Agradecemos la carta de Zapata-Martín A. sobre la tuberculosis en menores de 3 meses en el departamento de Risaralda (Colombia), la cual pone de manifiesto las dificultades en el diagnóstico clínico y microbiológico de estos pacientes. En su serie de casos, 2 lactantes tuvieron una demora diagnóstica de más de 3 semanas y se realizó cultivo del jugo gástrico únicamente a 3 de los 7 lactantes menores de 3 meses con sospecha de enfermedad tuberculosa.
La vacunación con BCG, que en Colombia se realiza al nacimiento, invalida la interpretación de la prueba de tuberculina. Los nuevos test de diagnóstico inmunológico (IGRA) no están disponibles en muchos laboratorios y tienen baja sensibilidad en lactantes pequeños. El cultivo de aspirado gástrico requiere la recogida de varias muestras y tiene baja sensibilidad en comparación con el cultivo de esputo en adultos. Sin embargo, la rentabilidad diagnóstica de la baciloscopia y el cultivo de jugo gástrico en los lactantes menores de 3 meses es superior a la de los niños de mayor edad1. Además, la confirmación microbiológica se considera el patrón oro de diagnóstico de la enfermedad y permite la realización de antibiograma para la detección de cepas resistentes2. Colombia presenta una tasa muy alta de resistencia a fármacos antituberculosos en menores de 15 años (21% en 2009), con resistencias a isoniazida superiores al 12 y 6,5% de cepas multirresistentes3. Por tanto, consideramos que se debe realizar el mayor esfuerzo posible para la recogida de muestras microbiológicas en todos los pacientes, especialmente en aquellos en los que no exista aislamiento en el caso índice.
En 3 de los lactantes estudiados, el caso índice fue desconocido. En nuestra serie también encontramos 3 pacientes con caso índice desconocido, pero con alta sospecha de tuberculosis genital materna, al presentar las madres prueba de tuberculina positiva, radiografía de tórax normal y no identificarse ningún contacto con tuberculosis bacilífera. La tuberculosis en un lactante menor de 3 meses implica infección congénita o transmisión posnatal a partir de un adulto bacilífero, por lo que es fundamental la realización de un estudio de contactos completo para evitar la transmisión de la enfermedad y la aparición de nuevos casos de tuberculosis4.
Por último, queremos hacer una consideración en cuanto al tratamiento. Todos los lactantes se trataron según el esquema recomendado en Colombia para los menores de 15 años, que consiste en la administración de 3 fármacos (isoniazida, rifampicina y pirazinamida) durante 8 semanas seguida de una biterapia con isoniazida y rifampicina 2 veces por semana hasta completar 6 meses5. Consideramos que dado el alto índice de resistencias, sería importante comenzar el tratamiento con 4 fármacos en caso de no conocerse la sensibilidad de la cepa del niño o del caso índice. Además, recomendamos mantener el tratamiento durante al menos 9 meses en los lactantes menores de 3 meses con tuberculosis, y prolongarlo hasta 12 meses en aquellos con afectación meníngea6.
FinanciaciónNo se ha recibido financiación para la realización de este trabajo.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.