El desarrollo de las neurociencias en los últimos años apenas ha tenido repercusión en un ámbito tan relevante como la prevención de adicciones. La formulación de diversos modelos neuropsicológicos ha permitido conocer mejor y aportar explicaciones a los procesos adictivos y los componentes en ellos implicados. A partir del conocimiento de estos modelos, se analizan cuestiones que pueden estar relacionadas con los mecanismos cerebrales implicados en las conductas adictivas, como la utilización de nuevas tecnologías, la vulnerabilidad al estrés y el desarrollo de la autorregulación desde la infancia. Se retoma el Modelo de Estrés Social como planteamiento preventivo que facilite una mejor comprensión del proceso de adicción, y se propone la aplicación de modelos preventivos basados en el desarrollo de la resiliencia como marco operativo para la prevención de adicciones. Se recuerda la importancia de la detección precoz, una visión transdisciplinar y un trabajo coordinado y conjunto desde diferentes servicios.
Development of neuroscience in recent years has had little impact in an important area as prevention of addictions. The proposal of several neuropsychological models has allowed a better understanding as well as it has provided different explanations for addictive processes and components involved. Through the analysis of these models, some issues are discussed, some of them related to brain mechanisms involved in addictive behaviors, such as use of new technologies, vulnerability to stress and the development of self-regulation from childhood. The Social Stress Model is proposed as a preventive approach which promotes a better understanding of the addictive process. Implementation of preventive approaches based on the development of resilience are recommended as an operational framework for addiction prevention. Finally, this paper recalls the importance of early detection, transdisciplinary vision and coordinated work together from different public services.