Objetivo docente: Aprender los signos ecográficos de la enfermedad de Crohn que permiten clasificar la enfermedad en los diferentes subtipos. Familiarizarse con los cambios ecográficos que miden la actividad inflamatoria y son útiles para monitorizar el tratamiento médico. Conocer las posibilidades de la ecografía en la monitorización de tratamiento en la enfermedad de Crohn.

Discusión: La ecografía del tubo digestivo ha surgido como una técnica alternativa de imagen para el diagnóstico y el seguimiento de los pacientes con enfermedad de Crohn, siendo tan segura como la TC o la RM para detectar su extensión intra y extramural. El modo B puede evaluar la localización y la longitud de los segmentos afectados y permite la identificación de complicaciones transmurales, como fístulas o abscesos, zonas de estenosis y signos de obstrucción intestinal. El Doppler color o el contraste ecográfico son herramientas que visualizan y cuantifican la vascularización parietal ayudando a determinar la actividad inflamatoria de la enfermedad, pudiendo ayudar a diferenciar entre flemón o absceso, o entre estenosis fibrótica o inflamatoria. La introducción de nuevos fármacos en el tratamiento, especialmente los inmunomoduladores y los biológicos, ha significado un cambio importante en cuanto a los objetivos terapéuticos. El simple control de los síntomas que durante años se consideró el objetivo terapéutico primario, ha cambiado hacia una remisión considerada como la desaparición de las lesiones mucosas intestinales en la ileocolonoscopia, ya que se asocia a mejor pronóstico. Como alternativa a la endoscopia, que es invasiva y además no valora los segmentos intestinales proximales, se está proponiendo la monitorización con técnicas seccionales de imagen, especialmente las que no usan radiación. La literatura ha demostrado que los cambios ecográficos tras tratamiento tienen buena correlación con los cambios endoscópicos, siendo además una técnica segura para evaluar la curación de la mucosa intestinal. La utilización de la ecografía en la monitorización del efecto terapéutico puede ayudar a optimizar el tratamiento y a disminuir el número de colonoscopias.

Referencias bibliográficas

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