Con este monográfico sobre cognición social en adicciones, la revista Trastornos Adictivos —órgano oficial de expresión de la Sociedad Española de Toxicomanías— inicia un nuevo proyecto. Esta nueva etapa se articula en torno a un nuevo equipo editorial, y se encarna en una nueva imagen de portada. Ambos representan nuestra renovada apuesta por una revista científica de primer nivel especializada en la investigación y la clínica de las adicciones, punta de lanza académica, profesional y de enlace entre estos dos mundos, a menudo, separados artificialmente. Nuestra apuesta consiste en fortalecer el grado de innovación, la consistencia interna y el potencial de transferencia aportados por los contenidos de nuestra publicación:
1)Innovación: en la selección de los temas y los contenidos y en el fomento de publicaciones en las fronteras del conocimiento en el campo.
2)Consistencia interna: apostando por números monográficos sobre temas clave y asegurando una estructura orgánica dirigida a la publicación de revisiones de expertos o sistemáticas y artículos originales.
3)Transferencia: diseñando canales de comunicación fluidos entre la investigación básica y la clínica, contrastando opiniones y fomentando consensos entre lo más molecular y lo más urgente para mejorar la calidad de vida de los pacientes con adicciones.
Para dar impulso a estos objetivos, nos hemos organizado en diversas áreas editoriales, con sus respectivos editores asociados a cargo de su desarrollo, y hemos implantado un gestor editorial (EES Editorial Manager) que garantiza el procesamiento adecuado de los manuscritos y asegura un procedimiento estricto y abierto de revisión por pares. Nuestras seis áreas temáticas pretenden dar cabida al amplio espectro de intereses que aglutinan a los profesionales de la investigación y la clínica de los trastornos adictivos. Quedan agrupadas en los siguientes rótulos:
1) Investigación traslacional en neurociencias (editor asociado: Luis F. Callado).
2) Psicopatología, nosología y comorbilidad (editora asociada: Marta Torrens).
3) Nuevas drogas y nuevas tecnologías (editor asociado: Magí Farré).
4) Guías clínicas (editor asociado: José Pérez de los Cobos).
5) Nuevos instrumentos y tratamientos basados en la evidencia (editor asociado: Ioseba Iraurgi).
6) Epidemiología y desarrollos metodológicos (editor asociado: Óscar Lozano).
Entre todos seremos responsables de cultivar nuestras tres ideas fuerza. En línea con los editores asociados trabajará también un nuevo comité editorial (ver listado completo en la página del staff), un foro dinámico e interdisciplinar de expertos consultores de estrategias y contenidos. También abrimos nuestro foro a manuscritos en inglés —muy especialmente en temas que requieren una visión global, diferencial o transcultural o que han avanzado a mejor ritmo en otros países—, y pretendemos prestar especial atención a grupos y autores de Latinoamérica.
Nuestra pretensión es que este primer número de 2012 abra camino a esta nueva senda. El tema elegido —la cognición social— reúne los requisitos de innovación y vigencia, puente de enlace entre lo básico y lo clínico, y foco nítido de avance teórico y terapéutico. La cognición social representa el conjunto de procesos cognitivo¿emocionales que ponemos en marcha al afrontar situaciones sociales (Tirapu¿Ustárroz). Como tales, abarcan desde las habili dades más básicas —como generar, percibir y reconocer nuestras propias emociones y las de otros (Villalba¿Ruiz y Verdejo¿García)— a las más estratégicas para gestionar situaciones sociales complejas —resolver dilemas morales (Carmelo¿Perera et al) o aplicar nuestra inteligencia emocional (Fernández¿Serrano et al)—. En los pacientes con adicciones convergen ambos tipos de déficits, y ambos tienen un impacto crucial sobre su desempeño social y afectivo, tanto en su entorno más íntimo como en el más extenso (normas socia les, legales). Así lo han reconocido publicaciones internacionales que destacan que la adicción "tensa los hilos neurales de la conducta social"1. Así lo reflejan también los esfuerzos básicos por evaluar la eficacia de intervenciones farmacológicas (por ejemplo, oxitocina o d¿cicloserina)2,3 y conductuales dirigidas a mejorar la cognición social.
Empezamos Trastornos Adictivos etapa 2.0, esperamos que la disfruten.
Correo electrónico: averdejo@ugr.es