Objetivos: Las malformaciones congénitas de fosa posterior presentan un amplio espectro de hallazgos radiológicos, e incluyen desde variantes anatómicas de la normalidad a anomalías graves. La resonancia magnética (RM) permite la valoración sistemática de la anatomía del cerebelo y su patología siendo de gran utilidad el empleo de parámetros biométricos.

Material y métodos: Hemos revisado los estudios RM cerebral de un grupo de 327 neonatos (edad: 1-28 días de vida) realizados en un hospital pediátrico terciario entre los años 2012-2016. Se ha utilizado un equipo de RM 1,5 T Signa Excite GE incluyendo secuencias T1 FLAIR, DPT2, DWI, T2, T2* y T1 SPGR volumétrico. Se ha efectuado mediciones de diámetro transverso del cerebelo, diámetro craneocaudal del vermis, ángulo tegmento-vermiano así como análisis de las fisuras cerebelosas y de la situación del tentorio. Se ha valorado asimismo la presencia o no de patología supratentorial.

Resultados: El rango del ángulo tegmento-vermiano en un grupo control es de 3-14,3 grados mientras que varios pacientes con malformación de la fosa posterior presenta valores del ángulo mayores de 15 grados. También nos llamaron las diferencias entre los valores de diámetro craneocaudal del vermis entre los ambos grupos de pacientes.

Conclusiones: La revisión sistemática de las estructuras de la fosa posterior aumenta la sensibilidad para detectar la presencia de posibles malformaciones congénitas. Dichas anomalías pueden ser clasificadas según los criterios basados en los parámetros biométricos de RM, facilitando el diagnóstico diferencial, orientando el diagnóstico genético y aportando factores de buen o mal pronóstico neurológico.