La anisakiasis es una zoonosis parasitaria en la que el hombre se convierte en huésped accidental al consumir pescado insuficientemente cocinado o crudo. La incidencia de esta entidad está aumentando, aunque hoy todavía se considera una enfermedad infradiagnosticada. La anisakiasis intestinal puede presentarse como un cuadro de abdomen agudo u originando un proceso de íleo mixto por estenosis secundaria a la inflamación del segmento afectado. Las manifestaciones clínicas son variadas, desde pacientes asintomáticos a otros con síntomas digestivos o alérgicos. En muchos de estos pacientes, lo que destaca son las manifestaciones hiperérgicas secundarias a la infestación.
Figura 1.—Obstrucción de ID proximal, apreciando distensión de asas yeyunales.
ESTUDIO CLÍNICOSe revisan las historias de 14 pacientes, con edades comprendidas entre 10-89 años, diagnosticados de anisakiasis intestinal entre los años 2000-2003 en el HCU Lozano Blesa de Zaragoza. El cuadro clínico predominante fue: dolor en fosa iliaca derecha (FID) (6 casos), obstrucción intestinal (3 casos), dolor abdominal difuso con vómitos (3 casos), dolor epigástrico (1 caso) y rectorragia (1 caso). Uno de los pacientes presentó una reacción alérgica, en forma de eritema papuloso, asociada a la clínica digestiva. Algunos enfermos habían tenido varios ingresos previos al diagnóstico definitivo.
El antecedente de ingesta de pescado crudo o poco cocinado y la presencia de eosinofilia se encontró en el 75 % de los casos, la IgE específica frente a anisakis estaba elevada en el 80 % y había leucocitosis en el 40 % de ellos.
ESTUDIO RADIOLÓGICOSe encontraron signos radiológicos sugestivos de proceso inflamatorio intestinal en el 60 % de los casos.
Radiografía simple de abdomen: se apreciaron signos de obstrucción intestinal (fig. 1), engrosamiento parietal (fig. 2) y asa centinela en FID.
Ecografía: mostró un engrosamiento parietal y asas distendidas, indicando oclusión, en 6 casos (figs. 3 y 4).
Tránsito intestinal: realizado a 4 de estos pacientes, observando signos de ileítis inespecífica (figs. 5 y 6).
Se siguió una actitud conservadora en 12 pacientes, siendo sometidos los 2 restantes a intervención quirúrgica por cuadro de abdomen agudo ante la sospecha de apendicitis.
Figura 2.—Engrosamiento mucoso en huella dactilar.
Figura 3.—Engrosamiento parietal del segmento afecto.
DISCUSIÓN
La anisakiasis es una zoonosis parasitaria producida por larvas de nematodos de la familia “Anisikidae”, que tiene como huésped definitivo a los grandes mamíferos marinos. El hombre se considera un huésped accidental al consumir pescado insuficientemente cocinado o crudo en salazón, ahumado o en vinagre1 .
España es el segundo país consumidor de pescado por habitante en el mundo, a pesar de ello la incidencia reconocida de anisakiasis es baja, aunque podría ser mayor, por lo que se considera una enfermedad infradiagnosticada2 .
Las manifestaciones clínicas son variadas, fundamentalmente de tipo alérgico y/o digestivo, y se deben a 2 mecanismos:
1. Reacciones de hipersensibilidad inmediata mediada por IgE. Los pacientes desarrollan cuadros alérgicos como urticaria y angioedema pocas horas después de la ingesta de pescado.
Figura 4.—Edema de los pliegues de Kerckring.
2. Acción local del parásito. La sintomatología depende del tamaño del inóculo y del lugar de penetración del parásito en la mucosa del tubo digestivo. En este caso los síntomas tardan de 12 a 48 horas en aparecer3 .
Se diferencian 3 formas de presentación del proceso: gástrica, intestinal y colónica (5 %). El segmento del tubo digestivo más frecuentemente afectado, es el íleon4 . Los hallazgos radiológicos son inespecíficos. En la ecografía destaca la presencia de: engrosamiento parietal de 5-15 mm del segmento afecto, edema de los pliegues de Kerckring, disminución del peristaltismo y pequeña cantidad de líquido libre peritoneal entre asas. En los estudios baritados se observan signos de ileítis inespecífica, edema de pliegues con engrosamiento en huella dactilar, escasa adherencia del bario y cambios de calibre por espasmos.
Figura 5.—Signos inflamatorios intestinales.
Figura 6.—Estenosis extrínseca del segmento ileal debido a cuadro inflamatorio de meso.
Estas alteraciones radiológicas se corresponden con los hallazgos anatomo-patológicos: edema, infiltración por eosinófilos y formación de granulomas5 .
La demostración de la larva del anisakis confirma la sospecha diagnóstica, sin embargo, esto es infrecuente, por lo que el diagnóstico definitivo de anisakiasis se suele hacer por métodos inmunológicos. Se utiliza la determinación en el suero de IgE frente al parásito o, de forma más específica, la de antígenos mediante anticuerpos monoclonales.
El diagnóstico diferencial se debe realizar con numerosos procesos como la enteritis eosinófila, apendicitis, diverticulitis, enfermedad de Crohn, isquemia, tuberculosis y neoplasias6 .
Se trata de una enfermedad autolimitada mejorando los síntomas en 1-2 semanas, por lo que debe tenerse presente para hacer el diagnóstico adecuado, mantener una actitud conservadora y evitar al paciente una cirugía innecesaria.
Las pruebas radiológicas descritas son inespecíficas, pero en un paciente con clínica abdominal aguda e ingesta reciente de pescado crudo o poco cocinado y presencia de signos inflamatorios intestinales debemos incluir la anisakiasis intestinal entre las posibles etiologías del proceso dada su creciente incidencia.
Correspondencia:
B. Carro AlonsoHCU Lozano Blesa. Servicio de Radiodiagnóstico 50009 Zaragoza. Spain