The adjective «cognitive» has a double meaning and it is used for naming two disciplines with separate activities: Cognitive neuroscience and cognitive psychotherapy. This has an unrecognised impact on the health terminology and the classification systems.
MethodThe current use of this term is reviewed in a series of key dictionaries, scientific books, databases (OldMedline and PsycINFO) and specific web searchers (Google Scholar). The history of this term and its etymology is also reviewed and compared to other alternatives (i.e. noetic) as well as its use in international classifications (e.g. the International Classification of Functioning – ICF).
ResultsThe modern use of the term «cognitive» in Neurosciences can be traced back to Hebb in a 1955 one year before that recorded at official version. The different meaning of this term in psychology can be traced back to the same decade. Departing from the ICF framework of mental functions, «cognitive» can be regarded as a generic term that encompasses both neurocognitive and meta-cognitive functions and should not be used for classification purposes. A hierarchy is suggested for the use of «neurocognitive» in the classification of mental functions.
CommentsThe polysemic use of this name reveals a latent controversy in health sciences which has implications for its use in the international classification systems. There is an need to improve the standard definition and the semantic hierarchy of the term «cognitive», «neurocognitive» and other related terms within the context of International Health Terminology Standards Development Organisation (IHTSO).
El término «cognitivo» tiene un doble significado, llegando a denominar disciplinas con actividades diferentes: neurociencias cognitivas y psicoterapia cognitiva.
ObjetivoSe efectúa una revisión del uso actual del término en una serie de diccionarios relevantes, libros científicos, publicaciones indexadas en OldMedline y en PsycINFO, y buscadores específicos (Google Scholar). Se revisa la historia del uso actual del término y la etimología del mismo en relación con otras alternativas (p.ej. noético) y su utilización en clasificaciones internacionales (p.ej. la clasificación internacional del funcionamiento [CIF]).
DesarrolloSe constata que el uso polisémico del término. En neurociencias se inicia con Hebb en 1955, antes de la atribución aceptada oficialmente. En psicología social y clínica parece independientemente en la misma década. A partir del marco de la CIF de las funciones mentales, «cognitivo» es un término genérico que engloba funciones neurocognitivas y meta-cognitivas o del esquema mental que no es útil para clasificación. Se propone una jerarquía para el uso del término neurocognitivo en terminología de salud.
ConclusionesEl uso polisémico del nombre «cognitivo» ha generado una controversia latente en ciencias de la salud que tiene implicaciones relevantes para su uso en las clasificaciones internacionales. Es necesario mejorar la definición estándar de «cognitivo », «neurocognitivo» y de los términos relacionados en el contexto de la Organización Internacional de Estandares en Terminología de Salud (IHTSO).
Statement of Responsibility: Luis Salvador Carulla is the president of the Classification of Intellectual Development Disorders research group which reports to the Advisory Group for the WHO ICD-10 Mental and Behavioural Review. This article reflects the perspective of the author and not WHO policy.