Son tiempos de renovación. La SER está realizando cambios editoriales en las revistas que edita. Por primera vez se ha convocado un concurso editorial para Reumatología Clínica y, de forma simultánea, para Seminarios, hecho sustancial para el futuro de las revistas biomédicas: competividad curricular y transparencia. No hay momento mejor para dejar la dirección de Seminarios de la Fundación Española de Reumatología.
Durante 10 años he dirigido Seminarios de la Fundación Española de Reumatología con entusiasmo y placer. Recuerdo que el Dr. Tornero —a la sazón presidente de la SER— me sugirió dirigir la revista. El testigo que recogía provenía de la idea seminal de Armando Laffon. Su deseo era conseguir una revista de revisiones en reumatología en castellano. Los primeros directores fueron el profesor Rodríguez Valverde y el Dr. Manolo Figueroa. Mi experiencia —por entonces en el mundo editorial ya era sustancial— había estado como secretario de la Revista Española de Reumatología y haber trabajado también para 7 Días Médicos. Acepté complacido. Seminarios ha sobrevivido a diversos cambios de editorial (Aran, Thierry Godbarge, Doyma y Elsevier) (fig. 1) que pudieron hacer mella en la trayectoria de la revista; no obstante, el apoyo de la SER a la revista fue fundamental. Se han hecho más de 36números en estos años y varios monográficos. El compromiso de los autores ha sido enorme, y esto ha hecho la revista todavía más grande. El apoyo de los reumatólogos jóvenes ha sido esencial. Los atentos lectores se habrán dado cuenta de que los artículos no se han limitado a la especialidad de reumatología, sino que se han aceptado artículos de otras especialidades: medicina interna, dermatología, neumología, entre otras. Asimismo, numerosos artículos se ha dedicado a mejorar el conocimiento y la forma de la escritura médica. Sumar… siempre sumar.
Tengo que agradecer a todas las Presidencias de la SER (Dr. Tornero, Dr. Blanch, Dra. García Vicuña y Dr. Muñoz) el hecho de que nunca interfirieran en la línea editorial de la revista ni en su contenido. Seminarios ha tenido una independencia absoluta, y prueba de ello son los editoriales, que soy consciente de que pueden haber sido algo mordaces. Muchos de ellos expresan puntos de vista de una realidad cambiante: la que nos ha tocado vivir.
El nuevo director de Seminarios de la Fundación Española de Reumatología tendrá una realidad diferente a la mía. Le recomiendo tesón, innovación y puentes intelectuales a los diferentes grupos de la SER y especialidades médicas. Mi apoyo hacia su persona será incondicional, y el trasvase, suave como la seda.
Creo que merezco un descanso en el mundo editorial e institucional. Dejar paso a savia nueva que enriquecerá la revista. Así pues, aquí tienen «mi último» número como director.
Les agradezco la confianza que me han dado todos estos años y las cartas y llamadas telefónicas que he recibido en este periodo, que han sido un estímulo enriquecedor. Por último, un cálido saludo a Elsevier y a la secretaria de Seminarios de la Fundación Española de Reumatología: Merche Belmonte.