Debido al aumento de casos diagnosticados de tosferina en nuestra área, en los últimos años, decidimos realizar una revisión con el objetivo de conocer las características clínico-epidemiológicas de esta enfermedad en nuestro medio.
La tosferina es una enfermedad infectocontagiosa causada por Bordetella pertussis, que se transmite por contacto directo a través de las secreciones respiratorias de las personas infectadas. Característicamente entre los ataques de tos el paciente presenta un aspecto de normalidad.
En España, en los últimos años, se ha documentado un incremento en el número de casos de tosferina, especialmente en menores de 3 meses, adolescentes y adultos1. Aun así, la incidencia es mayor, pues hay hasta un 50% de infradiagnóstico1,2. Este incremento parece debido a la pérdida de inmunidad inducida por la vacuna en jóvenes y adultos que actúan como vectores de transmisión3. También hay que tener en cuenta que la eficacia de las vacunas acelulares (DTPa) es variable, por lo que es posible observar casos de tosferina en niños correctamente vacunados.
Desde enero de 2015 hasta mayo de 2016 han sido diagnosticados en nuestra área sanitaria (área sanitaria del Hospital do Salnés, con una cobertura de 73.627 habitantes, población pediátrica asignada 9.969 niños) 10 casos de tosferina en pacientes menores de 2 años y medio. No se diagnosticó ningún caso durante los años 2013 y 2014.
La edad media de diagnóstico fue de 7 meses y 6 días, y la mitad eran menores de 3 meses. El 70% de los casos ocurrieron en los meses fríos y un 30% en primavera.
En la tabla 1 se muestran las características demográficas y clínicas de los pacientes. El 80% requirieron ingreso hospitalario, de los cuales 2 pacientes se trasladaron a la unidad de cuidados intensivos pediátricos (UCIP) del centro de referencia (Complejo Hospitalario Universitario de Santiago). Un 30% de los casos presentaron algún tipo de complicación, requiriendo ventilación mecánica no invasiva un 20% del total.
Características epidemiológicas y clínicas de los pacientes con tosferina
Características | Global (n=10) | No UCIP (n=8) | UCIP (n=2) |
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Demográficas: | |||
Edad | Siete meses y 6 días | Ocho meses y 17 días | Un mes y 25 días |
Sexo, V/M | 7/3 | 5/3 | 2/0 |
Dosis vacunación, (%): | |||
0 | 30 | 10 | 20 |
1 | 20 | 20 | 0 |
2 | 10 | 10 | 0 |
3 | 30 | 30 | 0 |
4 | 10 | 10 | 0 |
Clínica: | |||
Tos pertusoide, n (%) | 10 (100) | 8 (100) | 2 (100) |
Gallo, n (%) | 3 (30) | 2 (25) | 1 (50) |
Cianosis, n (%) | 4 (40) | 2 (25) | 2 (100) |
Apneas, n (%) | 2 (20) | 0 (0) | 2 (100) |
Fiebre, n (%) | 7 (70) | 6 (75) | 1 (50) |
Necesidad de oxígeno suplementario | 6 (60) | 4 (40) | 2(100) |
Estancia media (días) | 9,8 | 5 | 29 |
UCIP: unidad de cuidados intensivos pediátricos.
Se documentan convivientes tosedores en la mitad de los afectados, en los cuales no se confirmó microbiológicamente el diagnóstico, pero sí recibieron profilaxis o tratamiento antibiótico, por lo que la inmunización de los niños mayores y adultos debería ser una buena estrategia para conseguir la protección de los lactantes susceptibles4–6.
Se realizó radiografía de tórax en el 70%, siendo patológica en un 57%, y analítica de sangre en la mitad de los casos, apareciendo una cifra mayor de 15.000 leucocitos en 2 casos, siendo estos los que precisaron ingreso en la UCIP.
El diagnóstico fue confirmado en un 90% mediante reacción en cadena de la polimerasa (PCR) de frotis nasofaríngeo. El 100% de las PCR de Bordetella solicitadas en niños, en nuestro centro, fueron positivas. Esto nos hace pensar que seguramente estamos infradiagnosticando la enfermedad. De todas formas, cada vez tenemos un mayor índice de sospecha y reconocimiento clínico solicitando más determinaciones de PCR de Bordetella, incluso en pacientes ya diagnosticados de otras infecciones respiratorias o con una clínica no florida.
Todos los pacientes diagnosticados recibieron tratamiento antibiótico con macrólidos (60% claritromicina y 40% azitromicina).
Como conclusiones, observamos en nuestra área sanitaria un aumento del número de pacientes menores de 3 años diagnosticados de tosferina respecto a años anteriores. Esto puede ser debido al aumento de incidencia de casos descritos, pero también es cierto que tenemos una mayor sensibilidad diagnóstica en nuestros facultativos. Destacar que, ante un paciente con accesos de tos, independientemente de la edad, hay que sospechar una tosferina, aunque intercrisis la exploración sea normal. También en pacientes diagnosticados de otras infecciones respiratorias, ante la presencia de tos en accesos o una evolución atípica, no olvidar que no es infrecuente su coinfección.