¿ Antecedentes
La Gioconda, también conocida como la Mona Lisa o la Madonna Elissa ha sido referida como una de las más intrigantes obras pictóricas en la historia (Figura 1). Fue creada entre los años 1503 y 1506 por Leonardo da Vinci sobre una tabla de álamo con dimensiones de 77 cm por 53 cm. Es propiedad del gobierno francés. Tiene características que hasta el día de hoy han sido sujetas de estudio y admiración debido a su sonrisa, su mirada, o bien por lo misterioso y genialmente enigmático del autor (Figura 2).1
¿ Figura 1. La Gioconda, de Leonardo da Vinci. Óleo sobre álamo (77 cm por 53 cm) museo de Louvre, Francia.
¿ Figura 2. Autorretrato de Leonardo da Vinci (1452 - 1519). Tiza roja sobre lienzo (33 cm por 21.6 cm). Biblioteca Real de Turín, Italia.
La obra pictórica más visitada del mundo, inquilina del museo Louvre en París, se exhibe en una sala de 200 metros cuadrados bajo la observación de decenas de visitantes por hora. Se encuentra protegida de la temperatura, humedad y de cualquier atentado por una cámara con blindaje de alta seguridad.
Leonardo empleó la técnica sfumato (humo o esfumado), para crear esta obra. La técnica por sí misma es ejemplar, ya que no existen líneas divisorias y todo se maneja en el concepto de "unidad". En La Gioconda el maestro da Vinci no deja nada
a la circunstancialidad, encontrando en la sonrisa una mezcla de paz y secrecía; en la mirada hay inocencia y complicidad, tal como cuando uno sabe con el otro un acto secreto conocido sólo por ellos dos. Así, la obra sugiere brindar una armonía y facilitar a cada espectador la capacidad de ver el alma de la retratada.2-4
La medicina, a través de la ciencia oftalmológica, aborda la polémica que desata esta Obra Maestra de la humanidad a través del presente ensayo.
¿ Exploración oftalmológica de La Gioconda
La exploración oftalmológica permite inspeccionar, palpar y también escuchar el globo ocular y sus anexos. Una inspección macroscópica general bien intencionada podría revelar alteraciones simples.5 En La Gioconda, dicha exploración revela un personaje con cuatro detalles oftalmológicamente significativos. El primero de ellos es que se trata del rostro de una dama con ausencia de cejas y pestañas. El otro es que la falta de éstas impide la medición precisa del rostro, según la proporción áurea. Estos dos primeros hallazgos a la exploración oftalmológica se correlacionan pues la silueta del personaje se ha comparado con el perfil de Jesucristo o con el del mismo Leonardo da Vinci. Por otra parte, la depilación facial era muy peculiar y posiblemente común a la época en que fue realizado el cuadro, aunque otros autores afirmen que la modelo sí contaba con estos anexos de la piel.6
El tercer hallazgo oftalmológico es la presencia de un xantelasma en la piel periorbitaria. Estas lesiones son patognomónicas de un desorden del metabolismo de los lípidos. Por lo tanto, y asociado a la estructura magra que muestra la figura, se puede sospechar que el personaje retratado padecía de una dislipidemia (Figura 3).7
¿ Figura 3. La Gioconda (detalle), de Leonardo da Vinci. La flecha muestra un xantelasma en el canto interno del ojo izquierdo. Además, se aprecia la ausencia de cejas y pestañas.
El último dato clínico observado se relaciona con la mirada, la cual no se encuentra en una posición primaria propiamente dicha, sino que se encuentra en lateroversión izquierda. Esta situación sugiere tortícolis compensadora para disimular cosméticamente la presencia de una endotropia del ojo derecho o exotropia del izquierdo. Sin embargo, esto posiblemente tiene una intencionalidad apenas superficialmente sospechada. Otros autores lo atribuyen a una parálisis facial.8,9 Como muchas de las creaciones de Leonardo, más lejos de la objetividad esto es un enigma.
¿ Aspectos geométricos y gnósticos
Desde una perspectiva general, la obra del maestro Leonardo deja al ojo como parte central de un análisis desde puntos de vista que abarcan el psicológico misterio mismo de la mirada, el deontológico referente a la "ventana del alma", hasta el preciso cálculo matemático. Algunos autores han descubierto el rostro del autor en la pintura (Figura 4).
¿ Figura 4. Siluetas de Leonardo da Vinci y de La Gioconda, en una confrontación popular, donde se empatan perfecto ambos perfiles.
La geometría del rostro de Mona Lisa aplica una relación matemática sencilla respecto a su ubicación en el espacio, quedando en una posición elipsoide con el eje mayor en sentido vertical. El ojo izquierdo de La Gioconda se ubica en el centro del cuadro, logrando dividir el rostro longitudinalmente en dos mitades proporcionales, cuyo eje de simetría es la pupila izquierda (Figura 5).
¿ Figura 5. Simetría en La Gioconda, cuyo eje se ubica en el centro de la pupila izquierda.
El órgano de la visión tiene una importancia simbólicamente crucial para Leonardo da Vinci.10 Desde un punto de vista filosófico, el maestro considera a este órgano de los sentidos como el origen de todo aquello que se conoce, en el entendido de que es lo que pone en contacto al humano con el mundo natural y animado. En un fragmento de su Tratado de Pintura afirma: "...el ojo, que se dice ventana del alma, es la principal vía para que el sentido común pueda, de la forma más copiosa y magnífica, considerar las infinitas obras de la naturaleza" (Figura 6).11
¿ Figura 6. Portada del "Tratado de Pintura" del maestro Leonardo da Vinci.
Aunque el presente ensayo no trata los estilos que sigue Leonardo o sus influencias artísticas, son mundialmente conocidos sus tratados sobre anatomía humana, en los que se reconoce su maestría. Todos los ojos que Leonardo da Vinci estudió y plasmó en bocetos o pinturas documentan la exquisitez de sus detalles. En las obras de Leonardo, el ojo humano se enfoca y es uno de los puntos de partida de las críticas artísticas, tanto por el carácter que le otorga a los rostros como por su lugar en el espacio.11
Siguiendo el eje de simetría longitudinal a través del ojo izquierdo, obteniendo una imagen en espejo se logra la silueta de un grial. El contorno de la copa es favorecido por la ausencia de las pestañas y cejas, así como la difusión del surco intermamario y la voluptuosidad del rostro. El órgano de los sentidos visuales es clave en la imagen del grial, que para Leonardo representa un símbolo del receptor de la sangre de Cristo, así como el conocimiento absoluto en unión con el poder de la fe (Figura 7).11 Así, Leonardo ubica al ojo como el sustituto o centro del antiguo cáliz. Por ello, para Leonardo el ojo es un renovado símbolo que sintetiza la observación directa de la naturaleza y el conocimiento, como vías para trascender como humanidad.
¿ Figura 7. Silueta de un grial, formada a partir de una imagen en espejo del busto de La Gioconda, cuyo eje se ubica en el centro de la pupila izquierda.
En 1950 se realizó un análisis radiográfico y espectrofotométrico de la obra, encontrándose algunas peculiaridades de la técnica sfumato.12 Dichas características difieren de lo que de manera habitual realizaban los flamencos y venecianos de la época. En el análisis de La Gioconda es notable que Leonardo da Vinci no superpuso las capas traslúcidas de óleo para producir el efecto difuminado típico de la técnica. Lo que realizó fue yuxtaponer toques diminutos de diferentes tonos y luego cubrir esto con el barniz tradicional. Posteriormente volvió a pintar sobre ella varias veces hasta lograr ese pasaje de luz y color sin límites establecidos ni soluciones de continuidad, fusionando los colores. No existe pincel que pueda lograr dichos espesores de pintura. Se puede inferir que el maestro da Vinci debió seguramente utilizar sus manos como pinceles pues no se creaba todavía ningún artefacto que permitiese realizar algún tipo de aerosol.
¿ Psicofísica de la visión en La Gioconda
El maestro Leonardo da Vinci utilizó al máximo algunos recursos complejos de la óptica para impactar en aspectos psicofísicos de la imagen obtenida a nivel de la corteza cerebral.13,14
La visión de las formas estudia los límites o umbrales espaciales. Estos factores ópticos y retinianos constituyen dentro de la psicofísica los llamados "mecanismos de la visión". Con esa información el sistema nervioso elabora una respuesta conocida como "concepto visual" o "imagen psíquica".14
La técnica del sfumato utilizada para crear La Gioconda propone un pleno conocimiento de formas, dependientes de la percepción de bordes o límites de luz-obscuridad con determinado contraste. En este mecanismo actúan recursos neurofisiológicos como la inhibición lateral, descrita desde 1959 por Ratliff y Hartline.15 Ésta se caracteriza por una interacción de estimulación-inhibición a nivel de las células ganglionares retinianas, como la observada en la banda de Mach o la rejilla de Herman. La primera es un ejercicio caracterizado por bandas uniformes en sentido vertical que van desde el extremo izquierdo de color negro hasta el extremo derecho de color blanco, encontrándose entre estos extremos tonalidades grises (Figura 8). En este ejercicio, al observar las bandas percibimos que son de un gris uniforme en toda su área y gradualmente se ve más clara la zona vecina hacia el extremo derecho, siendo evidente que se ve más obscura la banda que está junto a un lado de la banda más clara. Con esto se obtiene un efecto de contraste subjetivo llamado "contraste de borde". Esta ilusión óptica es responsable del aumento en la formación de discontinuidades, necesarias para la percepción estable de formas.16
¿ Figura 8. Banda de Mach. Es una pauta escalonada, graduada del blanco al negro, cuyas barras tienen un tono de igual luminancia, pero las bandas parecen más claras por el borde que se aproxima al negro, y más oscuras por el que se aproxima al blanco, produciéndose un efecto de ondulaciones o estrías de fuste dórico. Esta eponimia es debida al austriaco Ernest Mach.
La rejilla de Hermann es otro ejemplo en el que se percibe una mancha obscura en el cruce de dos líneas blancas. Esto se explica considerando que la cantidad de inhibición lateral es mayor en esa zona, incluso siendo evidente la diferencia en las zonas correspondientes de las esquinas (Figura 9).17
¿ Figura 9. Rejilla de Hermann, para mostrar la ilusión óptica que causa la inhibición lateral.
Otro fenómeno neurofisiológico presente en La Gioconda es el de los "puntos correspondientes" descrito por Cline.18,19 Consiste en que una pareja de puntos, uno sobre cada una de las dos retinas, establecen una dirección visual común. Un cierto punto sobre la retina derecha tendrá un punto correspondiente sobre la retina izquierda, que al estimularse se percibiría como un punto único. En La Gioconda, mientras se observa un punto fijo, como los ojos, parecería que se esboza una sutil sonrisa y al observar la zona de la boca parecería que La Gioconda dirige la mirada hacia nosotros. Esto podría ser explicado en parte por el concepto de correspondencia retiniana.
¿ Conclusiones
La Obra Maestra La Gioconda manda un estímulo visual como una distribución espacial de luminancias en un espacio bidimensional cuyo límite visual está íntimamente relacionado con el tamaño del detalle más pequeño que un observador es capaz de detectar o reconocer. Todos los elementos psicópticos que se manifiestan con el dominio inigualable de la técnica sfumato son logrados por el maestro Leonardo da Vinci.
En Mona Lisa se pueden observar los ojos con la característica humedad y brillos propios de alguien vivo, y casi se puede observar la presencia del pulso carotídeo. Esta mujer fue pintada para hacer temblar a cualquier artista por valiente que fuese, ya que a diferencia de una fotografía la obra posee elementos subjetivos francamente intensos con significados enigmáticos.
La sensación de movimiento que ocurre por mecanismos de la visión como la inhibición lateral y la correspondencia retiniana ya mencionados, hacen que la obra posea cualidades que se apoderan del que la mira, a pesar del reposo en que se encuentra la mujer.
Correspondencia: Dr. Juan Luis González Treviño.
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