P-260 - QUISTE PARASITARIO HEPÁTICO DE ORIGEN AMEBIANO: PRESENTACIÓN TARDÍA
1Hospital Universitari Sant Joan, Reus. 2Universitat Rovira i Virgili, Facultad de Medicina, Reus.
Introducción: La disentería amebiana suele ser la forma de presentación más frecuente de la infección parasitaria por Entamoeba histolytica. Sólo algunos pacientes desarrollan abscesos hepáticos amebianos, lo que suele producirse por diseminación de los parásitos a través del sistema portal. El absceso amebiano no complicado tiene una mortalidad < 1% cuando se diagnostica y se trata con tiempo, pero si se complica la tasa de mortalidad puede llegar a alcanzar el 20%. Por este motivo, es imprescindible un correcto diagnóstico y un tratamiento precoz, ya sea farmacológico o con drenaje percutáneo.
Caso clínico: Aportamos el caso de una paciente de 58 años con antecedentes de diabetes mellitus tipo 2, hipertensión arterial y dislipemia que, tras un viaje a la India, inició cuadro de deposiciones diarreicas abundantes, malestar general y dolor abdominal difuso. Fue tratada de forma ambulatoria con tratamiento sintomático con discreta mejoría, pero 8 meses después del viaje debutó con fiebre alta y empeoramiento clínico, por lo que se inició estudio con sospecha de un probable absceso de origen parasitario. Se cursaron serologías y pruebas de imagen que confirmaron el diagnóstico del absceso hepático localizado en el segmento V que medía 6 cm de diámetro y era positivo para Entamoeba histolytica. Se indicó tratamiento médico con metronidazol 500 mg a dosis plenas (2-2-2). No fue necesario el drenaje percutáneo del absceso dada la buena evolución. La paciente evolucionó de forma favorable con rápida desaparición de la fiebre y del dolor abdominal, y con un tránsito intestinal normal. En un posterior control radiológico por TC se evidencia la franca disminución del tamaño del absceso. Actualmente está libre de enfermedad.
Discusión: En pacientes con antecedentes de viaje reciente a zonas tropicales que presentan dolor abdominal, descomposición y fiebre, hay que descartar siempre etiología parasitaria. En caso de absceso amebiano, la colocación de un drenaje percutáneo no está indicado en todos los pacientes. Su uso es controvertido y sólo debe plantearse el drenaje en situaciones de riesgo de rotura o falta de respuesta al tratamiento médico.