MAMÁ, ME DUELE LA ESPALDA
Hospital Materno-Infantil, Málaga, España.
Objetivos docentes: El dolor de espalda en el niño es menos frecuente que en el adulto, pero en los últimos años se está produciendo un aumento de la incidencia. Constituye un reto diagnóstico y el papel del radiólogo es conocer qué tipo de pruebas de imagen se deben realizar, las variantes anatómicas normales así como las diferentes causas que pueden originarlo.
Revisión del tema: Aunque el dolor de espalda en pediatría es menos frecuente, va a ser un motivo habitual de consulta y una causa importante de demanda de exploraciones radiológicas. Las pruebas de imagen van a permitir llegar al diagnóstico en muchas ocasiones y descartar patologías graves. No existe una estandarización de cuales debemos usar, siendo la radiografía simple la primera a realizar. Otras técnicas como TC, RM o gammagrafía se utilizaran según las características del dolor y la sospecha diagnóstica. El radiólogo debe conocer que la columna vertebral del niño es una estructura en continuo cambio y estar familiarizado con la anatomía normal para no confundir variantes normales con hallazgos patológicos. Las causas pueden ser múltiples, y siempre habrá que descartar aquellas etiologías graves en base a los signos de alarma. Las alteraciones de la alineación, en sí misma no es un proceso doloroso, aunque a larga puede provocarlo y serán estudiadas mediante telerradiografías.
Conclusiones: La patología de la columna vertebral en el niño es compleja, abarcando un gran número de entidades. Es importante conocer sus características normales así como sus variantes. La radiografía simple es la primera prueba a realizar.