To review the incidence of and to analyze the factors possibly contributing to perioperative complications in patients undergoing robotic radical prostatectomy in our experience of 250 procedures.
Materials and methodsAn analytical, descriptive, retrospective study was conducted of 250 consecutive patients who underwent robotic radical prostatectomy during a period of three years and two months (January 2006-March 2009). Data recorded included age, preoperative Gleason grade and PSA, and prostate volume. All procedures were performed by three surgeons through a transperitoneal laparoscopic approach using a four-arm daVinci robotic system. Microsoft Excel support was used. Surgical variables recorded included setup time, console operating time, bleeding volume, transfusion rate, mean hospital stay, and urethral catheterization time. Incidences and intraoperative and postoperative early and late complications occurring in these patients were reviewed.
ResultsDemographic data recorded included: mean age, 61.5 years (47–74); mean preoperative PSA, 8.18ng/mL (2.6–34); mean Gleason grade, 6.8 (2–9); and mean prostate volume 34.9mL (12–124). Surgical variables recorded included: console setup time, 10.8min (6–47): console operating time, 125min (90–315); mean bleeding, 150mL (50–1150); and a 3.6% (9/250) transfusion rate. There was no perioperative mortality, and no conversion to open or laparoscopic surgery was required. Ninety-six percent of patients (240/250) had an adequate postoperative course, with a mean hospital stay of 4.2 days (3–35) and urinary catheter removal after 8 (5–28) days. Overall complication rate was 10.6%, with major complications, consisting of five surgical and three medical complications, occurring in only 3.2% of patients (8/250). Repeat surgery was required in 1.6% of cases (4/250) for late peritonitis due to cecal perforation, bleeding from epigastric artery, perineal percutaneous drainage of retrovesical hematoma, and pelvic urinoma following accidental bladder catheter dislodgment. One patient required selective arterial embolization for persistent late hematuria due to vesical artery fistula. Medical complications included acute renal failure due to thrombotic purpura resolved with hemodialysis in one patient and late pulmonary embolism managed with anticoagulation in two patients. Robot malfunction with no surgical implications or need for conversion to open surgery occurred in four patients (1.6%). Surgical maneuvers required to resolve late complications included oneumbilical hernia repair, one meatotomy for meatal stenosis, one bladder neck endoscopic incision after contracture, and one endoscopic removal of Hem-o-lok and vascular clip following erosion-migration into the bladder.
ConclusionsRobotic radical prostatectomy is a safe and reproducible procedure with optimal functional and oncological results, a shorter learning curve, greater comfort and vision for surgeons, and a complication rate similar to and even better than reported for open and laparoscopic surgery series. Complications decrease with the learning curve, but surgical team experience continues to be the key factor to achieve better results.
El objetivo del estudio es revisar la incidencia y analizar los factores que puedan contribuir a las complicaciones perioperatorias en los pacientes a los que se realiza una prostatectomía radical robótica basados en nuestra experiencia sobre 250 procedimientos.
Material y métodosRealizamos un estudio retrospectivo, descriptivo y analítico sobre 250 pacientes consecutivos a los que realizamos prostatectomía radical robótica durante un periodo de 3 años y 2 meses (enero 06-marzo 09). Se registran datos demográficos como: edad, PSA y grado de Gleason preoperatorio y volumen prostático. Todas las intervenciones fueron realizadas por tres cirujanos. Realizamos un abordaje laparoscópico transperitoneal con sistema robótico daVinci de 4 brazos. Empleamos un soporte informático Microsoft Excel. Los parámetros quirúrgicos recogidos son: tiempo de instalación, tiempo de consola, volumen de hemorragia, tasa de transfusión, estancia media y tiempo de sondaje uretral. Revisamos las incidencias y complicaciones intraoperatorias y postoperatorias precoces y tardías en esta serie de pacientes.
ResultadosLos datos demográficos de la serie fueron: edad media de 61,15 años (47–74), PSA medio preoperatorio de 8,18ng/ml (2,6–34ng/ml), Gleason preoperatorio de 6,8 (2–9) y volumen prostático de 34,9 cc (12–124 cc). Los parámetros quirúrgicos recogidos son: tiempo de instalación: 10,2min (6–47min), tiempo de consola 125min (90–315min), hemorragia media de 150ml (50–1.150ml) con una tasa de transfusión del 3,6% (9/250). No se registró mortalidad perioperatoria ni fue preciso realizar ninguna reconversión a cirugía abierta o laparoscópica en los 250 procedimientos. Un total del 96% de los pacientes (240/250) tuvieron un curso postoperatorio adecuado sin incidencias reseñables con una estancia media de 4,2 días (3–35 días) y retirada de sonda vesical a los 8 días (5–28 días). La tasa global de complicaciones es del 10,4% con solo 3,2% de complicaciones mayores (8/250): 5 complicaciones quirúrgicas y 3 médicas. La tasa de reintervención del 1,6% (4/250): una peritonitis tardía por perforación cecal, 1 hemorragia por lesión de arteria epigástrica, 1 drenaje perineal percutáneo de hematoma retrovescial y una revisión por urinoma tras desalojo accidental de sonda vesical. Un paciente precisó embolización arterial selectiva por hematuria tardía persistente tras fístula de arteria vesical superior. Entre las complicaciones médicas: 1 caso de fracaso renal agudo por púrpura trombótica trombocitopénica resuelto mediante hemodiálisis, y 2 embolias pulmonares tardías resueltas mediante anticoagulación. Se registraron 4 fallos del sistema robótico (1,6%) sin implicación ni necesidad de reconversión quirúrgica. Entre las complicaciones tardías que precisaron alguna maniobra quirúrgica para su resolución destacan: una reparación de hernia umbilical, una meatotomía por estenosis de meato uretral, una incisión endoscópica de esclerosis de anastomosis y una extracción endoscópica de clip vascular metálico y Hem-o-lock tras erosión-migración vesical.
ConclusionesLa prostatectomía radical robótica es una técnica segura y reproducible con óptimos resultados oncológicos y funcionales, con curva de aprendizaje más corta, con excelente ergonomía y visión para el cirujano y con una incidencia de complicaciones comparable e incluso favorable a las series de cirugía abierta y laparoscópica. Las complicaciones se reducen con la curva de aprendizaje sin olvidar que es la experiencia del equipo quirúrgico el factor clave para conseguir mejores resultados.
Artículo
Comprando el artículo el PDF del mismo podrá ser descargado
Precio 19,34 €
Comprar ahora