La Reumatología es una de las especialidades más jóvenes de nuestro país. Fundamentalmente está asentada en el marco hospitalario, y quedan muy pocos centros en el Estado sin reumatólogo. La expansión de reumatólogos en los centros de salud también es progresiva, aunque queda mucho por hacer. El futuro de la especialidad está asegurado mediante la formación de residentes; cada año se forman aproximadamente 50 residentes, que en años venideros sustituirán a los que por razones de edad se jubilan. Este es un hecho diferencial frente a países tales como Canadá o Estados Unidos. En efecto, en Estados Unidos solo el 2,8% de los residentes de Medicina interna eligen Reumatología, y se calcula que en el año 2025 faltarán 2.600 reumatólogos. La edad media actual de los reumatólogos yanquis es de 57 años.
Hace poco, una exresidente de Reumatología de nuestro hospital me envió por correo electrónico un artículo escrito por James R. O’Dell1 en la revista The Rheumatologist (el equivalente de nuestro Reumatismos). El título era «La especialidad más feliz: Reumatología». El autor se hacía eco de una encuesta hecha por Medscape entre 292.00 galenos estadounidense que determinaban que los reumatólogos somos la especialidad más feliz.
El autor reflexionaba ante el panorama comentado de la Reumatología en Estados Unidos: fundamentalmente versaba sobre la falta de vocaciones. Si la Reumatología era la especialidad más feliz, ¿cómo es que no atraía a los estudiantes más brillantes? Evidentemente este hecho no llegaba a los estudiantes. La vertiente monetaria era un punto diferencial; especialidades tales como Gastroenterología o Neurología ganaban 10 veces más que un reumatólogo.
Estimulado, el Dr. O’Dell había hecho una encuesta entre sus colegas reumatólogos con el objeto de saber por qué eran reumatólogos (tabla 1). Las razones una a cuatro eran las más comunes entre sus colegas.
Principales razones para ser reumatólogo
1. Tenemos control de nuestras vidas, práctica médica y tiempo. Por tanto, la mayoría de nosotros conocen el nombre de sus hijos |
2. Tratamos, cuidamos a nuestros pacientes, teniendo relación con ellos largo tiempo |
3. Hacemos grandes diagnósticos —los Sherlock Homes de las consultas—, generalmente el último recurso |
4. Tenemos excelentes tratamientos y vemos resultados óptimos |
5. La Reumatología selecciona a gente feliz |
6. Recibimos muchos abrazos, literal y figurativamente |
7. Practicamos el arte así como la ciencia de la Medicina |
8. Cuidamos de la totalidad del paciente, no solo de un órgano |
9. Vemos pacientes de todas las edades |
10. No pagamos tantos impuestos como otros especialistas |
Desde mi punto de vista, es cierto que en mayor o menor medida disponemos mejor de nuestro tiempo tanto en la práctica médica como en la vida privada. ¡Sano equilibrio! Otras especialidades están mucho más atadas a una dinámica intervencionista y de urgencias, entre otras cosas. Es cierto que los pacientes con enfermedades reumáticas crónicas tales como la artritis reumatoide y el lupus eritematoso sistémico, entre otras, establecen una relación larga y fructífera con sus médicos. Es cierto lo de los abrazos literales y figurativos: los pacientes están muy agradecidos por lo que hacemos. Además, ahora disponemos de tratamientos biológicos, y vemos como nuestros pacientes mejoran y dejan de sufrir. Estoy de acuerdo en que somos buenos médicos y que diagnosticamos enfermedades raras o con bizarras manifestaciones (los Sherlock Homes de la Medicina). Poseemos una visión global de la Medicina y a menudo somos el especialista consultado ante un paciente con extrañas manifestaciones clínicas, al que otras especialidades no han diagnosticado (vamos mas allá del órgano específico). Cierto, practicamos el arte y la ciencia de la Medicina —probablemente como otras especialidades—, pero los reumatólogos somos gente feliz. Es un sano ejercicio hacer tu propia lista con otros colegas reumatólogos.
Cada año, bajo el auspicio de la Sociedad Catalana de Reumatología, celebramos una jornada pre-MIR para convencer a los futuros especialistas que hagan la especialidad de Reumatología. De ahora en adelante estará en el guión «Las 10 razones para ser reumatólogo».