Halophila baillonii Ascherson fue encontrada en la laguna costera de Chachaguala, Parque Nacional Cuyamel-Omoa, Honduras, Centroamérica, en 2013 y 2014. Esta observación extiende la distribución de esta especie de fanerógama marina. Halophila baillonii ha sido previamente observada en Belice y otras áreas del Caribe, en el Pacífico de Panamá y Costa Rica. Halophila baillonii en la laguna de Chachaguala forma praderas extensas con una superficie estimada de 7,000m2, con 35 especies de moluscos y 71 especies de peces, registradas hasta el momento. Estas praderas se pueden estar viendo afectadas por la agricultura adyacente a la laguna y por las embarcaciones que transitan el área.
Halophila baillonii Ascherson was found in the Chachaguala Lagoon, located in Cuyamel-Omoa National Park, Honduras, Central America, in 2013 and 2014. This observation extends the range of this seagrass species. Halophila baillonii was previously observed in Belize and other Caribbean areas, in the Pacific coast of Panama and Costa Rica. Halophila baillonii in the Chachaguala Lagoon forms extensive meadows with an estimated area of 7,000m2, with 35 species of mollusks and 71 species of fish reported so far. These meadows can be affected by the lagoon's adjacent agriculture and the watercrafts moving through the area.
Halophila baillonii Ascherson (Hydrocharitaceae, Halophiloideae), conocida como pasto de trébol, es una especie dioica originalmente descrita por Sir Joseph Dalton Hooker durante una expedición del HMS Challenger (Ascherson, 1868; Hooker, 1874; en Short, Fernández, Vernon y Gaeckle, 2006). Actualmente, H. baillonii se encuentra en la categoría de vulnerable (VU) y criterio B2, en la lista roja de especies amenazadas de la UICN y en estado de decrecimiento (Short, Carruthers, van Tussenbroek y Zieman, 2010). Halophila baillonii solo se ha registrado en menos de 10 lugares en el Caribe y Centroamérica, donde ha sido reportada, siendo el área de ocupación estimada de menos de 2,000km2 (Short et al., 2010). Este estudio amplía el rango de conocimiento de la especie H. baillonii para la región mesoamericana y el Caribe.
Halophila baillonii ha sido registrada en varios sitios en el Caribe, desde el golfo de México hasta Brasil (Oliveira, Pirani y Giulietti, 1983; Green y Short, 2003; Phillips, 1992; Phillips y Meñez, 1988; Short, Carruthers, Dennison y Waycott, 2007; Short et al., 2010). Específicamente para la costa atlántica centroamericana, en el golfo de Honduras, únicamente ha sido registrada al sur de Punta Gorda y en la laguna de Placencia, Belice (Green y Short, 2003; Short et al., 2006, 2007). Con este estudio se extiende el rango de distribución de H. baillonii para el Caribe. En el Pacífico ha sido registrada en Panamá (Davidse, Sousa y Chater, 1994; Den Hartog, 1970; Green y Short, 2003; Phillips, 1992; Phillips y Meñez, 1988; Short et al., 2006; Tussenbroek, Barba-Santos, Wong, van Dijk y Waycott, 2010), en Nicaragua (Van Tussenbroek et al., 2010) y en golfo Dulce, Costa Rica (Samper-Villarreal, Bourg, Sibaja-Cordero y Cortés, 2014). Según Cortés (2001), H. baillonii estaba presente en bahía Culebra, en el Pacífico de Costa Rica, pero desapareció tras una fuerte tormenta en 1996 y no ha sido vista desde entonces en esa área.
Halophila baillonii (fig. 1) fue encontrada en la laguna costera de Chachaguala, Parque Nacional Cuyamel-Omoa, en la costa norte de Honduras (15°42′ N, 88°06′ O) (fig. 2), en visitas realizadas en mayo de 2013 (Caviedes y Carrasco, 2013) y noviembre de 2014 (Carrasco y Caviedes, 2014), durante las cuales la especie fue observada. La identificación se realizó con base en De Oliveira et al. (1983), Den Hartog y Kuo (2006), Kuo y Den Hartog (2001), Phillips y Meñez (1988), Samper-Villarreal et al. (2014), Short et al. (2006), Van Tussenbroek et al. (2010). Halophila baillonii se caracteriza por tener distintos brotes erectos laterales, con 2 escamas a mitad de camino, un seudoverticilo de 4 hojas en forma de pétalos en la parte superior del eje vertical, hojas con el margen final serrado y nervadura central con 6 a 9 pares de nervaduras laterales, con tamaño promedio de 0.5-2.2cm de largo y 2-8mm de ancho (Den Hartog y Kuo, 2006; Phillips y Meñez, 1988; Samper-Villarreal et al., 2014; Short et al., 2006; Van Tussenbroek et al., 2010).
Halophila baillonii fue encontrada a lo largo de la laguna de Chachaguala, ocupando una superficie estimada de 7,000m2. Se observaron densas praderas monoespecíficas no continuas (fig. 3) y parches esporádicos en diferentes áreas cercanas a la barra, de aproximadamente unos 2×2m de superficie cada uno. Las profundidades a las que se observó H. baillonii oscilaron entre los 0.4 y los 1.0m. El tipo de sustrato donde se encontró es lodo y arena, siendo más abundante, sobre lodo, lo que coincide con lo documentado por Phillips y Meñez (1988); Samper-Villarreal et al. (2014) y Short et al. (2006).
La salinidad en la laguna osciló entre los 32.84ppt de la época seca y los 25.14ppt de la época lluviosa (Carrasco y Caviedes, 2013, 2015). Las orillas de la laguna son dominadas por manglar, siendo la especie dominante Avicennia germinans, con pequeños parches de Rhizophora mangle, con algunos árboles de Laguncularia racemosa, sobre todo en las áreas próximas a fuentes de agua dulce (Carrasco y Caviedes, 2013). A medida que hay aproximación al área de la desembocadura, comienza a observarse vegetación de playa. La laguna es de apertura permanente, midiendo la boca de la misma, 570m de ancho. Existen actividades humanas en la laguna, como son la agrícola adyacente y 2 muelles, uno de los cuales es para embarcaciones de mayor calado, cuya actividad requiere de un canal de dragado de aproximadamente 1,179.52m de longitud.
En cuanto a la fauna asociada a H. baillonii en la laguna de Chachaguala, tanto en 2013 como en 2014 se identificaron 35 especies de moluscos y otros invertebrados asociados (Caviedes y Carrasco, 2015). Entre las especies de moluscos encontrados están Strombus pugilis (Linnaeus 1758), Melongena melongena (Linnaeus 1758); Calliostoma sp., Nassarius vibex (Say, 1822), Vokesimurex messorius (G. B. Sowerby II, 1841), Cerithium sp., Clithon (Vitto clithon) meleagris (Lamarck, 1822), Neritina (Vitta) virgínea (Linnaeus, 1758) y el heterobranquio marino Bursatela leachii (Blainville, 1817). Se encontró también de manera frecuente el porífero Tedania ignis (Duchassaing y Michelotti, 1864) y algunas especies de algas verdes como Caulerpa sertularioides (S. G. Gmelin (Howe, 1905)) (Caviedes y Carrasco, 2013, 2015) y 71 especies de peces, de las cuales el 65% son de interés para las pesquerías en el golfo de Honduras. De un total de 6,959 ejemplares recolectados, el 98% se encontró en estado juvenil (Carrasco y Caviedes, 2015).
De manera general, el ecosistema de pastos marinos en Honduras ha sido poco estudiado, la gran mayoría de la información disponible es a nivel de reporte técnico, siendo comunes los errores de identificación. Debido a esto, es importante realizar más estudios científicos y monitorización a largo plazo sobre pastos marinos en el país.
Los autores quieren expresar su agradecimiento a la Fundación Cuerpos de Conservación de Omoa, en especial a Roger Flores y Gustavo Cabrera, a la asociación de pescadores de las comunidades de la Villa San Martín y El Paraíso, así como a Daniela Aragón.
La revisión por pares es responsabilidad de la Universidad Nacional Autónoma de México.