En la universidad contemporánea se requiere de individuos con una vasta formación humanista. La apreciación literaria puede ser una herramienta imprescindible para la aprehensión y transformación de su realidad. En el artículo se muestra como objetivo valorar la apreciación literaria como una innovación educativa para la formación humanista del estudiante de medicina.
In the contemporary university it is required of individuals with a vast humanist formation. The literary appreciation can be an indispensable tool for the apprehension and transformation of its reality. In the article it is shown as objective to value the literary appreciation as an educational innovation for the students of Medicine humanist formation.
Enfrentar los retos del nuevo milenio se determina por la importancia de educar al hombre en correspondencia con los valores y la ideología que sustentan la sociedad, no solo en la que vive, sino en la que necesita construir para vivir. En este proceso, un papel fundamental lo desempeña la innovación educativa.
La palabra proviene del latín innovare y se define como la capacidad de introducir novedades en un campo determinado del conocimiento humano que genere un beneficio social, supone la acción sistemática e intencionada de introducir novedad o cambio en lo que se hace y para lo que se hace. Pino et al.1 refieren que la suma de conocimientos y creatividad dará una innovación siempre y cuando esta solucione un problema social.
Por su parte Nuñez2 indica que la innovación implica un cambio, mejora, es entendida como creación o modificación no solo de productos sino de procesos, constituye más que tecnología, aunque esta última puede ser un medio o soporte para la innovación. Se habla incluso de innovación social que vincula los cambios tecnológicos con los sociales y los de las instituciones, y del Sistema Nacional de Innovación: «[…] red de instituciones, sujetos, procesos, que contribuyen al proceso de innovación: empresas, ministerios, educación, centros de investigación, universidades…»
En el ámbito pedagógico, la innovación educativa está encaminada a dar solución a problemas de la práctica educativa y al perfeccionamiento del proceso formativo. Implica selección, ordenación y empleo de recursos humanos y materiales. En los estudios a nivel internacional sobre la innovación educativa se enfatiza en el uso de las nuevas tecnologías de la información (Domingo3: TIC, Internet, innovación y cambio educativo: estudio de casos). También la literatura en relación con la innovación es tratada por Regueiro4 en su artículo Innovación y creatividad: enseñar literatura en el siglo xxi.
Es imprescindible una cultura de innovación atemperada a las condiciones propias, dirigida a preservar los valores. Corresponden también al arte y a la literatura consolidar los valores autóctonos, la defensa de la identidad. El premio Nobel de la paz Adolfo Esquivel expresó: –refiriéndose a las universidades latinoamericanas– «Una de las cosas que critico es que en nuestra universidades se utilizan muchos textos europeos. ¿Cuándo comenzaremos a estudiar a los pensadores latinoamericanos? […] ¿Qué se sabe de los poetas, de los artistas de nuestro continente, si en nuestras universidades prácticamente no se conocen?» expresa en artículo periodístico González5.
En Cuba se han implementado como antídotos estrategias para elevar la cultura general integral de la población: los cursos de universidad para todos, la feria internacional del libro, la universalización de la educación superior, la ampliación del joven club de computación a varias comunidades entre otros. La educación integral a la que se aspira no puede verse separada de la sensibilidad artística ni de los avances de la ciencia.
En el espacio de las ciencias médicas se consideran los aportes de Álvarez-Díaz6: Importancia de la literatura dentro de las humanidades médicas» y de Benedetto et al.7: La literatura como recurso didáctico en la formación humanista de los estudiantes de Medicina.
En las carreras de medicina se privilegia la formación en las ciencias biomédicas y clínicas, pero es necesario estimular las potencialidades cognoscitivas de los discípulos. Se requiere una sólida preparación no solo en las ciencias biomédicas sino también de las disciplinas humanísticas.
«Hay […] contradicciones entre el objeto de la medicina en Cuba, los objetivos generales en la formación del médico general básico, el perfil del egresado, el campo de acción del médico una vez graduado y la formación que reciben los estudiantes de medicina. Estas contradicciones existentes entre el problema y el objetivo, entre la necesidad de formar a un médico cualitativamente superior con conocimientos de su cultura e identidad para lograr la socialización de la salud desde lo autóctono y los conocimientos que aporta la pedagogía social se han de resolver con la propia concepción humanista del proceso formativo, con una actuación de manera filosófica, científica, sistémica, de participación, lo cual favorecerá el desarrollo de los estudiantes y requerirá de los esfuerzos cooperadores de los docentes y de la mejora de los planes de estudio», consideran Hernández et al.8 y Hernández9, y Toro10 en el trabajo Consideraciones acerca de las cualidades del buen médico y del profesionalismo en Medicina.
En las nuevas orientaciones metodológicas para los estudiantes de las ciencias médicas se introdujo la vinculación de los contenidos con la medicina natural y tradicional y el empleo de las nuevas tecnologías de la información, en correspondencia con las exigencias de la contemporaneidad.
Los estudiantes de los diferentes niveles de enseñanza leen muy poca literatura y se expresan y escriben con grandes dificultades. El reglamento para el trabajo docente metodológico en la educación superior norma aspectos que contribuyen a materializar el carácter instrumental de la lengua materna, pues del adecuado empleo del idioma depende incluso la calidad del aprendizaje de las disciplinas (MES11).
Para constatar el estado actual de la formación sociohumanista de los estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey se aplicó una encuesta a directivos y profesores del centro, se realizó el análisis documental y se tuvo en cuenta los resultados del diagnóstico cultural y sociopolítico que se aplicó a los estudiantes del primer año que ingresaron a la Universidad. A partir de la técnica de triangulación se analizaron los diferentes instrumentos y se obtuvieron las deficiencias que dieron lugar a la investigación.
La encuesta a directivos y profesores del centro tuvo como objetivo: valorar la efectividad de las vías que se emplean en la Universidad para lograr la formación sociohumanista de los estudiantes de las ciencias médicas. El 60% de los encuestados identificaron como importante la realización de actividades políticas, artísticas y culturales para la formación integral del estudiante y el 100% reconoció que la implementación de un sistema de talleres de apreciación literaria con tratamiento axiológico coadyuvaría a la formación sociohumanista de los estudiantes. Asimismo sugirieron temáticas para vincular la literatura con otras manifestaciones artísticas, temas que recojan leyendas de Camagüey, textos representativos a nivel nacional e internacional, el aporte cubano a la literatura mundial, el artículo científico y el estilo literario, profesionales de la salud y la producción literaria, la apreciación literaria y el proceso de transformación de la literatura en sí en literatura para mí.
El 30% refirió que existen insuficiencias en la formación sociohumanista de los estudiantes, así como documentos normativos que se refieran a dicha formación, que no se potencian vías para la misma a través de las diferentes asignaturas, ni desde el espacio de reflexión y debate. Es insuficiente el sistema de acciones que se diseña por las brigadas dirigidas a la formación sociohumanista de los estudiantes. El tratamiento de temáticas relacionadas con figuras de la medicina no se potencia, ni son del todo efectivas las relaciones interdisciplinarias para garantizar la sistematización de la formación sociohumanista a la que aspira el paradigma médico-social.
En el diagnóstico cultural y sociopolítico12 que se aplicó a los estudiantes del primer año que ingresaron a la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey se detectaron dificultades con la lengua materna, desconocimiento de la cultura cubana y de la provincia y poco hábito de lectura, lo cual conspira contra esa formación integral que se pretende del futuro egresado. Asimismo el Ministerio de Salud Pública13 en su Política Nacional de Investigación e Innovación para la Salud establece las ciencias sociales y humanísticas entre las prioridades del quinquenio para todo el territorio nacional y sectores.
En tal sentido se advierte una dicotomía entre la aspiración y el estado real de la formación sociohumanista de los educandos de las ciencias médicas. Por lo antes expuesto se asume como objetivo: valorar cómo la apreciación literaria es una innovación educativa que favorece la formación humanista del estudiante de medicina.
DesarrolloEn el ámbito educativo existen diferentes clasificaciones de la innovación. Al decir de Salinas14: «para responder a los desafíos actuales las instituciones educativas deben promover experiencias innovadoras». Hay innovación de programas y planes de estudio: en el proceso educativo (proceso de aprendizaje, proceso de enseñanza, formación docente y recursos y materiales de aprendizaje); en el uso de tecnologías de la información y la comunicación u otras modalidades alternativas para el aprendizaje: currículo flexible y con materias optativas, diversificación de ambientes de aprendizajes, docencia optativa como apoyo al aprendizaje, entre otras.
En Cuba no solo hay conciencia del enorme desafío científico y tecnológico que enfrenta el mundo subdesarrollado sino que se vienen promoviendo estrategias en los campos de la economía, la educación y la política científica y tecnológica que intentan ofrecer respuestas efectivas a ese desafío. Todo eso lo expresa Núñez2: Necesita de marcos conceptuales renovados dentro de los cuales los enfoques CTS pueden ser de utilidad.
Si bien la innovación educativa está encaminada a dar solución a problemas de la práctica educativa y al perfeccionamiento del proceso formativo, los diferentes actores educativos han de asumir los cambios propuestos.
La Comisión Nacional de Carrera en su propuesta de Modelo del profesional de Medicina15 se refiere a 3 perfiles: ético humanista, profesional y ocupacional. El ético humanista comprende los valores, conducta y actitud del profesional a egresar.
La literatura no es solo el arte de la palabra, plantea Mañalich16, que «[…] es también un objeto de la cultura y su enseñanza aporta, como materia humanística, la extraordinaria posibilidad de formar valores patrióticos, ciudadanos, éticos en la personalidad».
La apreciación literaria está directamente relacionada con la motivación hacia la lectura; posibilita un desarrollo cognoscitivo, educativo y valorativo, se favorece también la capacidad de expresión, se desarrolla la sensibilidad y el gusto literario. Las obras que se ofrecen deben ser atractivas y vinculadas a su profesión.
Montaño17 refiere que existe una estrecha relación entre lectura, literatura y salud. La lectura literaria: «[…] favorece la escucha atenta –que es también una actividad saludable –porque reduce el ritmo cardíaco y disminuye la presión arterial». Desde la antigüedad, Platón planteaba que los textos eran portadores de espíritu o animus que al mezclarse con la sustancia espiritual del que los leía se transformaban, conformaban, deformaban.
El propio autor argumenta cómo en la Edad Media se utilizaban las lecturas como un tratamiento terapéutico, por ejemplo con las lecturas del Corán a los enfermos del hospital Al Mansur. En el siglo xix en EE. UU. Benjamín Rush recetaba libros como un tratamiento adicional terapéutico. En época del nazismo, la lectura en los campos de concentración se convirtió en un acto de resistencia a la vez que confortaba a los prisioneros y les imprimía un sentido diferente a sus vidas. Ya en 1966 la Asociación Americana de Medicina acepta el término biblioterapia y el uso de materiales de lectura como auxiliares terapéuticos en la medicina y la psiquiatría.
Se entiende la apreciación literaria como una relación activa, flexible y dialógica del estudiante con la obra-autor, en la que tendrá en cuenta los datos biográficos del autor, así como la corriente ideoestética a la que pertenece y el contexto histórico en el que se desarrolla la obra. Es una relación activa pues el educando no solo percibe el texto sino que lo reconstruye a partir de su propio sistema de valores estéticos, morales y experiencia vivencial en un diálogo consigo mismo y los otros condiscípulos.
El Consejo Nacional de Casas de Cultura18 dispone que son consideradas actividades de apreciación literaria las conferencias, charlas, conversatorios, coloquios, encuentros, seminarios y círculos de lectura; aunque, en cierta medida, también son acciones de apreciación los recitales, lecturas, peñas, tertulias, videos, etc., es necesario subrayar la importancia de la utilización de los medios audiovisuales y, en especial, de los cursos de Universidad para todos* referidos a temas literarios.
En la actual investigación se considera la apreciación literaria como una herramienta importante para la labor formativa: aumenta la cultura general, propicia un hábito de lectura, contribuye a la sensibilidad de los educandos, todo lo cual es factible de aplicar, según los resultados del diagnóstico. Posee un enfoque humanista: espacio donde se propicia el análisis y debate de un texto literario sobre personalidades ligadas al humanismo y a la profesión médica, donde se construye el conocimiento con la participación activa de los estudiantes. Su objetivo está dirigido a favorecer la formación humanista de los estudiantes de medicina.
Mañalich16 R. (1999:136) refiere que el contenido en el análisis literario es la obra artística, el texto cumple una función estética. Este análisis literario se enriquece con el aporte de ciencias afines como la psicología, la filosofía y la lingüística, y aunque la función predominante del texto es la estética se incluye también la función social, gnoseológica, expresiva y axiológica.
Las autoras de este artículo definen el taller de apreciación literaria con un enfoque humanista como: el espacio donde se propicia el análisis y debate de un texto literario sobre personalidades ligadas al humanismo y a la profesión médica, donde se construye el conocimiento con la participación activa de los estudiantes.
Su objetivo está dirigido a favorecer la formación sociohumanista de los estudiantes de medicina.
El mismo tiene las características siguientes:
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Se aprende aportando criterios valorativos que permiten el desarrollo del gusto estético.
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Se desarrollan capacidades y potencialidades de los participantes.
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Despliegan actividades prácticas, así como cuestiones teóricas y metodológicas, es decir, el desarrollo de habilidades intelectuales y prácticas.
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Desarrollan la creatividad.
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Garantizan el aprendizaje reflexivo.
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Se propicia el hábito de lectura.
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Se emplean técnicas participativas.
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Se trabaja con el diccionario; obras literarias.
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Son empleados medios audiovisuales. (se proyectan filmes que tienen como base una obra literaria).
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Tienen un enfoque interdisciplinario al establecerse la relación con contenidos de filosofía y sociedad, literatura e historia de la medicina.
Se propone la implementación de los talleres de apreciación literaria en los turnos de reflexión y debate porque es el escenario que propicia continuar el trabajo con las dificultades detectadas en el diagnóstico y es además, al decir de Socarrás19 «[…] un espacio que ocupa un lugar central en el trabajo educativo».
El sistema de talleres de apreciación literaria con tratamiento axiológico es considerado por las autoras como una innovación educativa, en tanto se elaboran definiciones, se diseñan funciones de los talleres bien intencionadas para desarrollar la creatividad, los valores estéticos, el fortalecimiento de la sensibilidad humana en las relaciones interpersonales que establecerán los estudiantes con los diferentes agentes socializadores y en su vínculo con la comunidad extrauniversitaria. Es un cambio que genera un beneficio social, la preparación del estudiante en cuanto a la formación de conocimientos, sentimientos, valores, convicciones, habilidades, desarrollo de un estilo de pensamiento y actuación, lo que se traduce en formación humanista y contribuye a solucionar problemas de la práctica educativa y al perfeccionamiento del proceso formativo de la universidad.
Cuando Morin y Seurat20 definen innovación como «el arte de aplicar, en condiciones nuevas, en un contexto concreto y con un objetivo preciso, las ciencias, las técnicas, etc.», están considerando que la innovación no es solamente el fruto de la investigación, sino también el de la asimilación por parte de las organizaciones de una tecnología desarrollada, dominada y aplicada eventualmente a otros campos de actividad, pero cuya puesta en práctica en su contexto organizativo, cultural, técnico o comercial constituye una novedad. Además es un proceso planeado, sistematizado e intencional y responde a una de las misiones de la Ciencia y Tecnología en Cuba en lo concerniente a educar a las nuevas generaciones en concepción científica del mundo y en los valores genuinos de la sociedad.
La creación está vinculada al sentimiento y a la expresión artística. Y es que como argumenta Córdova21 «En todas las manifestaciones artísticas está encerrado el largo camino histórico de la humanización de nuestra especie», afirmación coincidente con la de Baujín22, en el artículo de la Revista de la Universidad de La Habana: «Sin cultura humanista potente no hay plenitud del hombre en el reino de este mundo».
La formación médica en Cuba establece exigencias morales propias con un profundo carácter humanista, como afirman Torres et al.23. El aprendizaje es un problema social, es preciso un aprendizaje desarrollador, por lo tanto la investigación se sustenta en el enfoque sociocultural de Vigostky, que concibe el desarrollo de la personalidad en la actividad y la comunicación en determinado contexto sociocultural; se concibe al alumno en su integralidad, donde la cultura coadyuva a la formación armónica, al autodesarrollo del individuo.
En la teoría de Vigostky se explican las grandes posibilidades del hombre de poder educarse, es decir una teoría del desarrollo psíquico en relación con el proceso educativo, reconoce las posibilidades del educador para influir en la formación del hombre de acuerdo a la sociedad en la que vive.
Los resultados educativos dependen de la acción educativa del medio: familiar, escolar y todo el contexto social que influyen en el individuo en formación; argumenta científicamente la dirección del desarrollo. Según González et al24 «Para él la esencia de la conducta humana la constituye el hecho de que está mediada por herramientas materiales o técnicas y por los signos […] Uno de los sistemas más importantes de signos y significados está constituido por el lenguaje, tanto en su forma escrita como hablada. Su interiorización y su uso es una vía principal para el desarrollo del pensamiento […] el pensamiento y el desarrollo intelectual no surge de la actividad sensomotriz espontánea del niño ni fundamentalmente de los desequilibrio internos, como afirma Piaget, sino de la interiorización del signo, de la comunicación verbal con el adulto, de la asimilación de la cultura material y espiritual».
Es preciso que el individuo se redescubra a partir de una antropología ética como un ser radicalmente moral, ético, en la búsqueda de un diálogo con los otros y consigo mismo que sea auténtico respecto al contenido moral, regla, virtud, deber, valor, no como algo superpuesto sino asumido como proyecto de condición humana. Se requieren innovaciones educativas que favorezcan el desarrollo de un individuo más humano, ético y creativo, que en la medida que se transforme a sí mismo modifique su contexto. Esta antropología ética resulta de importancia trascendental en el desarrollo de los estudiantes de medicina.
ConclusionesLa apreciación literaria y el sistema de talleres que se propone constituyen una innovación educativa para contribuir a la formación humanista de los estudiantes de medicina en tanto se elaboran definiciones, se diseñan funciones bien intencionadas para desarrollar la creatividad, los valores estéticos, el mejoramiento en las relaciones interpersonales que establecerán los estudiantes con los diferentes agentes socializadores y en su vínculo con la comunidad extrauniversitaria, contribuye a la adquisición de una mayor cultura general, a fomentar la creatividad y coadyuva a la formación humanista del futuro egresado.
La ejecución de la propuesta redundará en la educación estética del educando, en un enriquecimiento del hábito de lectura al proporcionarle las herramientas indispensables para la percepción del fenómeno literario; ampliará el vocabulario y dominio de la lengua materna, a la par que se entrenará su sensibilidad ante la literatura y el mundo.
FinanciaciónNo se recibió patrocinio para llevar a cabo este artículo.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.