Jenny Firth-Cozens es una psicóloga especialista en profesionales de la sanidad. Recientemente visitó Barcelona y dio una ponencia al tema al que ha dedicado su vida profesional: «La salud de los profesionales de la Sanidad» (fig. 1).
Su visita fue cortejada por numerosos periodistas y médicos especialistas en la salud de los facultativos. Fue entrevistada por un periodista de La Vanguardia en su popular «contra». El periodista hacía un resumen de la entrevista:
«Superdoctores con más ego que pericia; otros deprimidos, alcohólicos y adictos… Podría ser un capítulo de “House”, pero es la realidad de la profesión: un 30% sufre alguno o todos esos problemas en Gran Bretaña y el porcentaje no es inferior en España. Ellos son la última mano a la que asirse cuando se cae —todos caeremos— en el precipicio del dolor, la enfermedad y la muerte; pero también muchos de ellos sufren más que sus pacientes porque son incapaces de pedir ayuda. Y esa es la lección que me llevo a casa: la fortaleza que infunde admitir tu debilidad y la debilidad que acarrea negarla»1.
Los médicos enferman, aunque nos cueste reconocerlo. Según la Fundación Galatea, uno de cada 10 galenos puede sufrir durante su vida profesional algún episodio relacionado con enfermedades psíquicas2.
Evidentemente, la enfermedad conlleva 2 problemas:
- 1.
Mala praxis y errores, ergo posibles reclamaciones judiciales.
- 2.
El médico, cuando enferma, no suele ser buen paciente.
Un médico enfermo tiene dificultades para acudir al médico y pedir ayuda, y cuando se trata de enfermedades de carácter mental el problema se agudiza mucho más. Hay evidencia de que existe cierta cultura de ocultación del problema entre el mismo afectado y su entorno2, sea la familia, las amistades, el centro de salud o el hospital. Si el problema no se detecta, la evolución puede ser muy negativa.
Firth-Cozen simplificaba en la entrevista el porqué de la situación de los médicos (tabla 1).
Situación de los médicos
• La Medicina es la profesión mas estresada |
• Atiende a un público doliente (entre la vida y la muerte): dolor, soledad, decrepitud… |
• La Medicina ya no tiene una buena compensación económica ni prestigio sociala |
• El 30% de los profesionales se deprime o tiene conductas adictivas |
• Las mujeres se enfrentan mejor |
• Cada centro debería tener un consejo de 3-4 médicos con antigüedad que deliberen sobre los médicos enfermos |
La realidad de la situación de los médicos en el Reino Unido no es lejana a la nuestra. En 1998 el Colegio de Médicos de Barcelona puso en marcha el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), que de forma progresiva se ha ido extendiendo a otras partes de España. Se creó para superar las barreras que impiden a los facultativos verse como pacientes y para facilitar el acceso a una atención sanitaria de calidad y especializada en casos de trastornos psíquicos y conductas adictivas. Esta iniciativa fue pionera en Europa, aunque inspirada en experiencias previas en Estados Unidos, Australia y Canadá. La Fundación Galatea (creada 5 años después) es el instrumento de gestión del PAIME.
Reconocer este entorno es básico. La salud de los médicos debe ser el garante de la de los ciudadanos. Estos depositan su confianza en nosotros. Las premisas para el inicio de la curación del facultativo son el reconocimiento de la debilidad —que te hace más fuerte— y sobre todo el pedir ayuda. Depositar tu confianza en las instituciones creadas para tal menester es fundamental.