que lo introdujeron en esta disciplina. Consolidó su conocimiento en el Instituto Homeopático de la Sociedad Hanhnemanniana Matritense, donde se interesó, además, por la hidroterapia y por las nuevas ideas higienistas.
El Dr. Furest se trasladó a Girona para ejercer de médico de cabecera. Descubrió Caldes de Malavella y sus manantiales durante uno de sus viajes por la provincia para visitar a sus enfermos. En la ciudad de Girona tuvo dificultades para ejercer la homeopatía porque sus colegas alopáticos y el propio gobernador de Girona le hicieron saber que la práctica homeopática no estaba legalizada.
Claudi Tricaz i Arnillas (fig. 9) fue otro homeópata reusense que fabricaba él mismo los medicamentos que prescribía y, por ello, era conocido como “el metge pastilletes”, pseudónimo que significa “el médico pastillitas”7. Además de homeópata era radiólogo, el primero en ejercer en Reus la especialidad, y estaba fascinado con el reciente descubrimiento de Roentgen. El Dr. Tricaz sufría una cojera como secuela de una poliomielitis y se caracterizaba por ser un notable polemista que defendía con mucha energía sus convicciones. Expresaba especialmente su convencimiento sobre la bondad de la homeopatía frente a sus detractores, que eran muy numerosos en aquellos tiempos.
Finalmente, Miquel Ramis i Matas (fig. 10) fue otro de los homeópatas que también ejercía de médico de cabecera y además estaba muy interesado por la higiene y la práctica deportiva, convencido que era muy útil para conservar la salud. Trabajo como jefe del Hospital Homeópata del Niño Dios. El Dr. Ramis no llegó a publicar ningún artículo y, sin embargo, fue secretario de redacción de la Revista de Homeopatía Práctica: órgano oficial de la Academia Médico Homeopática de Barcelona. Tuvo una vida profesional muy activa y recibió el reconocimiento de sus coetáneos: en gran parte por sus conocimientos médicos, pero también por la bondad de su carácter.
Todavía quedan algunos homeópatas notables por incluir en la Galería de Médicos Catalanes. La homeopatía ha sido una práctica médica utilizada por muchos de los médicos de nuestro país8. En Cataluña se ha creado una potente escuela de médicos homeópatas y buena parte de ellos ha obtenido un notable prestigio profesional9. La Galería de Médicos Catalanes se ha fijado el objetivo de luchar contra el olvido a la vez que pretende dar testimonio de respecto y agradecimiento a los predecesores de la profesión. Personajes como Francesc Xavier de Benavent i de Camón6, Nicolau Guañabens10, Gaietà Cruxent11 y Josep Antoni Grífols son otros médicos homeópatas destacados que bien pronto tendrán su espacio biográfico en ella.
A la Sra. Mercè Viger por su colaboración en la búsqueda de información biográfica y en la confección de la página web Galería de Médicos Catalanes (www.galeriametges.cat.).