Introducción: En la década de los 60 Toyota inicia un cambio en sus métodos de producción. En solo 10 años consiguieron desbancar a EEUU en la producción y en la calidad de lo producido. Este sistema fue importado con el nombre de Lean (quitar, de toda actividad, lo que consume recursos y no crea valor). Es una filosofía basada en la reducción de pérdidas y en el aumento de valor del negocio. Lean incluye principios, métodos y herramientas aplicados para mejorar la velocidad y eficiencia de procesos mediante la detección y eliminación de pasos innecesarios o que producen pérdidas.

Métodos: Revisión sistemática con los términos, lean and six sigma or lean six sigma or six sigma or lean thinking or lean process en Pubmed con un resultado de 987 artículos. Se seleccionan 83 artículos que cumplen las condiciones de aplicación de procesos lean en algún ámbito relativo a intervenciones quirúrgicas, sala de quirófano o servicios de cirugía de los cuales se analizan 46 de ellos con aplicación en el ámbito de la cirugía general.

Resultados: La aplicación de esta metodología a la gestión de servicios de salud es apropiada para las épocas de crisis cuando la demanda sigue creciendo y deja de existir una financiación creciente que pueda adaptarse a dicha demanda, y demostrada su eficiencia sería la base de una sostenibilidad mantenida. El fundamento de esta metodología es la reducción de costes, la mejora del feedback entre el personal sanitario, el incremento de la calidad asistencial y la producción, el descenso de la proporción de pacientes que no acuden a citas programadas, la mejora de los principales indicadores, así como la reducción de errores humanos y del sistema. En resumen una reducción de los costes asociados a la mejora de la calidad. Una vez analizados los artículos al respecto de la metodología Lean se puede concluir que la formación de equipo al respecto de procesos y la mejora del feedback es imprescindible para la implementación de la metodología Lean. El fin mismo del método Lean es la mejora del puesto de trabajo y el aumento de la satisfacción de los trabajadores. La aplicación de la metodología se centra en reducir al mínimo todas las acciones que no aportan un valor añadido para el paciente pero sí implican un menor beneficio o un mayor esfuerzo para el personal o un mayor coste para el paciente. La súper-especialización y estandarización de los procesos y que todos los médicos y personal sean conocedores de sus pasos y los apliquen es fundamental para que se optimice tanto el acto quirúrgico como la estancia perioperatoria. El proceso del control postoperatorio debe estar perfectamente protocolizado para una mejor evolución del paciente, y que evite la demora en el alta por problemas diferentes de la propia evolución del paciente.

Conclusiones: El método lean es una herramienta útil de aplicación en procedimientos quirúrgicos de manera que se intente alcanzar la mayor satisfacción de personal y pacientes con el menor impacto económico para el sistema.