Sres. Directores: El ácido aminocaproico (AAC) es un análogo sintético de la lisina utilizado como hemostático. Inhibe la fibrinólisis al formar un complejo con el plasminógeno en el sitio en que éste se ha de fijar a la lisina, bloqueando su interacción con los activadores del plasminógeno1.
Las reacciones adversas (RA) descritas para el AAC son: alteraciones digestivas (dolor abdominal, náuseas, diarrea), neurológicas (mareo, cefalea, acúfenos y, con menor frecuencia, convulsiones), erupciones cutáneas, miopatía y mioglobinuria, fenómenos trombóticos, congestión nasal y hepatotoxicidad, entre otras. Tras la infusión intravenosa rápida pueden presentarse hipotensión, bradicardia y arritmias2. La inhibición de la eyaculación es una RA rara descrita sólo en una serie de 5 casos de pacientes hemofílicos3.
Se presenta el primer caso de inhibición de la eyaculación asociada al tratamiento con AAC en un paciente no hemofílico.
Varón de 45 años de edad, sin hábitos tóxicos. Entre sus antecedentes personales destacan hemorroides externas que se habían trombosado en 2 ocasiones, con necesidad de tratamiento quirúrgico. Acudió a la consulta por presentar desde hacía semanas dispepsia, astenia, pérdida de 7 kg de peso con apetito conservado y, en las últimas 24 horas, rectorragia severa. En los 2 meses previos había sufrido otros 3 episodios de rectorragia que atribuyó a sus hemorroides. La toma de constantes reveló una tensión arterial de 104/68 mmHg y una frecuencia cardíaca de 102 ppm. La exploración física resultó normal, exceptuando la existencia de una pequeña hemorroide externa a las 6 horas. En la analítica destacaba: hematíes, 4,25*1012/l; hemoglobina, 90 g/l; hematócrito, 29,6%; VCM, 69,7 fl; HCM, 21,2 pg; hierro, 2,15 µmol/l; ferritina, 2 µg/l; creatinina, 115 µmol/l; TSH 2,3 mU/l, y VSG, 35 mm/h. La fibrogastroscopia y el enema opaco resultaron normales. La colonoscopia reveló la existencia de un paquete hemorroidal interno de grado III gigante, con una mucosa rectal muy friable. Se le recomendó dieta blanda con abundante ingesta hídrica y se indicó tratamiento con sulfato ferroso (1.050 mg/día v.o.), así como AAC (16 g/día v.o.) en caso de nueva rectorragia.
Desde la primera consulta hasta que se practicó la hemorroidectomía 3 meses después, el paciente recibió 2 tandas de AAC. La primera tras la visita inicial, a una dosis de 16-20 g/día durante 5 días. Tras presentar una nueva rectorragia a los 40 días, el paciente reinició el tratamiento con AAC a las mismas dosis durante 7 días, corrigiéndose de nuevo la hemorragia. No obstante, refería que mientras había estado tomando el fármaco mantuvo relaciones sexuales con su pareja habitual, presentando erección y orgasmo normales, pero sin eyaculación. Antes de iniciar el AAC, y durante el tiempo transcurrido entre la primera y la segunda tanda de AAC, la eyaculación había sido estrictamente normal y así continúa siendo después de haber suspendido definitivamente el fármaco tras practicarse con éxito la hemorroidectomía, manteniendo el tratamiento con sulfato ferroso, a la misma dosis descrita, durante 2 meses.
La existencia de una secuencia temporal plausible entre el inicio del AAC y la presentación de la sintomatología, el hecho de que ésta desaparezca al retirar el fármaco y reaparezca de nuevo tras su readministración, junto con la ausencia de una explicación alternativa, refuerzan la relación causal entre el AAC y la ausencia de eyaculación4.
Si bien se trata de una RA incluida en el perfil general de efectos indeseables del AAC descrito en la bibliografía de referencia2, tras una búsqueda en MEDLINE (1966-1997) sólo hemos encontrado una cita que haga referencia a alteraciones de la eyaculación en relación con el uso de este fármaco3. Se trata de una publicación que describe una serie de 5 pacientes hemofílicos que presentaron inhibición de la eyaculación sin impotencia ni cambios en la libido en el curso del tratamiento con AAC (24 g/día durante 10 días) tras una extracción dental. En todos los casos la sintomatología se resolvió tras la suspensión del medicamento y en uno de los pacientes reapareció coincidiendo con una nueva tanda de AAC. El mecanismo de producción de esta RA es desconocido.
El AAC fue comercializado en España en 1964. Desde el inicio del funcionamiento del Programa de Notificación Espontánea de Sospechas de RA en 1983, el Sistema Español de Farmacovigilancia (SEFV) no ha recibido ninguna notificación de sospecha de alteración alguna de la eyaculación por AAC salvo el caso aquí descrito. Se trata, pues, del primer caso comunicado en España, así como posiblemente el único de ámbito mundial en un paciente no hemofílico. El conocimiento por parte del clínico de los efectos indeseables raros, como es el caso descrito, le permiten informar al paciente sobre las RA asociadas al tratamiento, lo que disminuye la ansiedad añadida al problema inicial que motivó su prescripción. La notificación sistemática de las sospechas de RA al SEFV mediante la tarjeta amarilla permite avanzar en este conocimiento.