O-075 - INCIDENTALOMAS TIROIDEOS EN PET-TC CON 18F-FDG
Hospital Universitario y Politécnico La Fe, Valencia.
Introducción: El uso de la tomografía por emisión de positrones (PET) ha tenido un crecimiento intenso en la práctica clínica, en especial, en el campo de la oncología, motivo por el que se ha percibido en los últimos años un aumento en la incidencia de incidentalomas tiroideos. Especial interés comportan las captaciones tiroideas focales, con una prevalencia del 1,6%, ya que presentan un riesgo de malignidad entre el 25 y el 50%. Estas lesiones precisan de estudio ecográfico y PAAF para confirmar o descartar malignidad y orientar el manejo.
Objetivos: Exponer nuestra experiencia en la detección de incidentalomas tiroideos en PET-TC, estudiar la relación de estas captaciones con la malignidad de las lesiones, y la actitud diagnóstica y terapéutica frente a ellas.
Métodos: Estudio retrospectivo descriptivo de los pacientes que presentaron incidentalomas tiroideos en los estudios PET-TC con 18F-FDG desde 2012 hasta junio 2020. Las variables evaluadas fueron: edad, sexo, exploración física, valor máximo estandarizado de captación (SUVmáx), motivo del PET-TC, localización y tamaño de la lesión por ecografía, punción-aspiración con aguja fina (PAAF), cirugía y resultados anatomopatológicos. Además, se estudió la relación entre el SUVmáx y la naturaleza maligna o benigna de la lesión.
Resultados: Se realizaron 5258 exploraciones PET-TC con 18F-FDG entre 2012 y 2020 en las que se observó captación tiroidea focal incidental en 32 casos, siendo el 60% mujeres y el 40% hombres, con una edad media de 60 años. La mitad de las lesiones no se palpaban en la exploración física. El motivo de realización del PET-TC fue oncológico en el 84% de los casos. El SUVmáx medio global fue de 5,2 (3-14,06), siendo las captaciones medias de las lesiones benignas y malignas de 5,36 (3-13,7) y 6,63 (3,6-14,06) respectivamente, sin observar diferencias estadísticamente significativas entre las captaciones medias de ambas (p = 0,45). El tamaño medio de las lesiones malignas fue mayor que el de las benignas, 2,1 (0,5-4) y 1,7 (0,8-4,5), respectivamente. El resultado de la PAAF demostró benignidad (Bethesda II) en el 63% de los casos, siendo diagnóstica de malignidad (BVI) en 2 casos, sospechosa de malignidad (BV) en 3 y sospechosa de neoplasia folicular (BIV) en 6. Fueron intervenidos 16 pacientes (50%), siendo la técnica más realizada la tiroidectomía total (43,75%) seguida de la tiroidectomía total con vaciamiento central (31,25%). Finalmente, el estudio anatomopatológico confirmó malignidad en 5 casos (31,25% de los intervenidos), 3 diagnósticos de carcinoma papilar (PAAF BV y BVI) y 2 de carcinoma folicular (PAAF BII y BIV).
Conclusiones: La captación tiroidea focal en estudios de PET-TC se asocia a una alta probabilidad de cáncer, evidenciando en nuestra serie un riesgo de malignidad del 31,25% entre los pacientes finalmente intervenidos. Este hallazgo obliga a evaluar al paciente con ecografía tiroidea y PAAF. El valor del SUVmáx suele ser mayor en las lesiones malignas pero por sí solo no es un buen factor diagnóstico de malignidad. El manejo definitivo de estos pacientes depende del pronóstico global y de la expectativa de vida.